ECONOMIA INTERNACIONAL: JAMES M. ROBERTS

Reconstruir la economía venezolana no será tarea sencilla

La actual crisis en Venezuela está observando impactos mínimos en los mercados globales.

29 de Enero de 2019

La actual crisis en Venezuela está observando impactos mínimos en los mercados globales. En rigor, y yendo hacia el futuro, los riesgos económicos son ínfimos.

Nicolás Maduro, Genocidio, Represión, Dictadura, Cuba, La HabanaExiste, sin embargo, un potencial enorme, si acaso la coalición de naciones liderada por los Estados Unidos de América y -más importante- los propios ciudadanos venezolanos se muestran capaces de ejercitar una presión pacífica, no violenta, a los efectos de forzar a Nicolás Maduro a que ponga fin a su brutal dictadura y ceda el poder.

Esto sentaría las bases para que el presidente interino, Juan Guaidó, dé inicio al largo proceso de restaurar una democracia orientada al mercado.

El régimen de Maduro se aferra al poder solo respaldado por los generales de las fuerzas armadas venezolanas, mientras que el pueblo sufre. El terrible alcance de estos padecimientos se han cristalizado oportunamente en la edición número 25 del Indice de Libertad Económica -desarrollado por el think tank estadounidense Heritage Foundation, en Washington, D.C..  

Este año, nuevamente, Venezuela se sitúa en el fondo del ránking -en la categoría de 'economías reprimidas'. El único país del mundo con menos libertad económica que Venezuela, ahora mismo, es Corea del Norte

Venezuela ha sabido ocupar el fondo de este Indice por más de quince años, reflejando el fracaso del socialismo latinoamericano de Hugo Chávez. Información económica adicional también ilustra vívidamente esta épica debacle.
 

Por ejemplo, cuando Chávez se hizo del poder en 1999, la firma petrolera estatal PDVSA producía 3.5 millones de barriles de crudo al día. Hoy, la producción se ha desmoronado dramáticamente. 

Mientras que el régimen de Maduro afirma que produce hoy 1.3 millones de barriles diarios, analistas independientes han certificado que esa cifra es bastante inferior. La ruina que Chávez y Maduro trajeron a PDVSA consigna, quizás, el ejemplo más ilustrativo de los desastrosos efectos legados por sus políticas.

Irónicamente, y sin embargo, el petróleo producido por Venezuela en el medio del cénit de resultados ayudó en su momento a minimizar los efectos de la crisis del país en tiempos de Maduro. En los últimos días, los precios del crudo han crecido muy ligeramente.

De igual manera, los mercados internacionales de capitales han acusado un impacto mínimo, hecho reflejado por los casi inmutables spreads del crédito en la región. Los bonos de PDVSA supieron ser valiosos entre inversionistas globales pero, por estas horas, los pocos tenedores de los mismos han sufrido recortes profundos en sus valores.

Si acaso Maduro elige abandonar el poder -y cuándo lo haga-, ello puede dar lugar a un reemerger inicial en los mercados, de lo cual surgirán sensaciones emparentadas con el optimismo.

Naturalmente, dada la casi completa destrucción de la economía venezolana durante las últimas dos décadas, la era post-chavista también vendrá de la mano de no pocos años de dolorosa reconstrucción.

 



Artículo original, en inglés, aquí

 

Sobre James M. Roberts

Es Analista en temáticas de Libertad Económica y Crecimiento en el Centro para Comercio Internacional y Economía (CITE). Responsable de tareas de investigación, desarrollo y análisis del Indice de Libertad Económica (desarrollado en conjunto entre la Fundación Heritage y The Wall Street Journal). Sirvió durante 25 años en el Departamento de Estado, desempeñándose en el servicio exterior en las embajadas de los Estados Unidos en México, Portugal, Francia, Panamá y Haití