Los efectos del nombramiento del General César Milani parecen dar pie a una feroz interna en las Fuerzas Armadas; recientemente, foristas anónimos publicaron en el foro del sitio web Seprin.com información puntual que compromete seriamente al General Luis María Carena y a su entorno familiar.
El citado es hombre de confianza del polémico Milani, y -conforme lo reflejaba el columnista Daniel Santoro en Diario Clarín pocos días atrás; ver "Otro ascenso polémico; las bajas notas del jefe del Estado Mayor Conjunto" en http://www.clarin.com/politica/ascenso-polemico-notas-Mayor-Conjunto_0_965303467.html- su encumbramiento en las FF.AA. es reflejo contundente del modus operandi que caracteriza al tándem compuesto por Nilda Garré y Horacio Verbitsky, bien predispuesto a acomodar a personal militar poco idóneo pero congruente con la agenda kirchnerista, a pesar de sus bajas calificaciones y pobre hoja de servicio.
Mientras la información personal del espectro de uniformados de filiación oficialista comienza a extenderse en su difusión, vuelven a ponerse sobre el tapete nuevos cuestionamientos sobre el General Milani. En tal sentido, en las Fuerzas Armadas muchos comienzan a preguntarse por los motivos reales detrás del regreso al país del Capitán del EA Esteban Sanguinetti. Se sabe en determinados círculos que este uniformado se encuentra en poder de no pocos detalles de color en relación al turbio accionar de Milani durante la represión. Leer también: "Con el acta falsa de Milani, Ledo fue acusado de terrorista en la Comisión Interamericana de Derechos Humanos", en http://www.clarin.com/politica/Milani-Ledo-acusado-terrorista-CIDH_0_968303232.html
A continuación, la transcripción del texto -sin editar- que compromete al General Luis María Carena, flamante titular en el EMC:
Hoy, mi intención es llamar su atención en temas más rudimentarios, más simples, como es la designación de quienes tienen la responsabilidad de conducir operativamente a las Fuerzas Armadas, nuestras Fuerzas Armadas.
No deseo basarme solamente en el análisis de una figura del recientemente designado Jefe del Ejército Argentino, general Milani, sino también a algunos de sus colaboradores directos, elegidos personalmente por él con el apoyo irrestricto de la Comandante en Jefe de las Fuerzas Armadas.
El primer caso es el General Luis María Carena, designado por el mismo Milani como Jefe del Estado Mayor Conjunto. A pesar de ser el cargo, legalmente, de una jerarquía superior al del jefe de cada fuerza, el mas importante al que un militar podría aspirar fue puesto por Milani para mantenerlo contento a él y a [Carlos] Zannini, pero controlado de manera clara y evidente. De una personalidad y carácter cambiantes, inseguro, débil en sus principios morales y éticos, proclive al alcohol son algunas de sus principales características. Casado y separado de hecho con Ana G. , la verdadera artesana de su destino quien, a la sazón, es también agente civil de inteligencia, merced a su profunda amistad con la esposa de Zannini, con quien ha compartido una gran parte de su vida. Mantienen aún una relación especial, obviamente por intereses comunes que van mucho más allá del amor. Especialmente apto para ser manejado para los fines que mejor correspondan a los intereses políticos.
