La paz en Córdoba es solo aparente
La sarta de estupideces y palabras huecas proferidas por la Presidenta en la ONU y el sainete de Antonini Wilson en Miami, han quitado de las páginas de los diarios al "bolonqui" cordobés. Pero, detrás de este circunstancial silencio mediático, se esconden internas salvajes y guerras soterradas que no tardarán en aparecer en las letras de molde.
21 de Julio de 2010
Coexisten en la política de la Docta dos conflictos, que más temprano que tarde, entrarán en punto de ebullición. Son los protagonizados por los principales púgiles de la provincia mediterránea: De la Sota vs. Schiaretti y Juez vs. Giacomino. Aunque suceden en espacios políticos aparentemente encontrados, tienen un punto en común: en ambos casos, el combate obedece a contrapuntos de intereses entre los gladiadores.
Expresado de manera clara. De la Sota quiere ser Presidente y Schiaretti tiene que garantizar la gobernabilidad de la Provincia, para intentar llegar, aunque sea hincado, al 2011. Por ende, dado que Córdoba es la geografía más anti K, para conseguir votos hay que estar metido dentro de una oposición furiosa contra el (des) gobierno del matrimonio morganático. Y esa es la posición del ex mandamás cordobés. Necesita recuperar presencia, asestando todos los golpes necesarios para diferenciarse netamente del gobierno nacional. Pero, hete ahí, que Schiaretti necesita "oxígeno" en cantidades industriales para sufragar las necesidades financieras del exhausto tesoro. Agujero negro presupuestario, que, precisamente, proviene de los desaguisados de gestión de su antecesor. Léase, José Manuel De la Sota (a) "Gallego". Consecuentemente, del único lado del que pueden provenir las "efectividades conducentes", para equilibrar las cuentas públicas, es de la Nación. Para que ello ocurra, es conditio sine e qua non alinearse con los K y hacer todas las reverencias y genuflexiones necesarias. Esto lleva a un escenario en el PJ cordobés extremadamente duro: si se está con la Tilinga, los votos se esfuman; si el camino es una guerra santa contra los K, la financiación se esfuma y las finanzas provinciales se vienen abajo más rápido que Lehman Brothers.
Un similar panorama se vive en la principal oposición al PJ local. Por un lado, Luis Juez ha resuelto liderar una cruzada papal contra los Kirchner. Producto de dos cuestiones: los K, a través de De Vido y Jaime, armaron el tinglado que posibilitó el escandaloso fraude electoral del año próximo pasado y que le birló al ex intendente un triunfo neto en las urnas; la otra razón, es la antes expuesta, nadie puede crecer políticamente en Córdoba defendiendo lo indefendible, el desastre K.
Por su parte, el otro fighter de la Coalición Cívica es el actual alcalde de la ciudad de Córdoba, Daniel Giacomino. Que tiene problemas similares al gobernador: la caja le alcanza apenas para pagar los sueldos. En buen romance, si quiere inaugurar aunque sea un cordón cuneta, necesita de las "obras" del tandem De Vido ? Jaime. No interesa mayormente que el "paquete" implique negociados escandalosos. Con tal de "hacer algo", podemos construir un subte en la Docta cuyo costo sea equiparable al Metro parisino.
Queda claro que los intereses de Juez y Giacomino son igualmente contradictorios in extremis. Para colmo, el "Giaco", que como político de seguro que se llevará el monumento al "nabo", para diferenciarse netamente de Juez, eligió auto proclamarse, urbi et orbi, en la Casa Rosada, como un "soldado de Cristina". Huelga comentar que sus convecinos, furiosos anti K, lo putearon en arameo y mandarín medioeval.
Concluyendo. Por estas horas, Schiaretti no le dirige la palabra a De la Sota. Por su parte, Juez y Giacomino protagonizaron un divorcio político mediático, solamente comparable con el de Pampita y el confeso cornudo Barrantes. En síntesis, todos los gladiadores se encuentran afilando espadas y tridentes. La lucha romana se desencadenará antes de fin de año. Detalle final: será cruenta. Extremadamente cruenta.
Por Severo I. Turro, para El Ojo Digital Política.
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Por Severo I. Turro, para El Ojo Digital Política