INTERNACIONALES : TYLER O'NEIL

Senador estadounidense: la corrupción del FBI consignada en los 'Twitter Files' es apenas la 'punta del iceberg'

El senador estadounidense Ron Johnson -del Partido Republicano, en representación del estado...

29 de Diciembre de 2022

 

El senador estadounidense Ron Johnson -del Partido Republicano, en representación del estado de Wisconsin- pidió a sus pares del Partido Demócrata que se unieran a los Republicanos en una investigación que indague sobre la politización que afecta a las agencias de seguridad federales, tras conocerse uno de los recientes episodios del ciclo dado en llamar 'Twitter Files' (Archivos de Twitter). En aquella colección de apuntes, se reveló que la Oficina Federal de Investigaciones (FBI) pagó a Twitter más de US$ 3.4 millones mientras ese órgano de seguridad presionó a la red social y, según se informara, la Oficina intentara obstaculizar la pesquisa de Johnson en torno a los negocios ejecutados por Hunter Biden, hijo del presidente, en el extranjero.


Ron Johnson, Republicano, Wisconsin, Estados Unidos, Corrupción en el FBI'El nivel de corrupción revelado en el ciclo ‘The Twitter Files’ es apenas la punta del iceberg; hay allí una historia más ampñlia que debe ser develada y expuesta', declaró Johnson al medio estadounidense The Daily Signal.

El legislador en representación de Wisconsin mencionó que la mayoría que el GOP tendrá próximamente en la Cámara de Representantes probablemente investigará al FBI y a otras agencias del orden federal; sin embargo, pidió a sus pares del Partido Demócrata aunar esfuerzos.

'Haré todo lo que esté a mi alcancce para asistir a los legisladores de la Cámara de Representantes que lideren esta serie de investigaciones. A efectos de hallar mayores porciones de la verdad, sin embargo, necesitaremos que los Demócratas hagan a un lado su visión partidista y acompañen nuestro esfuerzo', consignó Johnson. 'Aún cuando el "deep state" actual los favorezca, los Demócratas habrán de comprender que la amenaza que fuerzas federales, seguridad nacional y agencias de inteligencia politizadas representan en perjuicio de nuestra libertad y nuestro sistema democrático'.

'En mi posición como miembro de primera línea en el Subcomité Permanente Dedicado a Investigaciones, mantendré mi dedicación absoluta a indagar en profundidad frente a estas temáticas, proporcionando al pueblo de los Estados Unidos la información que tiene derecho a conocer', concluyó.

Por su parte, Gary Peters, representante del Partido Demócrata por Michigan, y presidente del Comité del Senado dedicado a Seguridad Interior y Asuntos Gubernamentales -líder del comité supervisor en el Senado-, no respondió a los requerimientos de información formulados por The Daily Signal.

Johnson y el senador Chuck Grassley, Republicano por Iowa, han acusado al FBI de haber actuado con miras a desacreditar la investigación de los legisladores, que buscó arrojar luz sobre los vínculos financieros del hijo del presidente Joe Biden, Hunter, con gobiernos extranjeros.

El 6 de agosto de 2020, Grassley y Johnson se reunieron con la Fuerza Especial que entiende sobre Interferencia Extranjera en el FBI. Durante esa reunión, el FBI presentó 'información que ya conocíamos, y en lo absoluto vinculada con nuestra investigacion sobre Biden', escribió Grassley.

Ciertos elementos de ese encuentro fueron filtrados entonces a medios de prensa, llevando a lo que Grassley calificó como 'artículos imprecisos publicados por los medios durante el curso de nuestra investigación; esos textos etiquetaron a nuestra investigación, por supuesto falsamente, como una acción de desinformación rusa'.

El FBI logró capturar el ordenador portátil abandonado por Hunter Biden en diciembre de 2019. Sin embargo, y de acuerdo a informantes bajo identidad reservada que conversaron con Grassley y Johnson, la Oficina fracasó a la hora de investigar las explosivas afirmaciones que versaban que el propio Joe Biden se había involucrado en lucrativos negocios foráneos junto a su hijo Hunter, tanto en China como en Ucrania y otras geografías.

