Holdouts: el cambio en la jurisdicción de pago y su impacto en la Bolsa de Comercio
El cambio de jurisdicción significa que, desde ya, cualquier arreglo con los holdouts queda al margen, en cualesquiera...
El cambio de jurisdicción significa que, desde ya, cualquier arreglo con los holdouts queda al margen, en cualesquiera de sus alternativas. En los hechos, se asiste a un cambio de jurisdicción y no de sede, conforme buscó dar a entender el Ejecutivo. Las leyes en el estado de Nueva York determinan que el pago a los acreedores debía efectivizarse por intermedio del BoNY (Bank of New York Mellon); pero la Presidente dio la orden de modificar los términos firmados, modificándose la sede. Por lo tanto, los holdouts -de aceptarlo así- deberán pasar a cobrar por el Banco Nación (Nación Fideicomisos).
En pocas palabras, la primera consecuencia de la iniciativa configurada por el Gobierno Nacional remite al quiebre de la sintonía con los mercados de capital mundiales, refugiándose la Administración todavía más dentro de las fronteras del país. Analistas entienden que el costo económico y político de la maniobra no ganará empuje en lo inmediato, sino que aquel se profundizará con el arribo del próximo gobierno, en diciembre de 2015. El hecho de remover a la plaza de pago de los bonos con legislación extranjera conducirá a que la República Argentina difícilmente vuelva a ser considerada como sujeto de crédito en el mediano plazo.
Amén de cualquier consideración económica o financiera digna de análisis, existe consenso en que el cambio de plaza era la última alternativa a considerar, puesto que ha quedado en claro que los acreedores no verán un centavo de dólar hasta tanto Cristina Fernández de Kirchner no complete su mandato.
Un tema puntual para destacar es el de los vencimientos futuros de deuda, los Discount en septiembre, y los AA17 y RO15 en octubre. Con todo, el país busca evitar el conflicto de pago a los bonistas. El mercado descontó las mala noticia a lo largo de ruedas anteriores y continúa apostando por la suba del dólar, así como también a la salida del kirchnerismo del poder después de 2015. Las empresas energéticas (relegadas hoy por los papeles dolarizados) son aquellas que más tienen para subir, apostando a ese cambio.
La razón citada arriba explica el comportamiento protagónico del dólar estadounidense, más que notorio en el mercado de divisas y valores. En las ruedas bursátiles de los últimos días, subieron su cotización los bonos AA17 y RO15 en dólares y las acciones influídas por el dólar CCL (contado con liquidación); por estas horas, se ha llegado al máximo histórico en pesos en referencia a estos bonos. En virtud de que el tipo de cambio oficial también acusa microsubas, de igual modo se comportan papeles exportadores tales como Aluar, Siderar y Tenaris. Estas firmas son beneficiados por una apreciación en el tipo de cambio: hasta el momento al menos, se percibe una clara tendencia alcista en esta clase de activos pertenecientes al panel líder.
En el panel general, el panorama es similar en los papeles de Consultatio S.A., la desarrolladora imnmobilaria de Eduardo Constantini, con importante capital invertido en bienes inmobiliarios en los Estados Unidos de América (más precisamente en el estado de la Florida), y la exportadora de limones tucumana San Miguel. El tipo de cambio oficial se verá impulsado al alza en poco tiempo más, atendiendo a la dificultad de revertir este escenario, lo cual conducirá a alzas significativas. Es que el panel general es prolífico en alternativas de interés como las compañías citadas, presentándose también el caso de empresas que podrían cosechar beneficios (dada su participación en los sectores gasífero y petrolero). A este respecto, es útil destacar el rol -aunque a largo plazo- de Transportadora Gas del Norte y Petrolera Pampa. En el caso de las eléctricas, será necesario aguardar algo de tiempo para comprobar un impacto positivo en sus respectivos balances. Asimismo, continúan presentes expectativas para aumentos de tarifas, dado que la prioridad de los incrementos ha quedado reservada para el gas en este último tiempo.
Por otra parte, las acciones bancarias parecen haber quedado atoradas en un segundo plano; a pesar de haber registrado remarcables subas en el transcurso del año, los papeles de los bancos argentinos son los que más han acusado el golpe del default del 30 de julio próximo-pasado. La emisión descontrolada, sumada a la cantidad de dinero destinado a subsidios, encamina al país a un escenario en el cual los índices anualizados de inflación ganarán fuerza. Y ello terminará por reflejarse fielmente en la cotización de los activos. Tal como se viera desde 2013, pese al contexto de cesación de pagos ya descontada por el mercado.
Es Licenciado en Periodismo y Licenciado en Ciencia Política. Columnista de El Ojo Digital especializado en temas económicos y financieros, y aficionado a la investigación relativa a fraudes y estafas en la Bolsa de Comercio de Buenos Aires, Argentina. Sus artículos son publicados regularmente en http://www.elojodigital.com/categoria/tags/eric-nesich. Su correo electrónico para consultas es eric.nesich@gmail.com.