El caso Southern Winds se cobra a la cúpula de la Fuerza Aérea
Las derivaciones del caso de la cocaína en el avión de Southern Winds cobran un notable giro, al tomar la decisión el Presidente de remover a la cúpula de la Fuerza Aérea Argentina, responsable final de cuidar la seguridad de Ezeiza. Pero susbisten interrogantes de importancia.
21 de Julio de 2010
La plana mayor de la Fuerza Aérea Argentina fue removida hoy por el Presidente Kirchner, en una decisión ciertamente inesperada, y que está fundamentada en el hecho de que las cabezas de tal institución conocían de antemano el incidente y no se lo hicieron saber al Primer Mandatario.
El brigadier Carlos Rohde fue reemplazado por otro miembro de la fuerza con idéntico escalafón : Eduardo Schiaffino, quien estaba destinado en Comodoro Rivadavia. Es piloto de helicópteros y veterano de Malvinas.
El asunto de la droga en Southern Winds es un tema ciertamente delicado, especialmente por la atención que genera en gobiernos como el estadounidense, conocedor y seguidor de todo detalle relacionado con el narcotráfico en América Latina.
De ahí que el Gobierno Nacional se muestre esforzado en tomar decisiones clave, y que haya decidido cambios tan drásticos.
De todos modos, el problema está lejos de solucionarse con el cambio de responsables entre los militares. Subsisten interrogantes de importancia y llama la atención la forma en que medios argentinos importantes omitieron mencionar la relación más que probable de diplomáticos argentinos destacados en España, con el tráfico detectado -las maletas en cuestión estaban calificadas como "valijas diplomáticas"-.
También sería interesante conocer más acerca de los titulares de la aerolínea Southern Winds, ya que Walter Beltrame -principal acusado y además hijo del ex jefe responsable de la terminal de Ezeiza-, dijo al juez interviniente que todas sus acciones eran conocidas por quienes llevan las riendas de la compañía.
Algunos medios masivos y otros en Internet señalaban hoy que la intención del Gobierno es desplazar a la Fuerza Aérea de su comando en Ezeiza y reemplazarla por otra institución, que bien podría ser Gendarmería. Otras sospechas incluso apuntan a la intención del Gobierno Nacional a dejar la terminal a cargo de la Aduana.
La conclusión poco feliz de lo que va del incidente sería que el Gobierno bien puede estar intentando recurrir a simples "cambios de fichas", en vez de atacar de raíz el problema.
Tal es el motivo que seguramente ha impulsado a la líder del ARI, Elisa Carrió, ha realizar las fuertes declaraciones que se conocieron esta semana.
El Ojo Digital y Seprin.com