Para peor, según han apuntado algunos observadores políticos, el FBI o bien otras agencias de inteligencia parecen haberse esmerado para 'desmentir preventivamente' (pre-debunking) la historia, presionando a Twitter y a otros canales en redes sociales con el objeto de suprimirla bajo excusas de 'desinformación' -aún cuando, en efecto, el ordenador perteneció a Hunter Biden, como se confirmaría luego.

En la previa de los comicios presidenciales de 2020, funcionarios del FBI y de otros organismos en la comunidad de inteligencia estadounidense mantuvieron encuentros semanales con directivos de Twitter, según surge de una declaración jurada presentada por Yoel Roth, ex responsable de integridad de la popular red social.

'Se me dijo durante esas reuniones que la comunidad de inteligencia anticipaba que los individuos asociados con campañas políticas acusarían ataques cibernéticos, y que el material obtenido a través de esas vías probablemente terminaría siendo diseminado en plataformas de redes sociales, incluyendo Twitter', comentó Roth, de acuerdo a lo informado por el matutino New York Post. 'Asimismo, en aquellos encuentros, tomé conocimiento de los rumores en torno de una operación del tipo hack-and-leak (hackear y filtrar), que involucraría a Hunter Biden'.

De momento, no queda claro si acaso el FBI o bien otra agencia de inteligencia trajeron a colación el tema de Hunter Biden, pero la posesión del ordenador por parte del FBI bien pudo haber influenciado la amplificación de ese rumor.

A comienzos de diciembre, un nuevo capítulo de la saga 'Twitter Files', publicada por el periodista Michael Shellenberger, arrojó importante luz sobre esta aparente campaña de influencia.

Aún cuando ni Twitter ni el FBI hallaron eviencias de un intento originado en la Federación Rusa con miras a influir en los comicios presidenciales de 2020 como en 2016, la comunidad de inteligencia americana presionó a Twitter para que compartiera más información, y para que modifique sus políticas, sobre la base de la amenaza de una campaña de interferencia electoral con origen en el extranjero.

Numerosos ex empleados del FBI luego se unieron a Twitter. De acuerdo a la documentación dada a conocer por Shellenberger, Twitter ya contaba con una formidable cantidad de empleados del FBI, como para designarlos particularmente: así, la referencia a ellos era 'Bu Alumn' (reducción de 'Bureau Alumni').

Elvis Chan, del FBI, se las arregló para obtener credenciales de seguridad de alto secreto temporales, para ser entregadas a ejecutivos de Twitter. Acto seguido, la Oficina Federal de Investigaciones abonó al FBI US$3.415.323 entre octubre de 2019 y febrero de 2021, a título de reembolso por el trabajo realizado por Twitter en 'proyectos relacionados con LE' ('LE-related projects', corto para ''law enforcement-related projects', 'proyectos relacionados con la aplicación de la ley').

El primer episodio de los 'Twitter Files' había revelado que ejecutivos de Twitter jamás tuvieron una explicación razonable para censurar y suprimir la información que versaba sobre el ordenador portátil de Hunter Biden. Sin embargo, la presión ejecutada desde el FBI ayuda a comprender por qué Twitter decidió duplicar la apuesta en favor de la censura, 'como exceso de precaución'.

Toda vez que resulta imposible conocer qué hubiese sucedido si Twitter no hubiese suprimido el informe del New York Post en torno de los contenidos del ordenador, una encuesta de la firma Media Research Center llevada a cabo días después de los comicios de 2020, detectó que el 36% de las personas que se autodescribieron como votantes de Joe Biden declararon no conocer evidencias de que Joe Biden estaba involucrado con los negocios de su hijo con China -afirmación descubierta a partir de los correos electrónicos que surgieron de la computadora.

De acuerdo al estudio, el 13% de aquellos votantes (4,6% de todos los votantes de Biden en el universo recurrido) afirmaron que, de haber conocido los hechos, no se hubiesen inclinado en las urnas por el actual presidente.

Aún cuando esa aparente campaña de influencia ayudó a los prospectos del Partido Demócrata, Johnson sugirió que la ciudadanía estadounidense debería preocuparse especialmente por la politización que hoy acusan las agencias de seguridad federales.



Artículo original, en inglés

 

- El autor, Tyler O'Neil, se desempeña como Editor en el sitio web estadounidense The Daily Signal.