Declaración del Atlántico: oportunidad para refrescar relaciones entre el Reino Unido y los Estados Unidos
La primera visita de Rishi Sunak a los Estados Unidos en su condición de primer ministro del Reino Unido...
12 de Junio de 2023
La primera visita de Rishi Sunak a los Estados Unidos en su condición de primer ministro del Reino Unido, a mediados de la semana pasada, alcanzó un avance importante con la firma de la Declaración del Atlántico. Este texto no solo refuerza la cooperación económica bilateral en el futuro, sino que es una muestra de la reanudación de las relaciones entre las dos potencias tras el impacto sufrido durante un largo período por la política exterior del ex presidente estadounidense Donald Trump y la salida de Londres de la Unión Europea (Brexit).
En la actualidad, los Estados Unidos son el principal socio comercial del Reino Unido, al ocupar un 16,3% de las transacciones del comercio exterior, mientras el país europeo es el séptimo socio comercial del mercado norteamericano. El año pasado, el total del intercambio de bienes y servicios entre las dos naciones se aproximó a los 280 mil millones de libras esterlinas, equivalente a unos US$ 350 mil millones.
Con la Declaración del Atlántico, el Reino Unido y los EE.UU. acordaron impulsar sus relaciones comerciales en los principales campos, como ser la inteligencia artificial, las redes de telecomunicaciones 5G y 6G, informática cuántica, semiconductores y biotecnología, con el compromiso de aflojar las barreras proteccionistas, estrechar aún más los vínculos de la defensa y cooperar en materia de la protección de datos.
Adicionalmente, el contenido de la Declaración del Atlántico también menciona minimizar el impacto de la Ley de Reducción de la Inflación promulgada en agosto del año pasado por el presidente estadounidense, Joe Biden, lo que es considerado como una concesión por parte de Washington.
A través de un acuerdo en el área de minerales, los Estados Unidos permiten a los fabricantes de automóviles eléctricos británicos utilizar baterías o productos fabricados en el Reino Unido provenientes de países con los que Washington tiene acuerdos sobre minerales, y disfrutar de un crédito fiscal de 3.750 dólares por vehículo, lo que beneficia a la cadena de suministro de vehículos eléctricos de la nación europea.
Por otra parte, Biden también se comprometió a solicitar al Senado estadounidense que apruebe la consideración del Reino Unido como una “fuente nacional”, a tenor con la Ley de Adquisiciones de Defensa de Estados Unidos, lo que ayudará a promover una cooperación más rápida y eficaz entre ambos países en el rubro de la tecnología militar.
Según los analistas, la Declaración del Atlántico no es más que una serie de pequeños acuerdos económicos. Sin embargo, el simbolismo de esta declaración es importante. Sunak la elogió como “una nueva asociación económica para una nueva era y un tipo inédito”. Además, afirmó que este documento beneficiará a las empresas británicas, atendiendo las oportunidades y desafíos específicos que enfrenta el Reino Unido, tanto en el presente como en el futuro.
La Declaración del Atlántico se considera un acuerdo histórico, que coloca a Gran Bretaña en la órbita económica de la primera potencia mundial y marca el fortalecimiento de las relaciones bilaterales después de muchos altibajos. El documento fue emitido después que Gran Bretaña perdiera la esperanza de alcanzar un tratado de libre comercio integral con Estados Unidos.
Este nuevo enfoque pretende responder mejor a los desafíos económicos globales, según funcionarios británicos. Por lo general, los observadores en el Reino Unido han dado evaluaciones bastante positivas sobre dicha declaración, considerada como una victoria diplomática del Gobierno de Rishi Sunak.
Por supuesto, también hay fuertes críticas de partidos opositores en el Reino Unido, los cuales argumentan que la Declaración del Atlántico no tiene suficiente peso económico y político, ni corresponde a la especial alianza entre los dos países. Sin embargo, en un momento en que todas las políticas de la actual administración de Estados Unidos se construyen sobre la base de anteponer los intereses nacionales, el hecho de que a Gran Bretaña se le otorguen ciertos privilegios en las relaciones económicas con la nación norteamericana puede ser visto como una muestra de que Washington concede gran importancia a las relaciones con Londres en comparación con otros aliados.
Los resultados de la visita a los EE.UU. también confirmaron la declaración de Rishi Sunak al respecto de que la relación entre los dos países es una alianza indispensable, pues ambos persiguen idénticos objetivos y actúan conforme a los mismos ideales.
Los EE.UU. son el aliado más cercano de la Gran Bretaña, en tanto ambos países son los socios prioritarios del otro en todo, desde garantizar la seguridad de su gente hasta el desarrollo económico, afirmó el líder británico.
Este último también creyó que al combinar grandes recursos económicos y compartir la experiencia, las dos naciones desarrollarán sus economías, crearán empleos y garantizarán la seguridad a largo plazo de sus personas. Mientras tanto, el presidente Joe Biden afirmó que los vínculos especiales entre ambos países son realmente buenos y que no hay país más cercano a los Estados Unidos que el Reino Unido.