Carena literalmente vivió durante el último año y medio en la oficina de su lugar de “trabajo”, al igual que en 2011 que lo hacía en las oficinas del Comando de Remonta y Veterinaria, a pesar de haber obtenido un crédito para vivienda única y de haber adquirido con ello un departamento en la calle Luis María Campos al 100. No lo ocupa. Claro, es mucho más rentable alquilarlo en dólares a ciudadanos extranjeros de la hermana República Bolivariana de Venezuela, cuestión que aun hoy continúa. Igualmente, no son oficinas comunes las que ocupa el señor; son pequeños departamentos muy cómodos con cocineros y mucamos incluyendo víveres y accesorios. La mujer, en cambio, fuera de toda pauta legal y ética, vive con sus dos hijos, a un costo insignificante ($300) en una vivienda de servicio del Ejercito Argentino en Palermo (calle Báez 680 5to 13 teléfono 47750...), destinada por reglamento a los oficiales jóvenes que son destinados en Capital Federal o alrededores. Las viviendas de servicio no alcanzan para todos los oficiales, por lo que quienes no son beneficiados con sus magros sueldos deben entonces alquilar en los valores del mercado. Mientras tanto, la propiedad que ambos tienen como bien ganancial en Godoy Cruz al 2900 2 E es alquilada a un tercero, reforzando los ingresos del este particular matrimonio. ¿Será inmoral? Los hijos y la mujer no han dejado de contar con los servicios de auto oficial y chofer hasta para las salidas más banales, sin dejar de mencionar que los “chicos” son tan eficientes a pesar de su corta edad que ya tienen su puesto administrativos en la Casa de Gobierno. Al Estado Nacional, esta familia le sale muy caro.
Al General Carena le gusta viajar y, más aún, le gusta comprar. Entre muchos otros, este año llevó a cabo dos viajes importantes. El primero a China. El segundo a Brasil. En ambos casos los costos correspondientes a pasajes, alojamientos y comidas estuvieron cubiertos por empresas relacionadas con su función, a quienes “sutilmente” les sugirió que lo invitaran para analizar los temas logísticos in situ. En otras épocas, esto estaba totalmente prohibido. No solo esto, sino también que carena no dejo de percibir la totalidad de los viáticos que, en dólares estadounidenses, corresponden y paga el Ejército, que tienen como finalidad cubrir justamente los gastos relacionados con el viaje. La suma, sobre todo la que cobro por ir a China, no fue de ningún modo insignificante (calcular 400 usd/dia). Lo mismo ocurrió en Brasil, pero en este caso “solo” por una semana, y no por tres o cuatro como fue la anterior. Pero siempre invitado por empresas interesadas. Vulnera la ética profesional desde lo más básico.
Al General Carena, también le gusta salir de noche; le gusta beber, y lo que no tiene en cuenta es que debe volver. Lo que tampoco recuerda es que, cuando vuelve, lo hace al lugar donde trabaja. Cuando lo bajaban del auto entre dos o tres personas -algunas de ellas integrantes de la guardia- y lo depositaban en sus aposentos, la imagen del general era, por ser suave y generoso, deplorable. Hay más, pero por ahora creo que es suficiente.
Este es el nuevo Jefe del Estado Mayor Conjunto de las Fuerzas Armadas.
Pasemos al General José Eduardo Demaría. ¿Podría alguien explicar por qué causa este oficial fue ascendido a general vulnerando la ley para el personal militar? No hubo caso más irregular en la historia de los ascensos. Fue considerado en todas las oportunidades que le correspondía según la legislación vigente, sin lograr el ascenso. Cuando se encontraba fuera de fraccionamiento definitivo, es decir, cuando ya no tenía ninguna posibilidad más desde el punto de vista legal y reglamentarios (y ético), mágicamente fue incluído. ¿Qué pasó? Simplemente, fue el pago que le consiguió Milani con el Gobierno Nacional por haberse prestado a ser perito especialista en Inteligencia, firmando un informe que perjudicaba puntualmente al ex jefe de la Armada Armada Argentina, Almirante Godoy y otros, en la causa de Trelew. Así de simple fue su ascenso. El ascenso fuera del término legal de un arrastrado. Seguramente, el peritaje debe constar en la causa mencionada. El informe fue redactado por Milani, pero quien lo firma es el Coronel Demaría, oficial de Inteligencia del Estado Mayor Conjunto, luego ascendido al grado de General de Brigada.
Foto: El General Luis María Carena y el juramento ante el Ministro de Defensa Agustín Rossi. Clarín.