Los motivos del 8N: por qué nos manifestamos
Las razones de la ciudadanía para movilizarse el próximo 8 de noviembre. Detalles.
* La notable falta de respeto por parte de la clase gobernante hacia nuestra Constitución Nacional y a las formas republicanas de la democracia, como la División de Poderes, Libertad de Expresión, la Libertad de las Ideas. Por los constantes abusos del poder y la creciente persecusión contra numerosos sectores de la ciudadanía, bajo el empleo de los organismos de Estado Nacional.
* La Corrupción estructural que hace a los tres Poderes del Estado Nacional: el Poder Ejecutivo, el Poder Legislativo y el Poder Judicial.
* El hecho de que el Gobierno pretenda instalar en la sociedad una cuestión de vida o muerte a partir del “7D”. En pocas palabras, la urgencia de la Casa Rosada para que se cumplan los fallos derivados de las presiones contra los medios no afines, mientras la ANSES y poder se esfuerzan, desde hace años, por incumplir el pago de las sentencias firmes a nuestros jubilados; ellos han trabajado durante toda su vida y ya no tienen tiempo para seguir esperando.
* La creciente inseguridad, negada e ignorada por la Señora Presidente de la Nación y su espectro de colaboradores. En igual sentido, la insistencia en proclamar un mal entendido progresismo que proteje y alimenta a la delincuencia y el narcotráfico, mientras generan miles de muertes y damnificados entre los ciudadanos de bien.
* El engaño contínuo en perjuicio de la ciudadanía, falseando índices desde el INDEC, negando la inflación en forma sistemática, mintiendo acerca de logros inexistentes, inaugurándose obra pública que jamás se concreta, ejerciéndose un abuso de los medios de comunicación oficialistas y de los dineros públicos para la propaganda de falsos logros presidenciales, en tanto que se ataca a todo aquel que piense o proceda diferente de cara a la agenda gubernamental.
* El hecho de que el Estado Nacional sea el principal generador de empleo en negro, abonando suplementos no remunerativos que, al momento de la jubilación. convierten al trabajador estatal en un indigente. Este estado negrero, además, mantiene gran parte de sus empleados contratados con vencimientos semestrales durante períodos mayores de diez años, haciéndolos padecer angustia desde la amenaza reiterada de no renovarle su contrato. Es esta una franca situación de inseguridad que se presta para todo tipo de injusticias.
* Que el poder central extorsione permanentemente a gobernadores de provincia, reteniendo y dosificando a voluntad y en forma indebida los fondos de Coparticipación Federal, castigando a los “rebeldes”. Ejemplos: San Luis y Córdoba, luego de litigar en la justicia, no lograron que se les pague ni aún habiendo obtenido fallo firme de la Suprema Corte de Justicia de la Nación. Debe tenerse en cuenta, asimismo, el otorgamiento arbitrario de fondos para obras públicas según el grado de sumisión a las órdenes de la Presidente, y según el partido político al que pertenecen sus gobernantes.
* El hecho de que aquellos que recibieron nuestro mandato a través del voto han perdido, deliberadamente, contacto con quienes los votamos. Ellos no permiten que se los encuentre y desde hace tiempo han dejado de escuchar toda demanda del ciudadano. Ignoran la voluntad y tad y muchas veces vulnerando los intereses del ciudadano que los votó.
* La República Argentina también debe dejar de brindar asistencia social a toda Sudamérica. Con los impuestos pagados por los ciudadanos argentinos se les brinda -en forma gratuita- Salud y Educación a ciudadanos de naciones vecinas que jamas ofrecen reciprocidad con nuestros compatriotas. El caso reciente de estudiante argentina Daniela Verónica Cabalucci, golpeada en Perú por la estudiante de aquel país Daniela Soledad Masuelos Escalante es un caso para tener en consideración. “No quiero que estés en mi facultad; tengo derechos como peruana para que no haya extranjeros en mi facultad”, dijo la atacante, luego de amenazar de muerte a la joven argentina.
* Recordemos que, cada vez que un ciudadano argentino necesita atenderse en un hospital público (especialmente en la Capital Federal), debe resignarse a esperar que sean atendidos centenares de extranjeros que muchas veces ni siquiera residen en la Argentina, sino que llegan en chárters para atenderse en forma gratuita en nuestro país y luego regresar al suyo. En algunas universidades de nuestro país, más de un 25% más de las plazas se encuentran cubiertas por alumnos extranjeros. Unos pocos retornan a sus países de origen después de recibidos; otros, en cambio, se quedan en la Argentina para trabajar en clínicas y sanatorios privados por sueldos magros. Esto contribuye al desplazamiento de los profesionales argentinos que ya no están en posibilidades de ganar sueldos acordes con sus estudios, profesionalismo y capacidades.
Fuente: www.cacerolazo8N.com