Inmigración y legalidad
Las corrientes inmigratorias en Argentina datan de épocas lejanas. El más importante de los períodos migratorios dio inicio con con la Constitución de 1853 y el precepto alberdiano de "...gobernar es poblar..". A partir de esa época, comenzamos a recibir con los brazos abiertos "...a toda persona del mundo que quiera habitar el suelo argentino...". Tal como lo establece el Preámbulo de la Constitución Nacional del año bajo mención.