Piratas de propiedad intelectual en el Caribe
Antigua recientemente acaparó titulares (aquí y aquí, en inglés) al amenazar lanzar un sitio web, ofreciendo productos pirateados de EE.UU. Pero esto no es un moderno servicio estatal para compartir archivos como Napster. Antigua está tratando de ejecutar...
Simon Lester es analista de políticas públicas en el Centro Herbert A. Stiefel para Estudios de Política Comercial del Cato Institute.
Antigua recientemente acaparó titulares (visitar estos links aquí y aquí, en inglés) al amenazar lanzar un sitio web, ofreciendo productos pirateados de Estados Unidos. Pero esto no es un moderno servicio estatal para compartir archivos como Napster. Antigua está tratando de ejecutar una querella legal exitosa en contra de EE.UU. (en inglés) planteada ante la Organización Mundial de Comercio (OMC), relacionada con una prohibición por parte de EE.UU. de los sitios web extranjeros de apuestas.
El caso surgió de un compromiso estadounidense de abrir su mercado al comercio transfronterizo de las apuestas. Antigua dijo que prohibir los sitios web extranjeros de apuestas, mientras que se permitía algo de apuestas en Internet a nivel doméstico, violaba las reglas de la OMC. EE.UU. argumentó que se había comprometido de tal manera, pero las cortes de la OMC concluyeron que si violaba las reglas y también que los sitios web de apuestas provenientes de Antigua (como el póker en Internet) estaban siendo discriminados.
Aunque la victoria legal en la OMC fue agradable, Antigua todavía tenía que ejecutar el veredicto. Normalmente, la ejecución se da cuando el demandante obtiene la autorización para imponer su propio proteccionismo en un esfuerzo para inducir el cumplimiento por parte del país agresor. Pero Antigua adoptó una estrategia distinta. En lugar de imponer aranceles más altos a los productos estadounidenses, Antigua ha propuesto violar las reglas de propiedad intelectual de la OMC al ofrecer productos estadounidenses con derechos de autor o de propiedad (o patentados).
Antigua no es el primer país que propone esto, pero sus esfuerzos han recibido la mayor atención. Hasta este momento, Antigua ha ofrecido solamente detalles limitados de su plan (en inglés). Pero, esencialmente, está proponiendo poner a disposición de los consumidores trabajos estadounidenses con derechos de autor o patentados a precios bajos o gratis. Por ejemplo, podría lanzar un sitio web ofreciendo descargas gratuitas de música y películas de EE.UU.
La estrategia de Antigua parece extraña, pero está dentro del rango de las normas de la OMC. Normalmente, si se determina que un país ha violado las reglas internacionales del comercio (por ejemplo, imponiendo aranceles a un nivel más alto de lo que había prometido), otros países afectados por los aranceles más altos podrían plantear una querella. Si los aranceles altos son considerados violatorios, el querellante puede buscar la autorización de la OMC para tomar medidas en retaliación, por ejemplo imponiendo sus propios aranceles más altos.
Aunque el objetivo final es que el país violador remueva su proteccionismo, el resultado a corto plazo podría ser más proteccionismo, conforme el país demandante agrega sus propios aranceles a la ecuación. Esta estrategia parece ser contraria a la causa de los mercados abiertos. ¿Cómo puede ser que los aranceles más altos sean consistentes con el libre comercio? Aún si funciona de manera adecuada, el proteccionismo adicional es solamente un arreglo a corto plazo y eventualmente tanto los aranceles altos ofensivos y los aranceles altos de retaliación son removidos.
Pero, en la práctica, esto no siempre sucede así. Algunas veces, ambas medidas proteccionistas —la violación y la respuesta autorizada— se mantienen por algún tiempo. Y la protección adicional tiene un impacto negativo sobre la economía.
En la mayoría de los casos, la naturaleza de la retaliación debería estar relacionada a la violación original, aunque existe una excepción. Podría ser que el país querellante importe muy poco del país agresor y, por lo tanto, los aranceles adicionales sobre los productos importados tendrían un impacto limitado. Este es un problema particular para los países en desarrollo que están tratando de ejecutar las decisiones de las cortes de la OMC. Cerrar su mercado es poco probable que tenga un impacto discernible sobre los socios comerciales ricos tales como EE.UU. Por lo tanto, en ese tipo de casos asimétricos, la retaliación podría hallarse en otro sector.
Uno de estos sectores es la propiedad intelectual, y esto es en lo que Antigua se ha enfocado. Ha habido críticas de que esta estrategia constituye piratería. Y si lo es. La violación de la propiedad intelectual es un problema serio y no debería ser promovida de manera arbitraria.
Aún así hay un amplio y creciente consenso (ver aquí y aquí, en inglés) de que los gobiernos exageran la protección de la propiedad intelectual. Por ejemplo, el derecho de autor original autorizado por el congreso de Estados Unidos era de catorce años, renovable para un periodo adicional de catorce años. Ahora, ese periodo es de la vida del autor más ¡setenta años!
El caso de Antigua sugiere una manera novedosa de mejorar el mecanismo de ejecución de las decisiones acerca del comercio, mientras que también controla algunos de los excesos de las leyes modernas de propiedad intelectual: utilizar leyes débiles de propiedad intelectual como una manera de inducir al cumplimiento ante violaciones de acuerdos comerciales... Esto no significa abandonar totalmente la propiedad intelectual (por ejemplo, permitir que la última película de Bruce Willis sea descargada gratuitamente). En cambio, significa adoptar términos sensatos para una protección de la propiedad intelectual y colocar trabajos que han superado ese periodo en el dominio público.
Esta es una situación en la que ambas partes ganan. Evita el problema de escalar el proteccionismo mediante el inestable proceso de disputas en la OMC, donde las querellas exitosas utilizan el proteccionismo como una herramienta para promover la ejecución de las decisiones. Y podría devolver el derecho de propiedad intelectual a la realidad, a los tiempos antes de que los grandes tenedores occidentales de la propiedad intelectual empezaron a hacer lobby y o cabildear en favor de protecciones todavía mayores.
Las acciones específicas de Antigua en la disputa acerca de las apuestas en línea todavía están por verse. Ningún sitio web ha sido lanzado todavía. Y la respuesta de los Estados Unidos será interesante. Hasta ahora, EE.UU. ha expresado mucha preocupación acerca de esto (ver link en inglés). Pero sus acciones valdrán más que sus palabras.
Es de desear que Antigua no abuse de este camino que está tomando. Si limita sus acciones a un debilitamiento razonable de las leyes de propiedad intelectual, en lugar de la piratería abusiva, tal vez puede construir el camino hacia una mejor estrategia, tanto hacia la ejecución de las decisiones comerciales así como también hacia la protección de la propiedad intelectual.
Este artículo fue publicado originalmente en National Interest Online (EE.UU.) el 22 de febrero de 2013.