Narcotráfico en el Chaco: Javier Oteo y los simuladores. Las pistas clandestinas

Motiva la presente nota, una aclaración en respuesta a lo publicado al prestigioso medio La Gaceta, de la Provincia del Chaco, en el siguiente enlace:

http://www.lagacetachaco.com/index.php/component/content/article/35-noticias/6654-javier-oteo-responde-a-claudio-izaguirre-q-la-lucha-contra-el-narcotrafico-es-una-politica-de-estado-q.html

Javier Oteo, Subsecretario de Seguridad y Justicia de la Provincia del Chaco, ha tenido la feliz idea de salir a los medios locales a confrontarme. De esta manera, nos brinda la oportunidad de discutir públicamente los alcances del narcotráfico en el norte de nuestros país.

En recientes declaraciones, Oteo afirmó que los operativos se habían incrementado en un 500%, lo que deja entrever que antes de él, los procedimientos existían en un 500% menos. Tales expresiones ciertamente no dejan bien parados ni a su antecesor en el cargo, ni al propio Gobernador Jorge Milton Capitanich Popovich.

Como es públicamente conocido, la intención de la Asociación Antidrogas se justifica en el aporte de datos que sirvan para asistir a las autoridades en la lucha contra las drogas, por lo cual y gracias a que Oteo ha anunciado que la lucha contra las drogas es una cuestión del Estado Provincial, le exigimos al mencionado funcionario que inicie las acciones inmediatas para la destrucción de las 141 pistas clandestinas que tiene en el territorio del Chaco, solicitud que oportunamente hiciéramos al Señor Gobernador Capitanich, el pasado 24 de julio de 2009.

Aprovechamos el presente escrito para adjuntar un listado con ubicaciones exactas de algunas pistas clandestinas en la Provincia. Y, por cierto, tenemos mucho más:

http://mapadelnarcotrafico.blogspot.com/search?updated-max=2009-07-24T08%3A44%3A00-07%3A00&max-results=7

En el campo de las drogas, han quedado algunos temas inconclusos, como ser el del Diputado Egidio García. Este, con engaños de un asesor de José Mongeló, subieron en su camioneta a un particular de apellido Fernández, quien portaba doce (12) kilogramos de marihuana consigo. Ello, tras la detención efectuada en la ruta por la policía de la provincia de Chaco, dio nacimiento a un escándalo de proporciones y, cuando el Fiscal Corregido comenzó a investigar los cruces telefónicos del Señor Fernández con la Gobernación de la provincia, fue removido de su cargo. Las gravísimas carencias de información respecto de este tema nos fuerza a consultar al funcionario Oteo, de cara a los detalles que hacen al final de la investigación.

Vale la pena recordar al Señor Javier Oteo que quien esto escribe se apersonó en la localidad de Paranacito, Puerto Vilelas, constatando no solo la existencia de espacios preparados para aterrizajes de aeronaves sino que, además, efectué junto a la Diputada (MC) Gladys Soto, nuestro Delegado en esa provincia Miguel Chamorro y un grupo de vecinos, un acampe de dos días sobre una de las pistas clandestinas de esa localidad. En la ocasión aquí descripta, hemos podido claramente escuchar el aterrizaje de aeronaves en medio de esas tranquilas tardes chaqueñas.

Profundizando sobre las distintas aristas que detallan la narcoactividad en esa provincia, nos vemos obligados a recordar que por esa zona supo transitar la Señora María Alejandra López Madrid, reconocida lugarteniente de Joaquín “El Chapo” Guzmán Lerea, quien es líder del Cártel mexicano de Sinaloa. Fue cuando denunciamos su presencia que la mencionada Señora cruzó al Paraguay, siendo detenida en aquel país catorce días después y cuya actividad en la Provincia fue descripta por José Reveles, en su libro "El Cártel Incómodo". Las versiones refirieron que José Mongeló habría tenido conversaciones privadas con López Madrid, y que esas reuniones habrían sido pactadas por un alto funcionario del Gobierno Nacional.

Jamás conocimos la totalidad de actividades que esa Señora desarrolló en la provincia pero, a posteriori, nos enteramos respecto de su intención de lavar dinero a través de iglesias evangélicas.

Hacia mayo de 2009, fallece -ultimado de un disparo en la cabeza- el ciudadano colombiano Ricardo Gálviz Cardona de nacionalidad colombiana, primo de Juan Sebastián Gálviz Ramírez. El mencionado fue acribillado en la localidad de San Fernando, Provincia de Buenos Aires, en febrero de ese mismo año. Pocas semanas después, la policía chaqueña detenía a varios colombianos que egresaban de la Isla del Cerrito, con rumbo hacia la capital, Resistencia. Estas personas declararon, como medio de vida, la parapsicología.

La Isla del Cerrito y su rol como espacio estratégico del narcotráfico fue denunciada en distintas oportunidades por la Asociación Antidrogas de la República Argentina, recordando que alguno de los propietarios de tierras cercanas a las orillas del río de esa localidad fueron expulsados por colombianos bajo amenaza de muerte y que, además, eran utilizados menores de edad para el traspaso de mercadería ilegal de una orilla a la otra.

El funcionario Javier Oteo debe incluso explicar cuál es el origen de la droga que va a parar al consumo de niños y jóvenes chaqueños, cuáles son las rutas por las cuales estas mercaderías ingresan al país, por qué motivo funcionarios municipales hacen prácticas de tiro con armas de guerra adiestrando a civiles, bajo la atenta observancia de de policías uniformados y si acaso esto obedece -o no- a la formación de cuadros paramilitares.

Es necesario remarcar que los servicios de inteligencia de las distintas fuerzas deben comprar de su propio bolsillo los elementos imprescindibles para las investigaciones, careciendo de las provisiones necesarias que los gobiernos debieran entregarles para realizar las tareas encomendadas. Nos referimos puntualmente a largavistas y cámaras fotográficas de visión nocturna, grabadores, cámaras ocultas, filmadoras, radares móviles, vehículos de alta gama y órdenes de allanamiento inmediatas para actuar ante casos de flagrancia.

La Asociación Antidrogas ha aceptado el convite del Señor Javier Oteo, al tiempo que propone una mesa de diálogo para hacer del Chaco, de una vez por todas, una provincia libre de drogas, con funcionarios comprometidos y con ciudadanos comunes dispuestos a apuntalar esa decisión.