Peronismo opositor: reflexiones, a pocos meses de las Legislativas 2013
Hace un tiempo que no escribía; la doble función de periodista y militante muchas veces -y más hoy- se tornan irreconciliables. Especialmente, en "esta" política actual con tantas idas y vueltas -de los que se dicen "referentes"-. Abundan los cambios de banderías, las conversiones y acomodamientos, y las fidelidades duran muy poco...
Hace un tiempo que no escribía; la doble función de periodista y militante muchas veces -y más hoy- se tornan irreconciliables. Especialmente, en "esta" política actual con tantas idas y vueltas -de los que se dicen "referentes"-. Abundan los cambios de banderías, las conversiones y acomodamientos, y las fidelidades duran muy poco.
El día 7 de mayo de 2012 asistí con esperanza al Hotel Corregidor de la Ciudad de La Plata, al lanzamiento del FUP -Frente de Unidad Peronista-, en compañía de legisladores nacionales (Francisco De Narváez, Alfredo Atanasoff, Gustavo Ferrari, Graciela Camaño, Claudia Rucci, Natalia Gambaro, Alberto Roberti, Carlos Brown) y provinciales (Gonzalo Atanasoff, María Elena Torresi, Mónica Lopez, Fernando Rozas, Mauricio Dalesandro, Guillermo Britos, Ruben Eslaiman, Carlos Acuña, Roque Cariglino y Nidia Moirano). Participó también de la cita el Intendente "rebelde" -frente a la vereda oficialista- Jesús Cariglino. En el acta fundacional del encuentro se citaba: "Este espacio surge con el fin de construir un peronismo más amplio, abierto y participativo. Un peronismo que no reniegue de sus principios, sino que reivindique la justicia social, la libertad, la igualdad y la solidaridad como los valores fundamentales de su accionar político".
Luego de un diagnóstico de la situación del país y la Provincia de Buenos Aires, agregaban:
"Por todo ello, manifestamos nuestro inquebrantable compromiso con las siguientes pautas programáticas, que guiarán en todo momento nuestra acción política:
a) Garantizar una auténtica universalización de políticas sociales, para lograr que millones de compatriotas sumidos en la pobreza e indigencia recuperen su dignidad;
b) Desarrollar infraestructura social básica, garantizando la universalización del acceso a servicios públicos esenciales, así como políticas orientadas a resolver el grave déficit habitacional;
c) Propiciar una política de empleo que brinde puestos de trabajo de calidad y decentes, con un mercado laboral más integrado que no solo deberá corregir las distorsiones macroeconómicas, sino que también impulse un ambicioso proceso de mejora en la calidad institucional. Deberá incluir la modernización de las regulaciones laborales y el fomento de la relación directa entre educación y empleo, conforme a las vastas zonas de nuestra provincia;
d) Impulsar políticas que garanticen de manera eficaz y la seguridad física y jurídica de todos los ciudadanos. La prevención debe ser la herramienta que nos permita ofrecer a la ciudadanía una vida segura en un estado de derecho pleno;
e) Promover el federalismo, a través de la construcción de los consensos políticos necesarios, que permitan introducir una reformulación integral del sistema de coparticipación federal de impuestos para así asegurar la automaticidad en la percepción de los municipios –hoy con una escasa participación relativa- de un modo fiscalmente responsable. Con metas objetivas, convergiendo progresivamente hacia un esquema transparente y justo de distribución de los recursos fiscales entre los tres niveles de gobierno, y que -además- tienda a atenuar las fuertes asimetrías regionales;
f) Generar políticas destinadas a viabilizar un desarrollo más equilibrado y sustentable, evitando que millones de ciudadanos continúen engrosando bolsones de pobreza alrededor de los grandes centros urbanos. Debemos integrar estratégicamente, sobre la base de sus potencialidades y ventajas comparativas, a todas las regiones productivas del país y particularmente de nuestra provincia;
g) Respetar y hacer respetar las instituciones fundamentales de la democracia. Recuperar el papel de los partidos políticos y hacer funcionar eficientemente los organismos de control del Estado;
Reafirmamos, por tanto, nuestra pertenencia peronista; y ratificamos nuestro compromiso con los valores auténticos e irrenunciables del peronismo: justicia social, independencia económica y soberanía política".
