Acuerdo nuclear con Irán: preguntas y respuestas
El reciente convenio nuclear de occidente con Teherán, ¿demasiado permisivo?
¿Qué es lo inapropiado de recurrir a este acuerdo como primer paso?
El actual es un acuerdo fallido que arriesga la reducción de presiones sobre Irán en forma de sanciones, durante los próximos seis meses, a cambio de recibir compromisos fácilmente reversibles por parte del régimen; algunos de ellos, precisamente, fueron firmados por Teherán previamente, para luego ser abandonados. El actual convenio nuclear exige que Irán deje de lado algunas, pero no todas, sus actividades nucleares, contra la recepción por parte del país de un alivio de US$7 mil millones en sanciones durante los próximos seis meses. El problema es que la reducción de sanciones convertirá al objetivo final en algo más difícil de lograr. Para forzar a Teherán a realizar concesiones más profundas en un acuerdo final, se necesitan más sanciones. Pero este acuerdo compromete a la Administración Obama a abstenerse de imponer nuevas sanciones durante el próximo semestre.
¿Cuál es la postura del resto de los países de la región?
¿Cuáles son los logros reales del actual acuerdo nuclear con Irán?
De forma temporaria, el convenio prohíbe a Irán enriquecer uranio más allá del umbral del 5%, y exige que Teherán reduzca sus existencias de uranio enriquecido al 20%, convirtiéndolas en formas que tornen más complejo cualquier enriquecimiento futuro. El acuerdo también exige que Teherán acepte más inspecciones intrusivas de sus instalaciones nucleares, y que congele las obras en el reactor de agua pesada de Arak, que dará a Irán una ruta alternativa de plutonio para un arma nuclear, si el reactor se volviese operacional.
¿Qué sucederá después?
La República Islámica de Irán y el Grupo de los Cinco + 1 (los cinco miembros permanentes del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas, junto a Alemania) comenzarán a agotar las negociaciones bajo un acuerdo extensivo que -se supone- se completará dentro de los próximos seis meses. Pero es difícil que se alcance la línea definitiva: Irán se muestra determinado a preservar su opción nuclear y es muy probable que rechace las concesiones más duras, necesarias para alcanzar ese final.
El presidente iraní, Hassan Rouhani, ya ha declarado que el acuerdo reconoce el "derecho" de su país a enriquecer uranio. Lo cual sienta las bases para que Teherán se retire del acuerdo si se siente presionado en el futuro, bajo el argumento de que occidente no cumple con sus compromisos. Como ha sucedido en ocasión de negociaciones previas con la República Islámica, este acuerdo temporario podría, eventualmente, convertirse en un callejón sin salida.
Analista senior en el Centro Douglas y Sarah Allison para Estudios de Política Exterior en la Fundación Heritage. Ha desarrollado numerosos trabajos sobre asuntos relativos al Medio Oriente y sobre terrorismo internacional desde 1978. Es columnista en medios televisivos norteamericanos y ha testificado en comités del congreso estadounidense en relación a temáticas de seguridad internacional.