Elecciones en el Reino Unido: resurgimiento conservador; derrota socialista
Excediendo ampliamente toda expectativa, el Partido Conservador británico...
08 de May de 2015
Excediendo ampliamente toda expectativa, el Partido Conservador británico -liderado por el primer ministro David Cameron- resurgió en las Elecciones Generales del Reino Unido, obteniendo 330 bancas en el parlamento -las suficientes como para constituir mayoría en la Cámara de los Comunes.
El socialista Partido Laborista obtuvo apenas 232 asientos mientras que el voto de los Liberales Democráticos colapsó -lograron solo ocho bancas. El Partido Nacionalista Escocés obtuvo 56 asientos en Escocia. El Partido por la Independencia del Reino Unido (UKIP) logró solo una banca, a pesar de haber recibido más de tres millones de votos.
A continuación, cinco apostillas relativas al resultado del comicio:
1. El punto flojo de los laboristas fue la economía.
El Partido Laborista -encabezado por Ed Miliband- cosechó un dramático resultado negativo en la elección. El electorado británico claramente tuvo los pies fríos a la hora de votar por el líder socialista de izquierda, que pugnaba por revertir las exitosas políticas económicas del gobierno -dirigido por los conservadores.
La propuesta de Miliband -lindante con un mayor tamaño del Estado, mayor gasto y una agenda de altos impuestos- fracasó a la hora de capturar los corazones de la Inglaterra Media, y los votantes británicos optaron, a diferencia de la
proposición laborista, por el enfoque de libremercado corporizado en el espectro conservador. Las amplias reformas sociales, encaradas por el Secretario de Estado para Empleo y Pensiones, Iain Duncan Smith, también cosecharon popularidad entre el electorado.
2. Gran Bretaña continúa siendo, en esencia, una nación conservadora.
Los dos partidos principales del centro, el Partido Conservador y el Partido de la Independencia del REino Unido, se hicieron del 49.4% del voto total. En Inglaterra, la derecha se mostró dominante en términos del sufragio general.
La idea de que Gran Bretaña se convirtiera en un país más liberal es un mito. Desde el gasto estatal hasta la inmigración, el Reino Unido se ha vuelto más conservador en años recientes, en lo que hace a temáticas clave.
El Partido Conservador hubiese garnatizado incluso una diferencia más amplia a su favor, si David Cameron no hubiese marginado el numeroso apoyo de base, a partir de políticas de 'modernización' -como ser el respaldo del matrimonio homosexual y el incremento del gasto en ayuda exterior -siendo ambos temas profundamente impopulares en las bases conservadoras.
3. El referendum para el ingreso en la Unión Europea continuará.
David Cameron abogaba por mantener el referendum tendiente a resolver la cuestión de la membresía del Reino Unido en la Unión Europea, hacia 2017. Ed Miliband -del Partido Laborista- se había opuesto, y la derrota de su espacio abre ahora las puertas para que el plebiscito se desarrolle conforme lo planeado.
Si el pueblo británico vota por el abandono de la UE, la relación especial entre el Reino Unido y los Estados Unidos de América se verá fortalecida, y Gran Bretaña estará en una posición de mayor fuerza para negociar un acuerdo de libre comercio con Estados Unidos.
4. La capacidad de respuesta nuclear de Gran Bretaña continuará asegurada.
Previo a los resultados de la noche del jueves, Gran Bretaña enfrentaba el prospecto de una posible coalición entre los laboristas, la extrema izquierda y el Partido Nacionalista Escocés. Los nacionalistas escoceses se oponen al disuasivo nuclear basado en submarinos Trident, y arengaban por una Gran Bretaña sin armas nucleares. La totalidad de la fuerza nuclear del Reino Unido está basada actualmente en Escocia.
El retorno a un gobierno liderado por el conservadurismo implica que el elemento disuasivo nuclear de Gran Bretaña se ha garantizado, al menos para el futuro cercano. Los conservadores habían pugnado por mantener y renovar la fuerza nuclear británica -compromiso importante de cara a la OTAN.
5. El nacionalismo escocés resurge nuevamente.
El Partido Nacionalista Escocés emergió como el gran ganador en Escocia, con 56 de 59 bancas, habiéndose beneficiado de un colapso de laboristas y liberales democráticos al norte de la frontera.
A pesar de haber perdido el plebiscito por la independencia de Escocia en septiembre pasado, el Partido Nacionalista Escocés -liderado por Nicola Sturgeon- presionará indudablemente por la realización de otro acto comicial; llamado que será resistido por el gobierno británico.
Traducción al español: Matías E. Ruiz | Artículo original en inglés, en http://dailysignal.com/2015/05/08/uk-election-results-a-conservative-surge-and-a-defeat-for-socialism/
El socialista Partido Laborista obtuvo apenas 232 asientos mientras que el voto de los Liberales Democráticos colapsó -lograron solo ocho bancas. El Partido Nacionalista Escocés obtuvo 56 asientos en Escocia. El Partido por la Independencia del Reino Unido (UKIP) logró solo una banca, a pesar de haber recibido más de tres millones de votos.
