Carta abierta al Gobernador de la Provincia de Buenos Aires, Daniel Scioli
Señor Gobernador de la Provincia de Buenos Aires, Sr. Daniel Scioli; Usted nos impuso -en 2010- un candidato a Intendente para este Distrito, elegido a partir de la estrecha amistad que con él lo une. Oportunamente, el peronismo pinamarense rechazó cualquier tipo de alianza que pretendía realizar con el Partido Vecinalista, encabezado por el Dr. Blas Antonio Altieri, de cara a las elecciones del 28 de marzo de 2010, con miras al reemplazo del destituído intendente, Roberto Porretti. En tal evento, se estrenó un polémico sistema de voto electrónico.
No obstante, Ud. decidió brindarle apoyo al candidato que propuso para Pinamar, sin llamar a consenso entre las voces peronistas locales. En otro orden de temas, ese mismo candidato elegido por Usted recibió -el mismo dia de las elecciones, 28 de marzo de 2010- una ambulancia que se encontraba convenientemente escondida, en una clara operación de demagogia y clientelismo electoral.
Durante el primer mes luego de su asunción, su "delfín" se jactó de tener su apoyo desde la Gobernación, mencionando los beneficios que Usted se ocuparía de otorgar, entre ellos, una partida de 15 millones de pesos para la construccion de un nuevo Polideportivo, un Anfiteatro, una Universidad, y otras tantas "cortinas de humo". No en vano, el eslogan utilizado por su amigo pinamarense era "La experiencia hace la diferencia".
Sin lugar a dudas, aquella experiencia ha sido bien explotada: las obras bajo mención se encuentran hoy judicializadas en su mayoría. Nadie ha visto las reformas en el hospital local -5 millones de pesos, equivalentes a US$ 4 mil el metro cuadrado-; una fuente situada en el cruce entre Avenida Bunge y Libertador -ahora llamada "Bidet" por los ciudadnos pinamarenses, y que costara $350.000-; un tomógrafo, para cuyo uso el usuario local debe abonar $566...
Las obras relativas a los ingresos a las localidades de Ostende y Valeria del Mar -que fueran gestionadas por el interinato de Rafael De Vito- se encuentran paralizadas desde hace cinco meses, con los perjuicios derivados del caso. Su candidato puesto "a dedo" pretendió cobrar a los frentistas dicha obra, que dio inicio con aportes de la Nación, aunque no contemplaba costo alguno para los mismos.
Su "delfín" otorgó -dos dias antes del comienzo de las sesiones del Honorable Concejo Deliberante- cinco licencias de taxis por "decreto", al mejor estilo de los DNU del Gobierno Nacional. Los trabajos en la Avenida Esparza también se encuentran paralizados, a pesar de que durante la gestión De Vito, los fondos para su culminación habían sido asignados. Pues bien, ¿qué sucedió con los fondos? Los nuevos equipos y camiones adquiridos vía leasing durante el interinato de Rafael De Vito se encuentran hoy rotulados con la leyenda "Administración Altieri". De un total de diecisiete cargos directivos, el Municipio pasó a tener ahora más de cincuenta, cuyos salarios son pagados con el esfuerzo de los Pinamarenses. Y no nos olvidemos del cruel aumento de Tasas Municipales: el incremento de esos impuestos y contribuciones ahora se ve en el presupuesto municipal, que percibirá 123 millones de pesos en lugar de los 83 millones que recibía antes de retocarse los índices. Todos lo pagamos, pero nunca retorna en la forma de servicios. El dato no es menor, pues hablamos de un 200% de aumento en las Tasas Municipales.
Recientemente, se destaparon ciertos episodios deleznables en el programa de televisión CQC: allí se comprobó que algunas viviendas destinadas a personas de bajos recursos se encontraban en poder de hijas y parientes del Intendente Blas Altieri (su "delfín", Señor Gobernador Daniel Scioli, para que quede bien claro). Lo increíble es que solo se construyeron 24 viviendas, siendo que el presupuesto contemplaba la entrega de 48, exactamente el doble. Por otra parte, el plan maestro habitacional tenía prevista inicialmente la construcción de 150 viviendas, aproximadamente.
¿Sabía Ud., Señor Gobernador Scioli, que Pinamar no tiene completo ni el 15% de sus cloacas? Recuerde que viven, en este partido, un total de 45 mil vecinos. Los residuos cloacales son descartados a cielo abierto, en piletones y sobre la mismísima arena. Se contaminan las napas y se favorece la aparición de focos infecciosos. A lo largo de diecisiete años, su "amigo" o "delfín" jamás se preocupó por desarrollar la infraestructura necesaria para encarar este problema. Pero sí se movilizó para bloquear la ampliación y el desarrollo del frente marítimo, que estaba presto para ejecutarse con capitales privados -me refiero a la ordenanza 3754-, y que hubiera significado una mejora importante en la calidad de vida de los vecinos. Este emprendimiento hubiese generado numerosas fuentes de trabajo, al tiempo que hubiera brindado óptimos servicios para el turismo y los visitantes. El proyecto incluso preveía contemplar normas ambientales.
Bien vale la pena recordar que la totalidad de los materiales necesarios para la obra pública son adquiridos a la empresa familiar del Intendente Altieri: el nombre de la firma es Itar S.A.
En efecto, también preocupa la artificial generación de conflictos, tales como el sucedido el 12 de abril a partir de la remoción de Rosana Di Pascuale. En aquella ocasión, empleados municipales participaron de un escándalo de proporciones, y es de público conocimiento que son utilizados regularmente para trabajos en campaña politica y escrache de opositores al "altierismo".
Los pinamarenses también gustarían conocer el patrimonio del Señor Intendente Altieri, especialmente su declaración de bienes personales. Aún cuando él, en persona, se condone deudas propias, como ser el caso de la multa a la tala de árboles para su edificio de Avenida Bunge, tal como ha sido denunciado ante la Justicia por lavado de dinero.
Por otra parte, está el caso de las más de 200 carpetas de empleados municipales con licencia psiquíatrica -¿será persecución política?-. No se entiende ni justifica la existencia de semejante cantidad de empleados supuestamente desequilibrados.
En el año 1999, se aprobó un plan de 62 viviendas, que aún se encuentran sin completar. Muchas de ellas fueron usurpadas por "socios" o "conocidos" del Intendente Blas Altieri. ¿Qué sucedió con el déficit habitacional? ¿Estará pensado solamente para los amigos, parientes y cercanos al Señor Intendente?
Señor Gobernador Daniel Scioli: sepa Usted que su figura politica no exhibirán el mejor de los futuros, en virtud de encontrarse asociado con una figura cuestionada por la mayoría del pueblo de Pinamar, y comprometida ante la justicia. Tenemos, por aquí, gente idónea. Entre todos, reclamamos algo tan básico como fundamental, esto es, que se nos permita elegir a nuestras propias autoridades sin intromisiones.
Si Usted se decide a intervenir políticamente en Pinamar, decidiendo "a dedo" un sucesor tras otro, la ciudadanía se lo demandará. Téngalo por seguro.