Aunque la presencia de legisladores denarvaístas parecían conformar una mayoría en el nuevo espacio, este NO nació para esbozarse en un espacio denarvaísta: surgió como un espacio de "convergencia" de un peronismo opositor, teniendo en claro que solo la unidad nos daría la posibilidad de NO permitir que en el 2013 el oficialismo Kris-kirchnerista logre aumentar su cantidad de legisladores nacionales y provinciales -objetivo irrenunciable en el caso de la Provincia de Buenos Aires-. En grandes líneas, la meta es evitar que el oficialismo logre reformar las constituciones Nacional y provinciales, eternizarse en el poder.
Esta era la "foto" de aquel 7/5/2012
Recuerdo que, en aquellos momentos, escribí en las redes sociales: "Hoy, todos los peronistas hablamos de UNIDAD. Esperemos que, además de "declamar", hagamos lo que tenemos que hacer, esto es, buscar una autentica UNIDAD, abandonar personalismos y posiciones confrontativas y/o sectarias. De otro modo, y si no nos uniéramos con propuestas e ideales concretos, nos devoraría La Cámpora".
Fundamentalmente, esto debe ser comprendido y asimilado a consciencia por los dirigentes "sobrevivientes" del 2011, quienes deberán hacer una profunda autocrítica. De no mediar este esfuerzo -que también debe encomendarse a la militancia- los gobernantes actuales que nos supimos conseguir no solo se llevarán puesto al peronismo, sino que completarán su trabajo de destrucción del país. Pero sucede que este país es nuestra Patria y, por ella, muchos ofrendaron su vida. Habita, aquí, un pueblo desesperanzado que aún después de doscientos años "quiere saber de qué se trata".
Es nuestro deber esclarecer y hablar con todos nuestros vecinos, amigos, parientes, compañeros de trabajo para alertarlos. Lo que hoy nos sucede es mucho más grave de lo que se puedan imaginar. El oficialismo quiere y busca perpetuarse en el poder.
Han pasado 60 y algo de días desde aquella foto y desde la firma del Acta Fundacional del Frente de Unidad Peronista. Pueden contabilizarse hechos positivos, como el plenario de la Primera Sección Electoral, la inauguración de la Casa Peronista de la Ciudad de La Plata, el apoyo y movilización al Paro Nacional convocado por la CGT que conduce Hugo Moyano (en el justo reclamo por el injusto gravamen al salario de los trabajadores, la discriminación en el pago de la "asignación universal por hijo" y en todo lo que derivara en la ruptura de la CGT "moyanista" con la Casa Rosada). Pero existieron, igualmente, circunstancias NO positivas para todos aquellos que anhelamos la unidad, como ser, la idea de Francisco De Narváez de creerse "dueño" del nuevo espacio e imponer cuestiones de "cartel". El empresario debe recordar que sus egoísmos no tienen el visto bueno del justicialismo no oficialista. Por otra parte, vale recordar que la Diputada Nacional Claudia Rucci, cuyo padrino político es Gerónimo Venegas, jamás concurrió a ninguno de los plenarios de los convocados por el FUP. Mal asesorada, Rucci entra y sale del espacio según le convenga o le sugieran. Tales hechos -sumados a otros tantos, no menores- hace que la militancia peronista se sienta en medio de un panorama bastante similar al que se diera poco tiempo antes de las Presidenciales de octubre de 2011.
Pero los hechos mencionados también refieren a un error estratégico de proporciones, especialmente cuando la totalidad del arco político sabe que el oficialismo kris-kirchnerista asiste a la cercana fractura del Frente Para la Victoria -su herramienta política-. Esto se ve en los aprietes en perjuicio del Gobernador Daniel Osvaldo Scioli y el Intendente Sergio Massa, y contra todo aquel díscolo que se atreva a "sacar los pies del plato". En los pocos meses que transcurrieron desde octubre de 2011 hasta nuestros días, muchas cosas sucedieron. Algunas fueron: la Tragedia de Once, la nacionalización de YPF, el Triángulo Boudou-Vandenbrole-Ciccone, la expulsión del Procurador Esteban Righi, el intento de imposición de un impresentable Daniel Reposo, el ataque destituyente contra Scioli, la prohibición de operaciones comerciales en moneda extranjera, etc. Y, aunque parezca extraño, ninguno de estos aspectos es un factor central a la hora de analizar el escenario político nacional. El quid de la cuestión acaso tengan que ver con la caída del crecimiento económico y la explosión de la inflación, es decir, todo aquello que atenta contra el bolsillo de los argentinos. Finalmente, cabe la pregunta: ¿está el peronismo opositor en condiciones de reeditar una fuerza que no solo se centre en objetivos electorales -caso 2009-, o acaso volveremos a cometer los mismos errores que en 2011?
