INTERNACIONALES: OLIVIA ENOS

Niños repatriados por China y Laos podrían haber sido ejecutados o puestos en prisión

En 2013, Laos y China repatriaron por la fuerza a nueve niños norcoreanos. Ahora, el destino de estos niños está en duda.

16 de Diciembre de 2014

En 2013, Laos y China repatriaron por la fuerza a nueve niños norcoreanos. Ahora, el destino de estos niños está en duda. Informes recientes originados en Corea del Norte sugieren que al menos dos de aquellos niños podrían haber sido ejecutados, y que los siete remanentes han sido puestos prisioneros en el Campo Catorce (Camp 14), un brutal campo de trabajos forzados. Norcorea ha respondido a las acusaciones de que los niños fueron ejecutados o bien puestos en prisión haciendo público un video en apariencia reciente de los chicos en buen estado de salud.

Con todo, y más allá de si los niños fueron ejecutados o hechos prisioneros, el hecho es que la decisión de Laos y China de repatriarlos los predestinó a una vida de opresión (y probablemente a la muerte) bajo el brutal régimen norcoreano.

En una reciente conferencia de prensa en donde el anfitrión fue el presidente de la Comisión de Asuntos Extranjeros de la Cámara de Representantes en el congreso estadounidense, Ed Royce (Republicano, California), el Diputado Eliot Engel (Demócrata, Nueva York), y la Coalición por la Libertad de Corea del Norte (North Korea Freedom Coalition o NKFC), la titular de este organismo, Suzanne Scholte, observó que la decisión de repatriación de los nueve niños es una suerte de mancha indeleble en la reputación de Laos y China. Este episodio también remitió a la primera oportunidad conocida en que el gobierno laociano ignoró los pedidos de parte de desertores de Pyongyang, aunque no es la primera vez que China lleva a cabo una repatriación de desertores norcoreanos. De hecho, estos niños se encuentran entre los centenares de chicos norcoreanos repatriados por Pekín.

China se ha visto bajo un creciente escrutinio, desde la publicación del informe de Comisión relativa a Averiguaciones sobre Derechos Humanos en la República Democrática de Corea del Norte de Naciones Unidas (Commission of Inquiry on Human Rights in the Democratic People’s Republic of Korea). El informe de referencia identificó la repatriación de desertores por parte de China, como una violación de sus compromisos bajo la Convención sobre el Status de Refugiados y la Convención contra la Tortura. El informe también acusa a China de connivencia con el gobierno de Norcorea para facilitar el tráfico de personas, ejecutar abortos forzados y matrimonio, entre otras muchas cosas. Al repatriar a niños hacia Corea del Norte, Laos violó su propio compromiso soberano de honrar la Convención contra la Tortura (no es país signatario de la Convención Relativa al Status de Refugiados).

La comunidad internacional puede hacer mucho más para responsabilizar a Norcorea y a China. Bajo las actuales condiciones, Estados Unidos aplica más sanciones contra Irán que contra Corea del Norte -a pesar de que Norcorea representa una amenaza nuclear más significativa, al tiempo que oprime con brutalidad a su propio pueblo. Actuaciones legislativas recientes en la Cámara de Representantes sugieren que Norcorea debería ser sancionada, no solo por su programa nuclear, sino por la reiteración de sus violaciones contra los derechos humanos. Esta proposición aún debe llegar al Senado americano.

Bruce Klingner, Investigador Senior para el Noreste de Asia en la Fundación Heritage (Washington, D.C.), comentó al respecto:

Washington no debería mantener las sanciones solo para ser implementadas ante la próxima violación o provocación desde Norcorea. No se verán mayores cambios hasta que Corea del Norte no experimente el dolor y hasta tanto China no comience a preocuparse por las consecuencias derivadas del accionar de Pyongyang y frente a su propia política obstruccionista.

Los Estados Unidos de América y la comunidad internacional han reconocido el carácter innegable de la crisis de derechos humanos en Corea del Norte, pero no basta con reconocer el problema. A la hora de considerar el destino de estos niños y el de otra innumerable cantidad de desertores forzadamente repatriados hacia Corea del Norte, es hora de que EE.UU. y la comunidad internacional hagan responsables a Norcorea y a China frente a los abusos acometidos.


Traducción al español: Matías E. Ruiz | Artículo original en inglés, en http://dailysignal.com/2014/12/12/children-repatriated-china-laos-may-executed-imprisoned/

 

Sobre Olivia Enos

Es asistente en investigación en el Centro de Estudios Asiáticos en la Fundación Heritage, Washington, D.C. Sus artículos se publican en el sitio web The Daily Signal (Estados Unidos).