A un click de la aniquilación

El reloj que expresa la cercanía ante la guerra nuclear -informado periódicamente por el sitio web del Boletín de Científicos Nucleares (Bulletin of Atomic Scientists) se ha adelantado en dos minutos para la medianoche, lo que consigna el punto más cercano en torno de un eventual apocalipsis atómico desde el fin de la Guerra Fría. En 1995, el reloj se hallaba a catorce minutos de la medianoche, pero la oportunidad para alejarlo aún más se extravió, conforme Estados Unidos y sus aliados europeos se aprovecharon de una Rusia en situación de debilidad para proyectar a la OTAN hacia la Europa Oriental. Lo cual determinó el proscenio para una nueva guerra fría, hoy en curso.

Resulta difícil imaginar cómo Estados Unidos podría evitar una nueva guerra en Oriente Medio, dadas las recientes expresiones compartidas desde Washington, y dado que los rusos también se encuentran muy activos en esa región. A la postre, una escalada súbita y masiva de algo que diera inicio bajo el formato de un incidente menor no debería descartarse.

Y el presidente estadounidense Donald Trump ayudó a tal escenario, al advertir en Naciones Unidas el próximo-pasado martes que Estados Unidos se ocuparía en soledad de defender sus intereses percibidos, sin tomar nota de los organismos internacionales que existen para limitar los conflictos armados y para reprender a quienes perpetran crímenes de guerra.

El discurso de Trump -de unos 35 minutos de duración- se caracterizó por apuntar a Irán, en muchos de sus pasajes. Comentó el mandatario americano:

'Los líderes de Irán siembran caos, muerte y destrucción. Ellos no respetan a sus vecinos, ni respetan fronteras, ni los derechos soberanos de las naciones. En lugar de ello, los líderes de Irán saquean los recursos de su país para enriquecerse a sí mismos y para diseminar caos a lo largo de Oriente Medio, y más allá (...) No podemos permitir que el mayor patrocinador de terrorismo en el mundo cuente con el armamento más peligroso del planeta. No podemos permitir que un régimen que canturrea 'Muerte a los Estados Unidos', y que amenaza a Israel con la aniquilación, cuente con los medios para despegar un misil de cabeza nuclear contra cualquier ciudad en el planeta'.

La emotiva descripción que ilustra la falta de respeto contra 'vecinos, fronteras y derechos soberanos' también le cabe a los Estados Unidos y a Israel, antes que a Irán. Estados Unidos tiene soldados desplegados ilegalmente en Siria, mientras que Israel bombardea ese país casi con rigor diario; de tal suerte que, ¿a quién le cabe el mencionado sinrespeto? Asimismo, Washington y Tel Aviv son los principales patrocinadores de terroristas en Oriente Medio, y no lo es Irán -EE.UU. e Israel arman a esos terroristas, los entrenan, les brinda cuidados médicos cuando resultan heridos, garantizando con ello que continuarán sus ataques contra el legítimo gobierno sirio.

Y, en lo que respecta a las 'armas más peligrosas', Irán no tiene ninguna de ellas, e incluso es signatario del Tratado de No-Proliferación Nuclear, el cual ni Israel ni Estados Unidos han firmado. Como tampoco Irán contará con esas armas en el futuro, por el hecho de que Trump se ha retirado del acuerdo que monitorearía el desarrollo y las investigaciones nucleares iraníes, las cuales, en cualquier caso, motivarían a Irán a desarrollar ese tipo de armamento para protegerse a sí mismo.

De igual manera, Trump se explayó en relación al pretendido (aunque inexistente) programa nuclear iraní, al afirmar el mandatario estadounidense al Consejo de Seguridad ONU que Washington perseguiría a países que violen las reglas sobre proliferación nuclear. Claramente, identificó a Irán, pero el comentario fue al extremo irónico, conforme Israel es la principal nación rebelde del planeta, contando con un arsenal de doscientos dispositivos nucleares -tras haber robado elementos clave de esta tecnología a los propios estadounidenses en los años sesenta.

La nueva evaluación que Trump hizo recientemente sobre el estado de situación en Oriente Medio es, en algún modo, un cambio de actitud. Cinco meses atrás, señaló Trump que deseaba 'retirarse' de Siria, y repatriar a los soldados estadounidenses. Pero a comienzos de septiembre, el representando especial del Secretario de Estado para la política oficial hacia Siria, James Jeffrey, expresó que Estados Unidos se mantendría en esa región, a criterio de contrarrestar las actividades iraníes.

Mientras tanto, John Bolton también ha compartido numerosos comentarios sobre Irán, Siria y Rusia. El pasado lunes, confirmó el funcionario que Washington se propone mantener una presencia militar en Siria, al menos hasta que Irán retire a la totalidad de sus fuerzas de ese país. 'No nos iremos, mientras tropas iraníes continúen desplegadas en la periferia de las fronteras iraníes, y eso incluye también a los ejércitos subsidiarios de Irán, y a sus milicias'. El día siguiente, en una presentación en la Cumbre Unidos Contra un Irán Nuclear (United Against Nuclear Iran), espectro financiado por Sheldon Adeson, dijo Bolton que 'el régimen homicida' de los 'mulás de Teherán' debería hacer frente a serias consecuencias si insisten en su predisposición para 'mentir, hacer trampas y distraer. Si Usted nos traiciona, traiciona a nuestros aliados o a nuestros socios; si Usted hiere a nuestros ciudadanos, entonces habrá un infierno qué pagar. Que mi mensaje de hoy se entienda claramente: observamos lo que sucede, e iremos a por ustedes'.

