Inaceptable custodia estatal para Omar Chabán

El operativo de seguridad para proteger al empresario Omar Chabán consta de 40 efectivos policiales y tres embarcaciones, e incluye la prohibición de que otros barcos se detengan frente a la casa que ocupa en el delta del Tigre, señaló hoy el responsable del plan, el prefecto principal Martín Ruiz. Ruiz, titular de la Prefectura de San Isidro, descartó que Chabán, inculpado como principal responsable del estrago de República Cromañón, pueda desde ese lugar fugarse al Uruguay, por considerar que está ubicado "en el otro extremo de la salida al exterior". De todos modos, el abogado de Chabán, Pedro D Attoli, ya confirmó esta mañana que su defendido abandonará el lugar a la mayor brevedad ante la indignación de la dueña de la propiedad, María Rosa de Tomaselli, quien demandó rescindir el contrato de alquiler, ya que no se le informó que la locación era para el empresario, y se sintió "engañada". El prefecto, quien dijo haber recibido el martes a la tarde la orden de la Justicia de resguardar a Chabán, admitió que la presencia de éste generó "algún tipo de conmoción en una zona que es muy tranquila", en razón de la ciertamente molesta presencia periodística y de la presunción de que podrían originarse nuevos escraches por parte de familiares de víctimas de Cromañón. No obstante, dijo no haber tomado contacto con las asociaciones vecinales que rechazan la presencia de Chabán, y sobre el empresario, señaló que "lee todo el día y hace ejercicio" desde su llegada al delta del Tigre. A radio Mitre, Ruiz detalló que el operativo se desarrolla "en la vivienda y en el arroyo por el que se accede" a ella, y que consta de "40 efectivos y 3 embarcaciones" aunque señaló que esa cantidad "se puede ir adecuando según los acontecimientos". "El operativo tiene dos razones: resguardar la integridad física de Chabán, y la tranquilidad del lugar, ya que es un arroyo utilizado por chicos que van al colegio, por personas que practican remo", añadió. El responsable de la seguridad de Chabán dijo que ayer fue una jornada "tranquila", y que sólo se detectó la presencia de periodistas, al tiempo que ratificó que sólo se puede acceder por vía fluvial, ya que la casa está ubicada en una zona de islas. Asimismo, señaló que se "hacen circular" a las embarcaciones que atraviesan la casa, ubicada en un arroyo que describió como "muy angosto" ya que presenta "20 metros de ancho por 2 de profundidad". No obstante, indicó que Chabán habría autorizado "que puedan estar en el muelle" algunos de los periodistas que se acercaron a la casa. Pero el único hecho criticable no es la custodia "VIP" de que dispone Chabán, sino que también debe destacarse la irracionalidad de las familias de las víctimas de la tragedia de Cromañón y su empeño en provocar disturbios cada vez que el ex dueño de Cromañón se traslada. En su afán por perturbar el orden público, los familiares de las víctimas pasan literalmente por encima del derecho de otras personas de vivir en paz; en definitiva, no tienen la culpa de que Chabán se traslade en cercanía de sus hogares. Ya los familiares hicieron la vida imposible a una porción importante de San Martín, ahora parecen embarcados en hacer lo propio -y vale aclarar, con total impunidad- en el Tigre. Y como siempre, no sin la complicidad de la mayoría del periodismo argentino caníbal, que en su afiebrada carrera por el rating persiguen a Chabán e identifican su lugar de estadía, por supuesto acercando "el dato" a los familiares de las víctimas de Cromañón. Otra muestra de que en la Argentina, ningún tipo de convivencia es ya posible.