ECONOMIA INTERNACIONAL: JAMES M. ROBERTS

La caída de Rousseff ilustra la década perdida de Brasil

El senado brasileño votó para dar inicio al impeachment de la presidente Dilma Rousseff...

20 de May de 2016

El senado brasileño votó para dar inicio al impeachment de la presidente Dilma Rousseff, el próximo-pasado jueves. Rousseff, acusada de quebrar leyes federales en materia de presupuesto, será suspendida de su puesto mientras el proceso tenga lugar.

La suspensión de referencia ofrece una oportunidad a Brasil -la nación más grande de América Latina- para poner fin a su 'Década Perdida', durante cuyo transcurso, políticas erradas resultaron en un trágico fracaso para sacar de la pobreza (de manera creíble y permanente) a millones de personas.

Dilma, Maduro, Cristina KirchnerLos programas gubernamentales de gasto promocionados por Rousseff y su mentor y predecesor socialista, 'Lula' Da Silva, solo lograron sacar de la pobreza a millones de manera temporaria, a partir de transferencias de dinero en efectivo y beneficios en materia de asistencia social.

Tras mostrar sólidos índices de crecimiento económico hasta la crisis financiera de 2008, incluyendo una reducción en la pobreza, el incremento de los ingresos y una creciente clase media, la prestigiosa revista The Economist apuntó que el precipicio económico brasileño sobrevino cuando Lula multiplicó el gasto estatal en oportunidad de su segundo mandato -gasto que se prorrogó durante el tiempo de Rousseff en el poder.

Poco se hizo en las buenas temporadas para continuar el complejo -pero necesario- proceso de reformas estructurales que diera inicio en los años noventa por parte del ex presidente Fernando Henrique Cardoso, a criterio de remover los obstáculos reales que limitaban el crecimiento de la productividad y reprimían los mecanismos de convergencia con economías más avanzadas.

Ahora, y de acuerdo al matutino The Wall Street Journal, Brasil se encuentra atrapado en la peor caída desde la Gran Depresión. El PBI se ha contraído en un 3.8% el pasado año, y se encamina a achicarse al menos en ese porcentual en 2016. La deuda, los déficits y las tasas de interés se han disparado. El desempleo ha alcanzado los dos dígitos, y la inflación merodea el 10 por ciento anual.

Brasil incluso se ha granjeado pobres registros en el Indice de Libertad Económica, arrastrado por el exceso de gasto estatal, la corrupción, y la ineficiencia regulatoria.


El presidente hoy en ejercicio, Michel Temer, tiene las manos en extremo ocupadas, pero podría mostrarse capacitado para convertir la furia ciudadana que se vierte hacia Rousseff y la corrupción estatal en apoyo, a los efectos de llevar adelante reformas difíciles desde lo político, pero fundamentales para el país.

Más al sur, en la República Argentina, el nuevo gobierno de centroderecha del presidente Mauricio Macri ha hecho precisamente aquello, esto es, ordenar el daño económico inflingido por una década de peronismo populista -similar al de los años de Lula Da Silva y Dilma Rousseff.

La caída de Rousseff consigna la dificultad de la hora política en Brasil, pero representa otra señal positiva en la era de un desastroso populismo latinoamericano -próximo a llegar a su fin.


Artículo original en inglés, en http://dailysignal.com/2016/05/13/rousseffs-downfall-punctuates-brazils-lost-decade/

 

Sobre James M. Roberts

Es Analista en temáticas de Libertad Económica y Crecimiento en el Centro para Comercio Internacional y Economía (CITE). Responsable de tareas de investigación, desarrollo y análisis del Indice de Libertad Económica (desarrollado en conjunto entre la Fundación Heritage y The Wall Street Journal). Sirvió durante 25 años en el Departamento de Estado, desempeñándose en el servicio exterior en las embajadas de los Estados Unidos en México, Portugal, Francia, Panamá y Haití