El petróleo, en los mínimos de 2008

Desde fines de 2014, el petróleo se ha caído en una espiral bajista. En el cierre de la última semana, el petróleo de Texas (WTI) cerró en USD 35,62 el barril -por primera vez por debajo de los 36 dólares; precio que no registraba desde febrero de 2009. Por su parte, el precio de referencia del crudo Brent cerró con una caída del 4,5% semanal, estacionándose en USD 37,93 el barril.

 

En la opinión de analistas y entendidos en la materia, el exceso de oferta en el mercado es el principal problema del petróleo. Solo durante la semana pasada, el WTI, el barril de crudo referente en Estados Unidos, perdió un 10,9 por ciento. 

 

El descenso de los últimos días se encuentra íntimamente ligado a la decisión de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP), a raíz de que, en oportunidad de la reunión semestral del pasado 4 de diciembre, se decidió no aplicar un recorte en la producción -conforme lo exigieron algunos miembros. En dicho cónclave, las naciones de la OPEP elevaron su producción en noviembre, hasta alcanzar los 31,7 millones de barriles diarios. Cifra que, curiosamente, no se veía desde 2008.

 

Los análisis se presentan disímiles a la hora de ponderar el precio futuro del oro negro. Goldman Sachs estima que  su precio podría precipitarse hasta bordear los US$ 20 dólares, habida cuenta de que el globo podría quedarse sin capacidad para almacenar el petróleo no comerciado. Por su parte, el analista Roberto Ruarte (Ruarte's Reports) argumenta que se producirá 'rebote técnico' en el precio del petróleo, desde los niveles actuales (US$ 36.60- US$32) a niveles de entre US$ 60 y US$ 65 en el mediano plazo. El piso podría posicionarse en torno de los U$ 32.

 

De acuerdo con la Agencia Internacional de Energía (AIE), el exceso de suministro de petróleo se prolongará hacia fines del 2016, dada la menor demanda y el auge en la producción de la OPEP; a su vez, ello continuará presionando a la baja. El dato, tal se ha registrado ya en medios internacionales, no es la mejor noticia para los países petroleros no adheridos a la OPEP (el caso de Venezuela), en tanto representa un duro golpe a los países productores de petróleo que emplean tecnología de fractura hidráulica (fracking, como el caso de Estados Unidos). 

 

Mientras tanto, en la Argentina, la crisis del precio del petróleo ha congelado los planes de la petrolera estatal YPF de cara al yacimiento Vaca Muerta -cuyo crudo solo es extraíble por vía del fracking. Esta realidad ha llevado a la firma a clausurar cuatro torres de perforación y cinco destinadas a workover. La novedad afectará a un aproximado de quinientos trabajadores, los cuales ingresarán en un período de vacaciones forzadas.

 

En lo que hace al terreno financiero, la caída de YPF en la Bolsa de Comercio de Buenos Aires exhibe una caída acumulada del 22%, con un precio actual de cotización de AR$245. En el mercado de valores de Nueva York (NYSE), la baja anualizada del papel ha sido contundente, siendo del 40% y posicionando su cotización en US$ 15,92.

 

En rigor, se asiste a uno de los numerosos desatinos del gobierno de la ex presidente Cristina Fernández de Kirchner: en la República Argentina, el barril de petróleo se abona a un aproximado de US$75 -a contramano del resto del mundo, en donde el precio por unidad es de US$ 40 o incluso inferior. En conformidad con recientes denuncias de la Diputada Nacional Margarita Stolbizer, los caprichos de la Administración Kirchner le han hecho perder un aproximado de US$ 3 mil millones por año al Estado Nacional.