NOTICIAS DEL CAMPO: PUBLICADO EN LA WEB MUNDOCAMPO.COM

"La ruralidad, en su gran mayoría, ha votado por la Presidente Cristina Fernández"

En el programa de charlas que ofreció la 39ª Exposición Rural de Chacabuco, estuvo presente Juan Cruz Jaime, un politólogo que brindó un panorama interesante y amplio de cómo se desempeña el ruralismo en su interacción con el resto de la sociedad. Minutos antes de ofrecer su conferencia, estuvo en el stand de Mundocampo donde se registró el siguiente diálogo.

16 de Septiembre de 2011

-¿Cuál es su visión respecto del papel jugado por el campo desde el conflicto de 2008 hasta la fecha?

-Yo sostengo que el ruralismo no ha hecho bien los deberes a la hora de acercarse a la comunidad rural que lo rodea y eso tiene algunas consecuencias políticas -como se ha visto- pero también tiene algunas consecuencias sociales que el ruralismo tiene que tratar de solucionar.  Creo que lo generado en 2008 fue un movimiento de abajo hacia arriba de lo más democrático que se ha visto en la historia del gremialismo agropecuario; lo que pasó es que eso después no se abonó, no se pudo mantener y -cuando hubo que pasar de la protesta a la propuesta- el gremialismo rural volvió a mostrar algunas formas anticuadas de manejo que no lograron seducir al resto de la comunidad rural que lo rodeaba.  Me parece que sobre esto es donde hay que hacer más autocrítica y sobre lo que más hay que pensar.
 
-¿Y cuáles serían los aspectos a mejorar?

-En primer lugar, la comunicación. Yo creo que el ruralismo no invierte en comunicación y lo ve como un gasto cuando en realidad es una inversión; ustedes sabrán mejor que yo lo que cuesta conseguir anunciantes en el sector (risas).  Cuando se comprenda que un buena comunicación es un inversión, va a ser diferente. Ahora bien, también es necesario tener una estrategia comunicacional, que es algo que también falta: salen todos a decir lo que piensan, sin mayor estrategia, y eso genera algunos cortocircuitos como los que produjo alguna frase desafortunada que se ha escuchado últimamente. Finalmente, creo que el ruralismo todavía no ha entrado en la comunicación 2.0; hoy hay sociedades rurales que todavía no tienen página web, que no saben lo que es comunicar desde el facebook o desde el twitter y es hora de empezar a comunicar desde ahí para llegar a los jóvenes que son quienes le van a dar la sangre nueva a las rurales del interior.
 
-Durante el conflicto con el gobierno emergió con mucha fuerza el movimiento de autoconvocados. ¿Porqué cree que se dio y qué pasó con ese sector?

-Considero que el movimiento de autoconvocados nace por la crisis de representatividad que había en el gremialismo tradicional; lo que sí creo es que -por suerte- a partir del 2008 y, en el 2009, muchos autoconvocados se fueron metiendo en las diferentes gremiales -de las cuatro que componen la Mesa de Enlace- y eso fue muy positivo.
 
-Después del conflicto, el campo logró inserción legislativa. Desde concejales en las localidades del interior hasta diputados nacionales. ¿Porqué ahora perdió peso político el sector?

- En 2009 eso se aprovechó muy bien.  Lo que pasó en estas últimas elecciones es que los candidatos ligados al campo venían pegados a la Coalición Cívica que no recibió el apoyo popular que se esperaba y eso de alguna manera desinfló las posibilidades de sumar agrodiputados o agroconcejales en los pueblos.  Incluso Mario Llambías, ex presidente de CRA, e integrante de la Mesa de Enlace durante el conflicto, está en un límite muy finito para entrar o no como diputado nacional. Me parece que en 2009 esto se aprovechó mucho mejor porque también entonces la oposición no estuvo tan disgregada como ahora y eso hizo que los agrodiputados pudieran entrar.  ¿Cómo se desempeñaron?  Yo estoy en contacto con muchos de ellos y puedo decir que algunos de ellos trabajan bien y armoniosamente y que, otros, decidieron hacer su carrera política olvidándose del gremialismo, pero, eso ya está en la conciencia de cada uno.
 
-A partir de la crisis de 2008 el gobierno creó el Ministerio de Agricultura, Ganadería y Pesca y puso al frente a Julián Domínguez. ¿Cómo evalúa la gestión del ministro?

-Cuando estábamos en medio del conflicto agropecuario, una de las banderas que se levantaban era que se elevara la Secretaría de Agricultura al rango de ministerio.  Creo que en eso la presidenta de la nación estuvo muy hábil, generando un organismo institucional que de alguna manera le puso paños fríos al conflicto.  Así, ella no quedó como la responsable directa de la negociación con el sector sino que Julián Domínguez se convirtió de alguna manera en ese fusible de las negociaciones entre el campo y el gobierno.  Eso me pareció muy estratégico por parte del gobierno porque, en su momento, desactivó un conflicto que casi lo llevó a su fin.   Respecto de la gestión como ministro de Julián Domínguez, puedo decir que para el gobierno ha sido buena porque lo ha premiado con el primer lugar en la lista de diputados nacionales por la provincia de Buenos Aires.  Respecto de los colaboradores que eligió, tanto Lorenzo Basso cuanto Alejandro Lotti, ya eran personas conocidas y respetadas en el entorno agropecuario; eso explica también porqué hoy entidades como Coninagro y Federación Agraria tienen un acercamiento con el gobierno. Hoy hay un ámbito de discusión institucional y yo, como politólogo, creo que esos ámbitos están para ser aprovechados.
 
-Hay algunas discusiones sobre si el campo votó o no, en las elecciones del 14 de agosto, por la presidenta Cristina Fernández. ¿Cuál es su opinión?

-Yo creo que un porcentaje de los productores agropecuarios ha votado a la presidenta aunque sea un voto vergonzante y no quieran decirlo porque no queda bien dentro del ambiente.  Pero también hay que saber que el campo son los empleados rurales, son los contratistas, son la gente del pueblo y eso es la ruralidad y entonces volvemos al principio de esta charla: si el ruralismo hubiese sabido hacer ruralidad ésta hubiera votado distinto, pero yo creo que la ruralidad ha votado a Cristina Fernández de Kirchner en su gran mayoría.

Publicado en la web Mundo Campo, en sociedad informativa con El Ojo Digital