ECONOMIA INTERNACIONAL: C. RODRIGUEZ BRAUN

España y la Cataluña económica

Además de las graves tensiones políticas, en las últimas semanas, la economía ha adquirido protagonismo...

26 de Octubre de 2017
Además de las graves tensiones políticas, en las últimas semanas, la economía ha adquirido protagonismo en Cataluña, a raíz de la salida de bancos y empresas, que empezó siendo un goteo y puede convertirse en riada.
 
Esta posibilidad fue una y otra vez negada por las autoridades nacionalistas. Ya en 2015, los bancos advirtieron del riesgo si la independencia era declarada de manera unilateral. Pero Artur Mas, entonces presidente de la Generalitat, lo desmintió de manera tajante: “no se marchará nadie”, aseguró.
 
Cataluña, EconomíaEn realidad, sucedió justo lo contrario: las empresas se marcharon, y lo hicieron además en un número superior a las previsiones. Si la situación no se encauza, y en particular si empeora, todo indica que esa huida de empresas alcanzará dimensiones significativas.
 
¿Qué impacto puede tener eso sobre la economía? Luis Garicano y Francisco de la Torre, economistas del Partido Ciudadanos, analizaron el tema desde el punto de vista de la Hacienda Pública de una posible Cataluña independiente. Su conclusión fue que, como el Impuesto de Sociedades es un gravamen del Estado (salvo en NavarraPaís Vasco), el cambio de sede de empresas no tendrá un efecto cuantioso sobre la recaudación. Pero añadieron que el impacto más importante no será ese, sino que una Cataluña independiente no podría cobrar impuestos, porque le faltaría no sólo el sistema informático o el personal especializado para hacerlo, sino especialmente la información que la Agencia Tributaria recibe de bancos y empresas: “Sin grandes empresas, incluso teniendo una Hacienda propia que la Generalitat no tiene, no es posible la recaudación”.
 
Ahora bien, dejando aparte la cuestión fiscal, las consecuencias que la fuga de empresas tendrá sobre la economía catalana será muy probablemente negativa, aunque no sepamos con exactitud el porcentaje que representará en la caída del PIB. El efecto de imagen es muy perjudicial, y dañará al ahorro, la inversión y el empleo.
 
Cabría argumentar que una Cataluña independiente podría convertirse, como dijeron algunos líderes nacionalistas, en una nueva Suiza, en un marco de libertad y seguridad jurídica que dieran lugar a un paraíso de prosperidad. Puede ser. Pero yo que usted no apostaría.

 
Publicado originalmente en El Periódico (Sotogrande; Cádiz, España)
Sobre Carlos Rodríguez Braun

Es doctor en Ciencias Económicas por la Universidad Complutense de Madrid y catedrático de Historia del Pensamiento Económico en la misma universidad. Sus artículos son publicados en el sitio web en español del Instituto Cato (Washington, D.C.).