Más sobre la mafia de Omar Viviani, el empresario kirchnerista de los taxis
Interesante informe publicado por Héctor Santos, del portal de noticias Urgente24.com de Edgar Mainhard, y que refiere a la operativa de la mafia de los taxis en la Capital Federal, por supuesto comandada por el kirchnerista Omar Viviani. Detrás de las protestas del sindicato de "tacheros" no solo existe intencionalidad política : hay una corporación mafiosa.
Una insólita medida de fuerza intentó capturar la atención de los porteños al colapsar el tránsito en el centro de la Ciudad. La medida la ordenó Omar Viviani, sindicalista de los peones de taxímetros, quien secunda a Hugo Moyano en la CGT y acepta el controvertido liderazgo de Alberto Fernández en el PJ metropolitano.
En rechazo a la propuesta de Mauricio Macri de implementar carriles exclusivos para colectivos y taxis con pasajeros, para agilizar el tránsito de la capital federal, el Sindicato de Peones de Taxis de la Ciudad de Buenos Aires inició su plan de movilizaciones que concluirá en un paro general. El plan de lucha fue dispuesto por el sindicalista y empresario kirchnerista, Omar Viviani, quien a la vez lanzó fuertes críticas en contra del Jefe de Gobierno porteño, Mauricio Macri, cuya gestión puede ser muy criticable pero no por los argumentos expresados por Viviani.
Ayer, los taxistas se concentraron en 3 puntos de la Ciudad -9 de Julio y Belgrano, Corrientes y Cerrito y 9 de Julio y Lavalle- y se movilizaron hacia la sede del Gobierno porteño, donde Omar Viviani dijo: "Es un día de fiesta y lucha porque la totalidad del gremio de taxistas esta reunido en contra de quienes quieren llevarnos de rodillas y de lucha en contra las políticas de este señor jefe de Gobierno". "Mauricio Macri es un pibito que quiere engañarnos con sus propuestas". "A ver si algún funcionario de cuarta se cree que los taxistas somos como los hijos que nos llevan de las orejas, nosotros tenemos el carácter suficientes para hacer esta y todas las medidas necesarias hasta que el gobierno escuche la voz de los trabajadores". "Los taxistas, hombres y mujeres, sabemos lo que es tener diez o doce horas con la espalda pegada a un asiento para prestar servicios y mantener a nuestra familias". "No estamos dispuestos a entregar ni un solo centímetro de la calle, es nuestro hábitat de trabajo, hoy empieza el plan de lucha y el día miércoles 25 de junio iremos a un paro general de taxistas, no tiene que andar ni un tacho por Buenos Aires".
Mauricio Macri había anunciado el 5 de junio medidas tendientes a agilizar el tránsito en la ciudad, pero los taxistas no quieren ser excluidos de esos carriles especiales cuando sus vehículos viajen sin pasajeros. El kirchnerista sindicalista empresario se desprende de sus palabras ganó en violencia y agresión al estar tan cerca de su amado líder, el presidente real de la Argentina, obviamente, nos referimos a Néstor Kichner.
Quién es Omar Viviani
Omar Viviani sería propietario -vía testaferros, claro está- de más de 200 unidades de taxis que le son alquilados diariamente a peones jornaleros. Omar Viviani es un férreo kirchnerista, a la vez que es un hombre de estrecha relación con del enriquecido gremialista empresario Hugo Moyano, Secretario General de la CGT de los trabajadores argentinos. Por lo tanto, Viviani dice defender a los peones de taxis, pero cada vez que se aumenta la tarifa de los mismos, los perjudicados son los mismos peones porque los propietarios le suben el precio del alquiler. Viviani piensa como empresario ? con su flota de taxis propia ? y perjudica a los peones. Entre los taxistas porteños se sabe que las paradas de taxis tienen un dueño.
Y ese propietario sería Omar Viviani. Cottrolar una parada de taxis resulta un negocio muy rentable: Carece del costo fijo de una licencia de radio llamada. No paga el canon que el alquiler de una unidad deben pagar los peones. Tampoco abona algún alquiler a la Ciudad por la explotación de un negocio que consiste en la ocupación de un espacio público. Una vez que Viviani y su patota logra apoderarse de una parada de taxis, según las fuentes consultadas, el Sindicato de Peones de Taxis comienza a cobrar un peaje no oficial, variable según la práctica convenida, habitualmente, con quien les asegura la parada.
Cada una de las paradas de taxis se encuentra gestionada por un delegado del sindicato. Ellos son lo que controlan el derecho de admisión y la recaudación diaria. Analicemos el caso del Hipódromo de Palermo, donde hay 4.000 máquinas tragamonedas en funcionamiento durante las 24 horas del día, el Sindicato cobra $ 0,50 por viaje. En el caso del casino flotante, en la Costanera Sur, también se aplica el mismo precio por viaje. Ambas paradas convierte a la empresa kirchnerista del juego en un decidido protector de Viviani, quien tiene sus argumentos para justificarse: la parada consigue que los taxistas sean identificables.
Lo mismo se logra con cualquier sistema de radiotaxi, pero para Viviani esto resulta sagrado. Es parte de sus frondosos ingresos. En ambos lugares públicos hay empresas de radiotaxi, que le cobran una cuota semanal por el servicio a los chóferes.
Hay taxistas que no utilizan el servicio de esa compañía de radiotaxi pero, de todos modos, recibieron el reclamo bajo amenaza de expulsión, de abonar $ 35 por semana. Más paradas controladas por Viviani son la Terminal de Ómnibus de Retiro y la estación Constitución. En estas se cobra un canon fijo diario que oscila entre $ 5 y $ 8. No hemos podido establecer si la parada del Aeroparque Metropolitano Jorge Newbery también pertenece a este amigo de Moyano y Néstor Kirchner.
Viviani, el sindicalista amigo de Daniel Hadad
En épocas en que Daniel Hadad no sabía cómo hacer para levantar la audiencia de Radio 10, según cuentan fuentes bien informadas, el dueño de diferentes medios de comunicación concurrió a ver al entonces ministro de Carlos Menem, Carlos Vladimiro Corach. Según nos explican las mimas fuentes, Corach no dudó en presentarle a Omar Viviani para encontrar con él la solución a su búsqueda. Inventaron una campaña radial desde los micrófonos de la radio de Uriarte y Nicaragua que se basara en irritar a los muchachos del sindicato.
Hubo quienes, por entonces, desde la radio llegaron a deslizar la posibilidad de que Omar Viviani estuviese vinculado con el narcotráfico. A tanto llegó el montaje que los taxistas fueron a tratar de quemar la radio. Pero, como estaba todo arreglado la solución se consiguió rápidamente. No obstante para que algo pareciera verdadero, esa misma noche se incendió un móvil de Radio 10, para que todo esto apareciera en los medios de comunicación.
Desde allí en más, el idilio de Viviani -quien, se dice, ingresó suculenta suma de dinero por prestarse a ser el principal actor de aquel circo- y Daniel Hadad es indestructible. Es de suponer que no es otra cortina de humo del propio gobierno K, como tantas otras que ha bajado desde mayo de 2003.