Acuerdo cubano-estadounidense: Raúl Castro ya traicionó a Estados Unidos
Cada día que pasa, el cambio de política exterior del presidente estadounidense...
15 de Enero de 2015
Cada día que pasa, el cambio de política propuesto por el presidente estadounidense Barack Obama respecto de Cuba, se muestra peor.
A tal efecto, sirve recordar la liberación de los 53 prisioneros políticos prometida por el mandatario americano. Tres semanas después de anunciado el acuerdo, el Departamento de Estado no ha podido confirmar siquiera la liberación de uno solo de ellos. Ello se volvió contundentemente claro luego de un extraño duelo de cinco minutos entre la vocera del Departamento de Estado, Jen Psaki, y periodistas acreditados el pasado 5 de enero. Solo luego de este embarazoso intercambio, Washington y La Habana se apresuraron a decir que 'algunos' de los prisioneros habían sido liberados.
¿Por qué caminó Psaki con pies livianos en el asunto? Más temprano, funcionarios de la Administración Obama habían declarado ante la columnista Mary O'Grady (del Wall Street Journal) que presionar a los líderes comunistas con el tema de la liberación de los 53 solo los molestaría. Conforme lo dijera O'Grady, 'En otras palabras, los Castro son muchachos sensibles que arrojan diatribas despóticas solo cuando su poder es cuestionado. Exigirles que respeten su palabra es, en apariencia, un gatillo'.
No solo el dictador Raúl Castro se burló del presidente Barack Obama con falsas promesas de cara a la liberación de prisioneros políticos; también dio lugar a una nueva serie de arrestos. La artista Tania Bruguera fue una de las muchas personas secuestradas la semana pasada. Ella fue retenida mientras se preparaba para ingresar a la Plaza de la Revolución. Armada con un micrófono, se aprestó a cometer uno de los pecados más abyectos en una nación comunista: pronunciarse públicamente.
Los cubanos disidentes han denunciado la decisión de Obama de reconocer al régimen ilegal de los Castro. Quizás ninguno condenó lo que ellos calificaron la 'traición' de Obama de forma más elocuente que Guillermo Fariñas, ganador del Premio Sakharov -edición 2010- a los derechos humanos. Fariñas había declarado al matutino británico The Guardian: 'Vivimos con el temor diario de ser asesinados por el gobierno fascista. Y, ahora, los Estados Unidos -nuestro aliado- nos da la espalda y opta por sentarse a la mesa con nuestros asesinos'.
Las valientes almas que arriesgan su vida en La Habana con rigor diario para reclamar por los derechos humanos que en suelo estadounidense se dan por sentados han visto a EE.UU. como un farol de la libertad durante mucho tiempo. No extraña que hayan sido traicionados. Y no son los únicos. El abrupto cambio de la política exterior americana por parte de Barack Obama también ha desilusionado a Israel, uno de nuestros más firmes aliados en el globo.
Año tras año, el Estado de Israel ha venido siendo uno de los pocos países que respaldan a Estados Unidos ante Naciones Unidas, mientras que las naciones cleptocráticas del mundo, los regímenes genocidas y Estados fallidos votan para condenar el embargo estadounidense sobre Cuba. A pesar de ello, la Administración Obama no ha tenido la cortesía de informar a Jerusalén de su próxima iniciativa.
'No nos avisaron siquiera con minutos de antelación', declaró un funcionario israelí de carrera al periódico Haaretz.
Los israelíes ahora tienen derecho a temer que el reconocimiento de Palestina como nación independiente es un ítem en la lista de Obama, conforme éste se prepara para dejar su 'histórica marca' en numerosos frentes.
Correspondientemente, la reversión de la política exterior hacia Cuba ejecutada por Obama reconfortó a los peores enemigos de EE.UU. en el Medio Oriente. Luego de que el embajador cubano ante Beirut, René Ceballos Prats, se reuniera con Ammar Moussawi (Hezbolá) para informarle sobre el cambio de política (Cuba sí se mantiene fiel a sus aliados), Moussawi declaró: 'Los logros de Cuba, que se mantuvo firme en sus principios, representa una lección para los pueblos del mundo que padecen la hegemonía estadounidense'.
Un grupo no-terrorista de Estados Unidos está vitoreando al presidente Barack Obama y a su cambio de política: el lobby de la agricultura. El 5 de enero, la web Politico Pro informó que Big Ag está preparándose para invertir millones de dólares haciendo lobby en el congreso para levantar el embargo, y a los efectos de permitir que los bancos estadounidenses financien exportaciones hacia Cuba, algo que está en posibilidades de hacer para el parlamento.
'Tomará una acción del congreso definir dónde podemos competir [en Cuba]', dijo a Politico el Vicepresidente de Asuntos Corporativos de Cargill, Devry Boughner Vorwerk. Vorwerk es el presidente de la recientemente lanzada Coalición de Estados Unidos para la Agricultura en Cuba', grupo de lobbistas en el rubro del campo y la alimentación.
Un cambio de política que permita a Raúl Castro traicionar a Estados Unidos solo logra traicionar a los disidentes -torturados durante largo tiempo- y a nuestro aliado Israel, al tiempo que ese cambio se encuentra refrendado por regímenes patrocinadores del terrorismo y capitalistas amigos. ¿Qué podría caer mal de este conglomerado?
Traducción al español: Matías E. Ruiz | Artículo original en inglés, en http://dailysignal.com/2015/01/10/raul-castro-is-already-double-crossing-us-over-cuba-deal/
Traducción al español: Matías E. Ruiz | Artículo original en inglés, en http://dailysignal.com/2015/01/10/raul-castro-is-already-double-crossing-us-over-cuba-deal/
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@Gundisalvus
Sobre Mike González
Es vicepresidente de comunicaciones en la Fundación Heritage (Washington, D.C.), y periodista con veinte años de trayectoria, habiendo reportado desde Europa y Asia. Durante la Administración del ex presidente estadounidense George W. Bush, asistió en temas fiscales y de política exterior en audiencias dentro de Estados Unidos y en el exterior, inicialmente en la Securities and Exchange Commission (SEC) y luego en el Departamento de Estado.