El narcosábalo
Elocuente escrito desde la pluma de Carlos Duré, de CartaArgentina.com.ar, que refiere a los pormenores del conflicto de los pescadores del bajo Paraná y las conexiones del rubro pesquero con el narcotráfico. Material imperdible.
21 de Julio de 2010
El conflicto sabalero
Desde hace más de un año los pescadores del bajo Paraná se encuentran en conflicto con las autoridades que han venido imponiendo sucesivas vedas a la pesca del sábalo aduciendo la rápida extinción de los cardúmenes en la región que comprende la costa de la ciudad de Rosario, Santa Fe, y la zona de islas hasta el río Victoria que bordea la ciudad homónima en Estre Ríos.
Tras varios cortes del puente que une Rosario con Victoria, los pescadores lograron que la Secretaría de Pesca de Santa Fe les concediera una cuota de pesca y un pequeño subsidio de $400 por el lucro cesante.
A principios de esta semana, el diario Paralelo 32, en su edición de la ciudad de Victoria, informaba de una nueva medida que perjudica a los sabaleros: la cancelación de las exportaciones de sábalo.
En este punto el lector se pregunta si la pesca y exportación de sábalos son de tal volúmen que amenaza la existencia de la especie. Y la respuesta que le daría un habitante de la región es que se trata de un fenómeno no muy antiguo. Acaso de no más de diez años atrás.
Hasta aquí, el conflicto económico - gremial del río Paraná. Y a continuación, otro conflicto que transcurre por el enorme puente que lo cruza desde Rosario hasta Victoria, obra cuya piedra fundamental fue depositada por el ex presidente Carlos Menem en 1997.
No se trata - al menos por ahora - de la quiebra de la empresa Puentes del Litoral, concesionaria del puente y viaducto de 55 km, sino de otra clase de problema que, se verá, guarda estrecha relación con la situación someramente descripta más arriba.
El puente
El 5/5/07, el diario Paralelo 32 publicaba que el puente interprovincial es la causa de un inusitado ingreso de drogas a la provincia de Entre Ríos por la localidad de Victoria. Dice en esa edición el diario:" Victoria.- El jefe de Toxicología de la Policía Entre Ríos, Comisario Héctor Blaconá, aseguró que `la droga ingresa a Entre Ríos desde Santa Fe y Buenos Aires´ y acotó que en los últimos tiempos se reforzaron los procedimientos de detección de tráfico de estupefacientes, sobre todo en la zona del Túnel Subfluvial y en el enlace Rosario-Victoria.(...)"
El aumento del consumo de marihuana, cocaína de baja calidad y posiblemente pasta base de cocaína (Paco) que motiva un artículo de portada del diario El Observador, de la ciudad de Crespo, Entre Ríos, sugiere que se estaría ante un fenómeno propio del narcotráfico de exportación. Los residuos van quedando a todo lo largo de la ruta de los narcos proveyendo a los colaboradores locales.
¿En qué punto convergen el río y el puente, los sábalos y la cocaína?
El narcotráfico
El 31 de diciembre de 2006 la Policía Federal Argentina, PFA, detenía en el barrio de Puerto Madero, ciudad de Buenos Aires, a un colombiano nacionalizado estadounidenses, Luis Alberto Salazar Estrada, y otros cómplices por el contrabando de 255 kg (según el embajador norteamericano) o 244 kg de cocaína (según el ministro del interior argentino, Aníbal Fernández).
La noticia de la operación "Reyes Blancos" - como se lo conoció al episodio - fue relevada el 6/1/07 por el diario santafesino El Litoral. Bajo el título "Tráfico de drogas en la exportación de sábalos", dicho medio recoge una descripción del modus operandi de los narcos hecha por el segundo jefe de Drogas Peligrosas de la PFA, subcomisario Néstor Roncaglia.
Dice el policía: "La banda se dedicaba a exportar grandes cantidades de sábalo congelado desde las provincias de Entre Ríos y Santa Fe y aprovechaba esa actividad para realizar los viajes a Colombia -donde se consume el sábalo argentino-, para cometer el tráfico de la droga",
El sábalo mula
Ahora el lector se preguntará cómo se puede exportar un sábalo sin cocaína y cocaína sin sábalo y que ambas operaciones configuren un mismo delito. Aparentemente, y según las mismas fuentes, el cargamento de pescado era enviado a Colombia con la documentación de exportación incompleta o defectuosa. Las autoridades aduaneras colombianas rechazaban el cargamento. Durante la espera se introducía la cocaína mezclada en harina de pescado. Luego, los aduaneros colombianos devolvían a la Argentina los sábalos sin revisarlos. Desde Colombia hasta el bajo Paraná; hasta Buenos Aires, Rosario y Victoria volvían los sábalos narcos.
Un episodio elocuente incita aun más la suspicacia de esta carta. Mientras en las panas confluían las protestas de los sabaleros y el caso de narcotráfico "Reyes Blancos", el diario de la ciudad de Santa Fe, El Litoral, publicaba en su edición del 18/1/07 que un individuo había dejado 3 granadas FMK2 en tandem en la puerta de la Subsecretaría de Pesca de la provincia.
El diario dice: "Las actuaciones sumarias pasaron de la policía provincial al ámbito federal, aun cuando el presunto blanco de la agresión pudo haber sido la Subsecretaría de Pesca, organismo provincial involucrado en la conflictiva adjudicación de subsidios para los trabajadores del río afectados por la veda pesquera".
La única razón por la que la PFA asumiera la investigación en lugar de la policía santafesina puede ser la caracterización del hecho como un acto terrorista, o como un mensaje de los narcos contra el cierre de la exportación de sábalos. Es difícil creer que los empobrecidos pescadores del Paraná estén detrás del atentado. Es menos difícil creerlo de los frigoríficos exportadores.
Por Carlos M. Duré de www.cartaargentina.com.ar para El Ojo Digital Política