Costa Rica: soluciones de mercado para reclamos sindicales
La reciente huelga de educadores costarricenses por el no pago de las planillas ha dejado bien en claro...
La reciente huelga de educadores costarricenses por el no pago de las planillas ha dejado bien en claro que existen problemas severos dentro de la operativa estatal. Entre todas las falencias que pueden llegar a exhibir un Estado, la carencia de quid pro quo en sus planillas es algo que ni siquiera en crisis presupuestarias severas como la acontecida en Estados Unidos con el 'Abismo Fiscal' llega a materializarse. Por desgracia, la falta al deber de cuidado del Ministerio de Educación Pública (MEP) ha heredado a la presente administración un sistema de pago de planillas deficitario.
La problemática de pago en el MEP radica en la implementación de una nueva herramienta 'casera' (mas no barata) para implementar el pago de salarios. Descripta por funcionarios del Servicio Civil como 'lo más grande que hemos hecho', Integra 2 es una iniciativa con casi seis años de gestión y desarrollo, que venía a solucionar la operativo tipo “caja negra” de los sistemas informáticos vigentes en donde ni el Servicio Civil, ni el MEP, ni el Ministerio de Hacienda tenían accesos a los sistemas de pago. Por desgracia, las mismas falencias continúan presentándose. Durante las etapas iniciales de implementación, cerca de 1,700 colaboradores recién nombrados fueron excluidos del pago por “faltante de datos”, los cuales no pudieron ser incluidos a tiempo por las estrictas fechas de corte de la aplicación. Adicionalmente, el diseño de la herramienta es tan rígido que impide que se den pagos extraordinarios sin entorpecer los pagos ordinarios: si a una persona no se le pagó durante esta quincena, no recibirá su pago sino hasta la próxima.
Los pagos de planilla siempre han sido unos de los grandes dolores de cabeza de todo departamento financiero, ya se trate de una firma privada o de una entidad estatal. Mientras que en empresas pequeñas y ciertos negocios familiares los pagos pueden hacerse directamente mediante cheques al portador, pagos en efectivo, o transferencias directas, en donde el patrono o encargado financiero manda una transferencia al empleado por el monto de su salario, el uso de un sistema eficiente y automatizado de pagos de planillas se convierte en una necesidad. ¿Puede el lector imaginar lo que representaría escribir 2 mil cheques por quincena para cancelar la planilla de una compañía?
En respuesta a ello, el sector financiero ha desarrollado herramientas útiles para que las empresas cancelen de manera rápida, transparente, y sin errores sus planillas. Mientras el sistema del MEP parece requerir de toda un reingeniería para la actualización de información de los docentes, los sistemas provistos por empresas financieras ofrecen actualización de datos mediantes cuentas en línea: se pueden agregar, eliminar, o modificar colaboradores en tiempo real a un “click” de distancia, con bases de datos que en casos suelen estar ligadas con los registros a la CCSS. Usando un sistema bancario automatizado, los 1,700 maestros recién nombrados no hubiesen sido excluidos del sistema. Mientras el sistema Integra 2 parece ser incapaz de realizar acreditaciones fuera de las fechas de pago, los productos bancarios permiten una personalización total del producto. Quizás lo más importante sea la existencia de redes de contingencia: en casos de problemas de comunicación o “caídas de sistema”, las instituciones financieras cuentan con centros de continuidad de negocio que procesarán de manera paralela los pagos y acreditaciones para cumplir con las necesidades de sus clientes.
Estos desarrollos han permitido a las empresas tener enormes ahorros en costos de administración de pagos y desarrollo de sistemas: ¿puede imaginar Usted lo complejo y costoso que sería que cada empresa en Costa Rica diseñara su propio sistema de pago automatizado de planillas? ¿Ha oído el lector sobre caídas en los sistemas de pago de planillas de todo el sistema financiero? Por mi parte, no me ha sucedido. Sin embargo, sí he asistido al modo en que, año tras año, se registran problemas de pagos en el sector público. ¿Qué nos detiene para licitar el pago de planillas de los educadores?
Hoy día existen cientos de miles de colaboradores que reciben sus salarios a través de sistemas de pagos automáticos de planillas provistos por instituciones financieras, tanto públicas como privadas. Si estas herramientas existen, ¿por qué continuar con el desarrollo de plataformas costosas, complejas, problemáticas, y rígidas para el pago al talento humano? El mercado tiene soluciones a estos dolores de cabeza; es hora de que le demos una oportunidad.
Economista costarricense, Instituto AMAGI, Estudiantes por la Libertad.