7J: tras los cacerolazos, convocan a marchar a Plaza de Mayo el jueves 7 de junio. Contradicciones en el Gobierno
A traves de cadenas de correo electrónico, Facebook y Twitter, ha comenzado a difundirse una nueva convocatoria ciudadana, pautada para el próximo jueves a las 18:30 horas. La sentencia que identifica la propuesta: "No queremos que se vayan; queremos que nos escuchen".
Después de las ruidosas protestas de los pasados 1 y 2 del corriente (que los medios masivos de comunicación reprodujeron con escaso interés), grupos de ciudadanos están convocando por estas horas a nuevas manifestaciones para el próximo jueves 7, a partir de las 18:30 horas. La propuesta invita al ciudadano a hacerse oír en su barrio o ciudad y, en el caso de la Ciudad de Buenos Aires, a trasladarse a la tradicional Plaza de Mayo.
Para la ocasión que ya comienza a calificarse de "7J", incluso se ha creado un espacio en la red social Facebook -de nombre "Indignados"-, en la URL http://www.facebook.com/events/222092147910608/. La misma destaca por los miles de ciudadanos que ya han confirmado su participación, sin importar el lugar geográfico en el que residan o se encuentren en ese momento.
El moméntum elegido coincide con una creciente preocupación, a raíz de nuevas declaraciones del Senador Nacional Aníbal Fernández. El ex jefe comunal de Quilmes ha anunciado una virtual devaluación para este lunes, revelando las intenciones del Gobierno Nacional para llevar la cotización del dólar oficial a $5,10. Aún cuando el funcionario no utilizó puntualmente el término "devaluación", en sus palabras expuso los temores de la Administración Fernández Wilhelm de Kirchner de cara a la sostenida demanda del billete estadounidense por parte del público. Lo que se persigue desde el gobierno federal es que las casas de cambio -que operan con tasa oficial- incrementen la cotización.
En otro orden, el matutino La Nación publicó este domingo una columna en la cual se describe la atención que ha prestado la Presidente de la Nación a las movilizaciones de la pasada semana (http://www.lanacion.com.ar/1478793-preocupa-a-cristina-la-vuelta-de-los-cacerolazos). El autor -Mariano Obarrio- destaca en su escrito que la conferencia de prensa de Axel Kicillof (Economía) para desmentir un plan pesificador obedeció a la necesidad de morigerar los reclamos callejeros o, cuando menos, removerlos de la agenda de los medios.
No obstante, las contradicciones entre referentes del oficialismo no han encontrado su único reflejo en la confusa exposición del Senador Aníbal Fernández. Hace horas, el Gobernador de la Provincia de Córdoba José Manuel De la Sota pareció desprenderse violentamente del discurso del Ejecutivo, declamando que "la gente empieza a pensar que algo anda mal" cuando se notifica respecto de los controles sobre el dólar. Por su parte, la AFIP -conducida por el cuestionado Ricardo Echegaray- desmintió, a través de comunicados públicos, su responsabilidad en el cepo cambiario establecido. La repartición cargó culpas sobre el Banco Central de la República Argentina, en donde Mercedes Marcó del Pont es sindicada como la ideóloga de las maniobras. La renovación de las protestas de productores agropecuarios en contra del impuestazo de Daniel Scioli y la amenaza de demostraciones públicas por parte del jefe del gremio Camioneros, Hugo Moyano, también han contribuído a caldear el escenario.
En lo que respecta a las marchas agendadas para el próximo jueves 7 de junio, vecinos de la Capital Federal han desarrollado un material en video -que se reproduce a continuación-, con el objetivo de enumerar los objetivos de la marcha. El eslogan planteado: "No queremos que se vayan; queremos que nos escuchen". En otros espacios, los promotores refieren a la justicia de los reclamos y a la necesidad de que los partidos eviten recurrir a ningún tipo de aprovechamiento político de la propuesta.
Matías E. Ruiz, Editor
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