Obama quitará a Cuba de listado de naciones patrocinadoras del terrorismo; por qué es un error

Hacia fines de esta semana, en la Cumbre de las Américas, se espera que el presidente estadounidense Barack Obama anuncie la remoción de Cuba del Listado de Estados Patrocinadores del Terrorismo. El Departamento de Estado recomendó esa medida, en tanto se aguarda que el Secretario de Estado John Kerry exponga tal propuesta ante el primer mandatario.

La novedad no representa sorpresa, dado que Barack Obama ya había declarado su intención de hacerlo, al anunciar su nueva política exterior sobre Cuba, el 17 de diciembre pasado.

El dictador cubano Raúl Castro replicó al anuncio, afirmando:

• No habrá democracia en Cuba;
• Cuba seguirá siendo un Estado de partido único;
• No habrá cambios en el liderazgo del gobierno;
• El comunismo continuará;
• Los prisioneros políticos no serán liberados;
• No hubo señales de que se permitirá mayor acceso al Internet;
• No hay conversaciones que versen sobre más ciudadanos cubanos en visita a Estados Unidos;
• No habrá liberalización de medios;
• No se sugirió la restitución de US$ 8 mil millones en propiedad estadounidense robada; y, por cierto, Cuba desea que la base naval de Guantánamo sea devuelta.

Se trata del mismo dictador que, solo días después del anuncio de Obama, ordenó la ejecución de treinta y cinco cubanos, hundiendo el barco en el que se trasladaban. Castro continuó con el arresto de más de seiscientos disidentes durante los primeros tres meses de 2015. Considérese que Obama ahora se refiere a Raúl Castro como 'presidente' y como su par.

Remover al régimen castrista de Cuba del listado significaría ignorar tanto la naturaleza inherentemente maliciosa del gobierno cubano, sino también la utilidad de designar Estados terroristas. Quitar a Cuba del listado también removerá las sanciones que excluían su recepción de ayuda externa preferencial y beneficios comerciales. Repeler la designación, combinado esto con una debilidad futura de las sanciones, no será un buen augurio para los contribuyentes estadounidenses. Rutinariamente, el régimen defaultea en préstamos externos, y es culpable del robo de activos estadounidenses más grandes en la historia, alcanzando un aproximado de US$7 mil millones. Más aún, remover a Cuba del listado podría representar una violación del Acta de Administración de Exportaciones (Export Administration Act, EAA), legislación a través de la cual Cuba fue agregada en la lista de Estados Patrocinadores del Terrorismo.

Obama precisa comprender una simple realidad: darle todo a un dictador no satisface la ambición, la codicia, ni el sentido respecto del propio destino. El dictador solo termina envalentonándose, e interponiendo exigencias cada vez mayores.


Traducción al español: Matías E. Ruiz | Artículo original en inglés, en http://dailysignal.com/2015/04/09/obama-to-remove-cuba-from-state-sponsors-of-terrorism-list-why-thats-bad/