John Bolton también advirtió a los rusos sobre su decisión de optimizar sus sistemas de defensa aérea en Siria, a partir del reciente raíd de bombardeos israelíes que terminó con el derribo de una aeronave rusa de inteligencia. De manera absurda e imprecisa, Bolton señaló: 'Los israelíes tienen el legítimo derecho de defenderse ante este agresivo comportamiento iraní, y lo que estamos intentando hacer es reducir las tensiones, reducir las chances de hostilidades mayores en magnitud. Esta es la razón por la cual el presidente ha hablado sobre el particular, y por qué entendemos que introducir [sistemas de defensa aérea] S-300 es un error'.

Bolton luego explicitó: 'Creemos que dotar de S-300s al gobierno sirio consignaría una significativa escalada por parte de los rusos, y algo que, esperamos, si los informes son precisos, Moscú reconsidere'. Y, en relación a quién fue responsable por la muerte de la tripulación rusa de la aeronave derribada, Bolton también lanzó una explicación plausible: 'No debe haber malinterpretación alguna aquí (...) La parte responsable por los ataques en Siria y el Líbano y, en rigor, la parte responsable por el derribo de la aeronave rusa, es Irán'.

El deseo de Bolton de liberar a Israel de culpa y cargo siempre, y de culpar a Teherán, inevitablemente queda expuesto. Curiosamente, Bolton objeta el despliegue de misiles defensivos en su naturaleza, presuntamente porque el primer ministro Benjamin Netanyahu le exigió hacerlo. La única manera en que uno puede ser amenazado por los sistemas S-300 es si Usted está atacando a Siria, pero ese podría ser un tema Bolton prefiere eludir -provisto que, desde la época de Vietnam en adelante, el propio funcionario jamás puso su vida en riesgo para promocionar ninguna de las guerras que auspicia.

El Secretario de la Defensa, Jim Mattis, también habló el lunes pasado, pero en el Pentágono. Su percepción sobre Irán fue ligeramente diferente a la de Bolton, pero el mensaje fue el mismo. 'Como parte de esta extendida problemática, hemos de lidiar con Irán. A todas partes donde Usted va en Oriente Medio y se topa con inestabilidad, ahí está Irán. Así es que, en términos de continuar con las negociaciones de Ginebra, Irán también tiene un rol qué desempeñar, el cual se sintetiza en dejar de fomentar problemas'.

Para completar el cruento panorama, el Secretario de Estado Mike Pompeo, al hablar en la misma cumbre que Bolton, acusó a los países europeos de intentar eludir el cerco interpuesto por las sanciones estadounidenses contra la adquisición de crudo iraní, por 'consolidar la posición de Irán como el principal patrocinador de terrorismo. Imagino que los corruptos ayatolás y la Guardia Revolucionaria se están riendo a carcajadas esta misma mañana'.

También el Congreso de los Estados Unidos se ha percatado de que algo se ha escapado de control. Un núcleo bipartidista de senadores, que cautelosamente expusieron sobre lo que piensan del gobierno israelí, advirtieron luego de un viaje hacia Oriente Medio que la guerra entre los Estados Unidos y los ejércitos subsidiarios de Irán es 'inminente'.

Es entretenido pegarle a Irán, pero China también ha recibido algunos golpes. El pasado miércoles, el cónclave del Consejo de Seguridad ONU estuvo presidido por Donald Trump, quien advirtió que Pekín está 'interfiriendo' en las elecciones estadounidenses, para perjudicarlo. Se trata de una afirmación bizara, particularmente cuando el único país sobre el cual se ha comprobado interfirió en los comicios americanos ha sido Israel. La acusación de Trump sobrevino en medio de la última oleada de sanciones económicas, dirigidas contra el Departamento de Desarrollo y Equipos de la Comisión Militar Central china y contra su director, Li Shangfu, por 'involucrarse en transacciones significativas' con un fabricante de armas de origen ruso que fuera incluído en la lista americana de firmas privadas sancionadas.

Las sanciones contra China son un tema serio, conforme prohíben llevar adelante transacción alguna por dentro del sistema financiero estadounidense. En realidad, esta es el arma más poderosa del arsenal con que cuenta Washington. Provisto que el grueso de las transacciones internacionales son llevadas a cabo en dólares y pasan por bancos de Estados Unidos, esto significa que será imposible para el gobierno chino realizar compras de armamento a numerosas fuentes del extranjero. Si un banco o institución extranjera intenta colaborar con Pekín a efectos de eludir el cerco de las sanciones, entonces también esa institución o banco serán sancionados por Washington.

Así es que, si Usted está prestando la debida atención a Trump, Bolton, Mattis, Pompeo y Nikki Haley, probablemente piense en esconderse bajo tierra. Estados Unidos le ha dicho a Irán que no puede enviar a sus soldados y 'ejércitos subsidiarios' o proxies al exterior, mientras que Siria no tiene permitido adquirir misiles para defender su propio espacio aéreo -por lo cual Rusia ha sido 'advertida', siendo el proveedor. China tampoco puede comprar armanento a Rusia, mientras que Venezuela también está siendo amenazada por contar con lo que se ha calificado como un gobierno horrendo. Mientras tanto, Estados Unidos se halla presente en Siria, en Irak y en Afganistán para quedarse, estando todos de acuerdo en que una guerra con Irán se aproxima. Todo mundo es el enemigo, y todo mundo odia a Estados Unidos -en general, por las razones correctas. Si en esto consiste el eslogan 'Make America Great Again', pues entonces, entiendo que me conformaría con hacer que EE.UU. sea apenas 'buena'. Todo, con tal de retroceder el reloj, y mover el minutero lo más lejos posible de la medianoche.


Artículo original, en inglés, en éste link | Traducido y republicado con permiso del autor y de The Unz Review (Estados Unidos)