A continuación, cinco apostillas relativas al resultado del comicio:
1. El punto flojo de los laboristas fue la economía.
El Partido Laborista -encabezado por Ed Miliband- cosechó un dramático resultado negativo en la elección. El electorado británico claramente tuvo los pies fríos a la hora de votar por el líder socialista de izquierda, que pugnaba por revertir las exitosas políticas económicas del gobierno -dirigido por los conservadores.
La propuesta de Miliband -lindante con un mayor tamaño del Estado, mayor gasto y una agenda de altos impuestos- fracasó a la hora de capturar los corazones de la Inglaterra Media, y los votantes británicos optaron, a diferencia de la
proposición laborista, por el enfoque de libremercado corporizado en el espectro conservador. Las amplias reformas sociales, encaradas por el Secretario de Estado para Empleo y Pensiones, Iain Duncan Smith, también cosecharon popularidad entre el electorado.2. Gran Bretaña continúa siendo, en esencia, una nación conservadora.
Los dos partidos principales del centro, el Partido Conservador y el Partido de la Independencia del REino Unido, se hicieron del 49.4% del voto total. En Inglaterra, la derecha se mostró dominante en términos del sufragio general.
La idea de que Gran Bretaña se convirtiera en un país más liberal es un mito. Desde el gasto estatal hasta la inmigración, el Reino Unido se ha vuelto más conservador en años recientes, en lo que hace a temáticas clave.
El Partido Conservador hubiese garnatizado incluso una diferencia más amplia a su favor, si David Cameron no hubiese marginado el numeroso apoyo de base, a partir de políticas de 'modernización' -como ser el respaldo del matrimonio homosexual y el incremento del gasto en ayuda exterior -siendo ambos temas profundamente impopulares en las bases conservadoras.
3. El referendum para el ingreso en la Unión Europea continuará.
David Cameron abogaba por mantener el referendum tendiente a resolver la cuestión de la membresía del Reino Unido en la Unión Europea, hacia 2017. Ed Miliband -del Partido Laborista- se había opuesto, y la derrota de su espacio abre ahora las puertas para que el plebiscito se desarrolle conforme lo planeado.
Si el pueblo británico vota por el abandono de la UE, la relación especial entre el Reino Unido y los Estados Unidos de América se verá fortalecida, y Gran Bretaña estará en una posición de mayor fuerza para negociar un acuerdo de libre comercio con Estados Unidos.
4. La capacidad de respuesta nuclear de Gran Bretaña continuará asegurada.
Previo a los resultados de la noche del jueves, Gran Bretaña enfrentaba el prospecto de una posible coalición entre los laboristas, la extrema izquierda y el Partido Nacionalista Escocés. Los nacionalistas escoceses se oponen al disuasivo nuclear basado en submarinos Trident, y arengaban por una Gran Bretaña sin armas nucleares. La totalidad de la fuerza nuclear del Reino Unido está basada actualmente en Escocia.
El retorno a un gobierno liderado por el conservadurismo implica que el elemento disuasivo nuclear de Gran Bretaña se ha garantizado, al menos para el futuro cercano. Los conservadores habían pugnado por mantener y renovar la fuerza nuclear británica -compromiso importante de cara a la OTAN.
5. El nacionalismo escocés resurge nuevamente.
El Partido Nacionalista Escocés emergió como el gran ganador en Escocia, con 56 de 59 bancas, habiéndose beneficiado de un colapso de laboristas y liberales democráticos al norte de la frontera.
A pesar de haber perdido el plebiscito por la independencia de Escocia en septiembre pasado, el Partido Nacionalista Escocés -liderado por Nicola Sturgeon- presionará indudablemente por la realización de otro acto comicial; llamado que será resistido por el gobierno británico.
Traducción al español: Matías E. Ruiz | Artículo original en inglés, en http://dailysignal.com/2015/05/08/uk-election-results-a-conservative-surge-and-a-defeat-for-socialism/
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@NileGardiner
Sobre Nile Gardiner
Es Director del Centro para la Libertad Margaret Thatcher, en la Fundación Heritage (Washington, D.C.). Es analista especializado en variadas temáticas, como la 'relación especial' entre Estados Unidos y el Reino Unido, Naciones Unidas, el Irak de posguerra, y el rol de Gran Bretaña y Europa en la alianza liderada por EE.UU. contra el terrorismo internacional y Estados autoexcluídos del orden mundial ('rogue states'), como Irán. Gardiner fue nombrado recientemente por el periódico The Daily Telegraph como uno de los cincuenta ciudadanos británicos más influyentes en EE.UU. Sus trabajos son también publicados en la web estadounidense The Daily Signal.