El Congreso de la Nación, culpable directo de la tragedia del Almirante Irízar
Recientemente, la opinión pública se vio conmovida por la tragedia del buque rompehielos Almirante Irízar, episodio que dejó numerosos heridos como resultado, a la vez que quedó severamente dañado por un incendio. Una vez más, la responsabilidad del caso se puede adjudicar a ese impresionante monumento a la corrupción que es el Congreso de la Nación, cuyos visitantes regulares aparentemente dedican la mayor parte de su tiempo, por ejemplo, a especificar fechas para "el Día Nacional de la Parrilla" -como recientemente lo publicaran algunos medios-. Mientras tanto, se dio a conocer que los legisladores nacionales, quienes usurpan mensualmente sueldos de no menos de $15 mil pesos -sin contar la parte en negro- y que cuentan en promedio con tres empleados ñoquis cada uno, "cajonearon" la asignación de presupuesto para la renovación del rompehielos Almirante Irízar. Se renueva el debate en la opinión pública al respecto de si el Congreso de la Nación realmente sirve al interés nacional.