POLITICA: POR FRANCISCO MONTESANO, TOTALNEWS.COM.AR

Escasez de originalidad y abundancia de traiciones en la campaña para las legislativas del 29 de junio de 2009

Néstor Carlos Kirchner destruye -con apasionante y digno esmero de mejores causas (tal vez las que prometió para la campaña 2003)- todas o cualquiera de las estrategias de campaña esbozada por sus propios asesores.

21 de Julio de 2010
Aquel que prometió convertir a la Argentina en un país normal, hoy nos anuncia el caos, y su fiel esposa patrocinó el discurso de Kirchner, quien dijo que el país puede "explotar" si el oficialismo pierde las elecciones y para aumentar el dramatismo asevero: "Está en juego la estabilidad democrática". ¿Es que acaso anuncia la propia renuncia o un abierto pedido de asilo político? En una nota que escribí cuando ambos mandatarios adornaron con excusas de tipo institucional el adelantamiento de las elecciones, imaginé una situación en la cual tendrían que gobernar sin parlamento adicto y mis conclusiones no se diferencian mucho de lo que hoy plantea la mismísma pareja. Como un reloj que les marca el momento en que detonará la bomba, los Kirchner están acelerando su salida, con el objetivo de evitar la explosión. Lo incongruente es que todas las teorías conspirativas provienen de las propias filas. La oposición plantea, en público y en off, la necesidad que en la elecciones del 2011 sea el actual mandatario quien entregue la banda presidencial. Conocen de su incapacidad en constituirse como opción efectiva y la necesidad de aunar criterios en estos dos largos años que restan hasta octubre de 2011. Seis años han transcurrido de ejercicio de poder K, y ahora nos señalan que una ocasional derrota en las legislativas promediando su segundo mandato puede situar al país al borde del abismo. Tal aseveración no solo es temeraria e imprudente, sino que carece de la sensatez tantas veces requerida de parte del oficialismo. La tensión social que imponen a la ciudadanía solo se compara con los discursos de los más crueles dictadores de la historia, quienes se autoencumbraban como los protectores de la Nación pues del otro lado se encontraba, amenazante, la anarquía. Las preguntas infaltables en un hipotético reportaje a Néstor K serían : ¿Restauró Ud. las instituciones, recompuso la débil economía que recibió, organizó el sistema de partidos políticos, etc.? En definitiva, todo lo que prometió. La auténtica respuesta sería, "muy poco o nada", algo ciertamente difícil de escuchar de labios del entrevistado. El final de esta comedia dramática ya no lo marcan los tiempos sino los abandonos. Pocos secuaces quedan revoloteando en el comando presidencial. Algunos están aún pero sin descuidar hacia dónde pegar el salto. Hace tiempo que resulta inútil en política hablar de lealtades e incluso de ideologías, mal que se agravó por la soberbia y el autoritarismo del matrimonio Kirchner. Hoy, en el peronismo, el ser o no ser es solo una razón de beneficio más que una ideología. Desde el peronismo "ortodoxo" hasta el "disidente", en esta elección se presenta varios candidatos de la misma ideología, una rareza solo posible en la Argentina kirchnerista. Pero la falta de originalidad de Kirchner hizo que repitiera la teoría del supuesto caos, al igual que en otras oportunidades nos asustaron con el fin de la compra en cuotas, un artilugio bastante menos dramático. Al igual que el recurso de utilizar figuras de la farándula o el deporte, solo son partes de la misma tragedia, esto es, la decadencia del sistema de partidos, que el Jefe del PJ alentó y promovió en estos años en su beneficio. Esta nueva fauna política, que solo intimó en los alrededores de los partidos, ¿acaso estará en condiciones de integrar el Parlamento? ¿No será tiempo de exigirle a los candidatos alguna idea? Y me refiero no solamente a nombres populares : en definitiva, su obligación de sancionar leyes no es menor. Las amenazas de abandonar las filas del gobierno y las concretas son hoy noticia frecuente en los medios. Intendentes como los de La Plata, Mar del Plata y Bahía Blanca han vuelto a rechazar esta semana una fuerte presión de altas figuras del oficialismo para que encabecen las listas de legisladores provinciales, lo que en la práctica se entiende como "candidatura testimonial". En idéntica sintonía de discrepancia, el piquetero oficialista D Elía amenazó con abandonar la tropa, indignado por no tener lugar en las listas de candidatos y acusó al ex presidente de "socializar las pérdidas y jamás hacer lo propio con los beneficios". El resultado de las elecciones es inevitable : el país ya tiene una gran cantidad de conflictos sin resolver. Tal vez el oficialismo nos anuncia el caos del caos, según la infortunada mirada del ex presidente. Por Francisco Montesano, para El Ojo Digital Política. http://blogs.clarin.com/conflictos-y-dilemas/posts
Por Francisco Montesano, para El Ojo Digital Política