INTERNACIONALES: PETER BROOKES

El espinoso camino del acuerdo con Irán

Es divertida lo doloroso que pueden ser las mañanas de lunes pueden ser...

06 de Julio de 2015

Es divertida lo doloroso que pueden ser las mañanas de lunes pueden ser -por un sinnúmero de razones-, pero mucho más después de un feriado extendido, como lo fue el de los Estados Unidos de América con su Día de la Independencia.

Por ejemplo, a lo largo del receso americano del 4 de julio, una suerte de espada se agitaba desde las conversaciones nucleares con Irán en Viena -para todos aquellos que prestaban atención al evento-, en el sentido de que un acuerdo finalmente saldría de los encuentros entre las partes.

Pues, sí; finalmente.

Hacia la mañana del lunes, el pronóstico de las charlas se había modificado de soleado a tormentoso, no solo de cara a la eventualidad de que la fecha límite del 7 de julio se sobrepase, sino de advertencias al respecto de que podría ser Washington quien se retirase de la mesa de negociaciones.

Los prospectos de un acuerdo final para este martes exhibieron su carácter problemático.

Los informes de noticias procedentes de Viena reflejaron que aún existe una miríada de pozos en el camino que conduce a un acuerdo entre Irán y el Grupo 5+1 (compuesto por Estados Unidos, Francia, Gran Bretaña, Rusia, China y Alemania).

Aquellos pozos cobran forma en asuntos delicados, como ser el ritmo y el horizonte para el alivio de sanciones contra Irán, el escenario permitido para investigación y desarrollo en el programa nuclear de Teherán, la profundidad y el alcance del régimen de inspecciones y verificaciones, y preguntas relativas al trabajo previo de Irán en el terreno de la construcción de cabezas nucleares, entre otros.

Para complicar aún más las cosas, Irán busca el levantamiento de sanciones económicas punitivas sobre su programa de misiles balísticos, además de las sanciones interpuestas contra este país a raíz de sus transgresiones nucleares.

Y, por si todo ello tampoco fuera suficiente, Teherán demanda un fin del embargo de armamento que padece, variable que resulta profundamente perturbadora, habidacuenta de su apoyo al grupo terrorista Hezbolá, al régimen sirio y a sus propias aspiraciones regionales.

Si las conversaciones no rematan en un acuerdo para este martes, la legislación actual de los Estados Unidos de América exige que el congreso cuente con un panorama de revisión del acuerdo no de treinta días, sino de sesenta, a criterio de organizar presentaciones de informes y audiencias -previo a que el pacto sea efectivamente implementado por la Administración Obama.

Por cierto, arribar a un acuerdo nuclear con Irán no soluciona la plétora de otros problemas remanentes con la República Islámica, en donde se incluye su involucramiento en el Medio Oriente y el reprendible apoyo de esta nación al terrorismo internacional.

Hay una buena razón para mostrarse alarmado frente a la posibilidad de que el de Viena devenga en un mal acuerdo, especialmente si los Estados Unidos y sus socios ceden terreno a Irán con la meta de consolidar un pacto.


Traducción al español: Matías E. Ruiz | Artículo original en inglés, en http://dailysignal.com/2015/07/06/the-rough-road-to-reaching-a-deal-with-iran/

 

Sobre Peter Brookes

Es Analista Senior en temáticas relativas a seguridad nacional en la Fundación Heritage, Washington, D.C. En la actualidad, Brookes ejerce su tercer período como miembro designado en el congreso estadounidense de la Comisión de Revisión de Seguridad y de Economía entre Estados Unidos y la República Popular China. Anteriormente, se desempeñó en la Administración del ex presidente George W. Bush como secretario adjunto de Defensa para Asuntos de Asia y del Pacífico, en donde fue responsable por la política de Defensa de EE.UU. de 38 países y cinco alianzas bilaterales en el continente asiático.