Panel sobre seguridad nacional en el Congreso estadounidense: 'Los estudios de cine no deberían dedicarse a crear propaganda para el Partido Comunista Chino'

Un legislador del Partido Republicano trabaja hoy -una vez más- con el objetivo de contrarrestar el modo en que el Partido Comunista Chino se esmera en influenciar a Hollywood y a sus decisiones sobre producción en fílmico. 

El Representante Mark Green, en representación del estado de Tennessee, reintrodujo el Acta para Impedir que Regímenes Comunistas se Involucren en Edición (Stopping Communist Regimes from Engaging in Edits Now Act), también conocida como Acta SCREEN -este miércoles 8 de marzo pasado.

'Desde que introdujimos el Acta SCREEN en febrero de 2022, el Partido Comunistaa Chino incrementó sus intentos para censurar la libertad de expresión en los Estados Unidos. El PCCh no convertirá a nuestra industria del cine en un instrumento para diseminar su propaganda', declaró Green -que preside el Comité de Seguridad Nacional de la Cámara de Representantes, en un comunicado de prensa.

'Un momento notable de Hollywood tuvo lugar cuando los estudios Paramount se plantaron ante el PCCh cuando éste le pidió censurar segmentos de "Top Gun: Maverick". Ahora, esta película ha sido nominada para llevarse el premio más importante en los Oscar de la Academia, y se convirtió en el film de mayor recaudación de taquilla durante 2022', señaló Green. 'Necesitamos que más estudios de cine se decidan a poner a Pekín en su sitio. Mi legislación propiciará incentivos para que más estudios de Hollywood se planten con la debida firmeza contra la China comunista'.

Green agregaría, después:

Numerosas películas de alto presupuesto requieren de asistencia de parte del gobierno de los Estados Unidos, a la hora de contara con asistencia técnica. Mi legislación logrará que esa ayuda nunca esté disponible para aquellos estudios que retrocedan ante las presiones de Pekín.

Los estudios de cine en los Estados Unidos no deberían crear propaganda para el PCCh y, si se inclinaran por esa vía, pues, entonces no recibirán asistencia alguna de parte del gobierno de los Estados Unidos de América. 

Específicamente, el proyecto 'limitará el uso de fondos para la producción de películas que requieren de activos del Departamento de Estado bajo ciertas circunstancias, y para otros propósitos'.

Más aún, el trabajo legislativo propuesto 'prohibirá al gobierno federal brindar cualquier tipo de asistencia a estudios de Hollywood en la producción de una película, si ese film es co-producido por cualquier firma de la República Popular China', remata el comunicado de prensa. 

El proyecto exige se cumplan determinadas condiciones para que se garantice financiamiento desde el Departamento de Estado, como ser, un convenio de parte del estudio al respecto de que no censurará películas bajo pedido del Partido Comunista. Asimismo, el estudio habrá de contar con un historial perfecto, de jamás haber editado producciones a pedido de Pekín.

Mike González, senior fellow en el think tank The Heritage Foundation, evaluó los contenidos de la legislación. 'Debemos hacer todo lo posible a criterio de impedir que la audiencia esstadounidense sea adoctrinada por propaganda diseñada por el Partido Comunista de China', señaló el experto al medio The Daily Signal, a través de correo electrónico. 'A la postre, la responsabilidad queda en la propia Hollywood; sin embargo, nuestro gobierno tiene un rol fundamental que cumplir aquí'.

El presidente Joe Biden, con respaldo de legisladores del Partido Demócrata y del Partido Republicano, rubricó el Acta de Autorización para la Defensa Nacional, con lo cual la misma alcanzó status de ley en diciembre pasado. En los considerandos de la Sección 1257 de la NDAA, se 'prohíbe el empleo de fondos con miras a respaldar proyectos de entretenimiento que exhiban vínculos con el gobierno de la República Popular China'.

'Durante muchos años, hemos visto cómo ciertos estudios de Hollywood se abalanzan para someterse al gobierno chino, mientras que sus chances de que se permita la exhibición de determinadas películas en territorio chino son, en rigor, notoriamente bajas', consignó Michael Cunningham, fellow de investigaciones en el Centro para Estudios Asiáticos, de la ya citada Heritage Foundation.

Cunningham observó que China cuenta con una 'cuota muy estricta' de películas extranjeras cuya proyección se permite en sus cines durante determinado año. De tal suerte que los estudios 'se esmeran para satisfacer al régimen chino, con el objeto de minimizar las chances de que la proyección de ese trabajo no se habilite y, en simultáneo, para maximizar las chances de que el material caiga en buen agrado de las autoridades chinas, y éstas se muestren felices de exhibirlo'.

Cunningham apuntó a los flims 'Mulan' de Disney y a 'Top Gun: Maverick' como ejemplos recientes que ilustran cómo los estudios en Hollywood deben navegar ante las dificultades interpuestas por Pekín.

'En el caso de "Mulan", se las arreglaron para ofender a China pero, en realidad, terminaron ofendiendo a gran parte del mundo a raíz del asunto de Xinjiang', apuntó Cunningham.

El analista de Heritage se refería a la decisión de Disney de grabar segmentos de 'Mulan' en la provincia china de Xinjiang, que ha cosechado una infortunada fama mundial a partir de la detención de más de un millón de musulmanes de la etnia uighur.

'Acto seguido, Disnely se las arregló para ofender a los residentes de Hong Kong, porque la actriz principal del trabajo criticó las protestas de los hongkoneses, para favorecer el punto de vista de Pekín y del gobierno de ese territorio', completó Cunningham. 'Y, luego, al pueblo chino no le gustó tampoco, porque el público de ese país entendió que ni el guión ni los escenarios sintonizaban con la historia real de China. Así que Disney salió perdiendo'.

'Mientras tanto, ahí está el caso de "Top Gun" que, inicialmente, pareció inclinarse ante los intereses chinos. No obstante, cuando la película fue distribuída, todos tomaron consciencia de que un trabajo que en realidad glorificaba a las fuerzas armadas estadounidenses no iba a lograr ingresar al mercado de la República Popular, en ningún caso', completó el experto. 'De manera tal que hubo cautela, y el resultado fue que la película fue muy popular en todo el mundo'.

El Senador Ted Cruz, Republicano en representación del estado de Texas, también trabajó para contrarrestar la influencia de la 'censura china', mediando proyectos legislativos introducidos durante 2020.

'Durante demasiado tiempo ya, Hollywood se ha mostrado como cómplice de la censura y de la propaganda chinas, para garantizarse el ingreso de pingües ganancias', declaró Cruz en su oportunidad. 'El Acta para Detener la Censura y Restaurar la Integridad servirá como un severo llamado de atención, forzando a Hollywood a elegir entre la asistencia que necesitan de parte del gobierno estadounidense, y entre los dólares que se proponen obtener de China'.

Disney no respondió a consultas remitidas por el medio The Daily Signal.

'Por una cuestión práctica, no comentamos sobre proyectos legislativos de pendiente aprobación', comentó un vocero del Departamento de Estado, sin embargo. 

Artículo original, en inglés

- La autora, Samantha Aschieris-Renck, se desempeña como productora senior de noticias, en The Daily Signal (EE.UU.)