Tomaré prestadas algunas "ideas base" leídas en las redes sociales recientemente: son muchos los pequeños partiditos o espacios de distintos colores (amarillo, anaranjado, etc.) que intentan concentrar al peronismo, pero que hoy analizan -calculadora en mano- dar o no apoyo a la leyes del oficialismo. Se trata de proyectos que cobran fuerza como herramientas funcionales al proyecto esencialmente antinacional y antipopular de la Casa Rosada. Prerrogativas a las que el Señor Gobernador Daniel Scioli -hay que decirlo- aún adhiere, pero que no se anima a enfrentar. Y desde luego que no es peronista, a la hora de administrar, imponer leyes ni decretos en donde el ajuste tiene por víctima al pueblo. ¿O no son, acaso, parte del pueblo los empleados del sector público en la Provincia de Buenos Aires? Porciones de lo aquí manifestado le caben al ascendente alcalde tigrense Sergio Massa. Pero los mencionados continúan siendo funcionales al oficialismo.
Entiendo que, si en los próximos días no surgen ni se definen quiénes serán capaces de de conformar la "verdadera oposición" al Gobierno Nacional de cara a las próximas elecciones legislativas del 2013 (definitorias para el escenario de 2015), mucho me temo que volveremos a equivocarnos. Podrá, entonces, acusársenos de "cómplices silenciosos" de la destrucción de nuestro peronismo. Esto sucederá si apoyamos a aquellos que, en estos momentos de coyuntura, no se definen: seremos tan o más traidores que ellos.
Mientras tanto, seguiremos remándola en esta castigada geografía, tratando de aportar nuestro "granito de arena" para que el peronismo siga vivo y acaso pueda renacer. Porque no solo está en juego el destino de nuestro peronismo, sino el de la Patria. No quisiera que, el día de mañana, cuando mis hijos sean preguntados respecto de qué hicieron sus padres para detener esta suerte de locura colectivista disfrazada de "nacional y popular" que llevó al país a un estado de destrucción y desintegración, se queden sin respuesta.
En todo caso, me gustaría que contestaran: "El viejo hizo y dio todo lo que pudo; lástima que terminó pasando lo que pasó, por culpa de cuatro atorrantes que abandonaron a miles de militantes...".
Gabriel Martin
e-Mail: martingabriel@fibertel.com.ar
Nota aclaratoria: por cierto que esta reflexión nada tiene que ver, en lo personal, con los compañeros que componemos el P.U.R.O., la línea que hemos adoptado, o la Convergencia de Graciela Camaño-Jesús Cariglino. Con esta línea, estamos más que conformes y contenidos. Seguimos trabajando junto a compañeros de la Tercera Sección, la Quinta y la Segunda, y acompañando a todos aquellos que hablen sinceramente de UNIDAD. Tal como lo hemos hecho el próximo-pasado 30 de junio en Cariló, junto a un grupo de veteranos dirigentes que advierten el peligro que se cierne sobre nuestro peronismo. En La Plata, vamos camino de una verdadera UNIDAD de TODOS los referentes locales de todas las líneas peronistas opositoras al oficialismo. Por encima de lo personal, debe primar el bien común, como decimos siempre: "Primero, la Patria, después el Movimiento, y luego los Hombres". Y, ¿qué pasa con Mauricio Macri? Primero, busquemos entre los Peronistas "a los que mejores condiciones Peronistas demuestren para ocupar cargos" y apoyémoslos con lealtades de ida y vuelta. Si acaso la coyuntura electoral aconseja la creación de un Frente con el macrismo, eso se verá recién a su debido tiempo. Pero sin dejar de respetar a una conducción unificada -que aún aguardamos- con manejo de la estratégico. Por supuesto, alineada con una campaña electoral en serio, que nos lleve al triúnfo.