INTERNACIONALES: POR GABRIELA CALDERON DE BURGOS
¿De la cuna a la tumba?

A los indignados en los países desarrollados se les inculcó desde niños la idea de que el Estado los cuidaría “desde la cuna hasta la tumba”. El Estado les daría educación, atención médica, una pensión en su jubilación, etc. Como no solo les prometieron estos beneficios sino que les dijeron que tenían derecho a ellos, los indignados naturalmente esperan recibirlos de manera gratuita. ¿Son gratis estos beneficios? Si no lo son, ¿quién los paga y cuándo?