Todos quieren "ser", pero nadie quiere "aparecer"

Pareciera que nadie quiere ser; pero todos mienten. En rigor, son muchos los que quieren probarse el traje pero no se animan a reconocerlo públicamente. Hay excusas por doquier: que es "temprano", que "falta mucho tiempo aún", que tienen que administrar y no quieren que les retaceen los recursos, etcétera.

En esa inteligencia, optan por no asomar la cabeza, privilegian y se jactan de poder pasar desapercibidos y -en todo caso- no pierden oportunidad de manifestar frente a cuanto micrófono se le ponga enfrente su desinterés personal por lo que viene. Mientras, hacen una falsa apología de lo positiva que sería para el país una nueva edición de la Administración actual.

Claro que esto es de la puerta para afuera; hacia adentro, la historia es bien distinta. Todos se quejan, todos quieren ser, pero nadie quiere aparecer. Se exige del otro que dé ese primer paso, pero nadie quiere ser quién lo dé primero. En síntesis, el cuento de la buena pipa; o el "¿Yo, señor? No, señor...".

En simultáneo -y tal como pasa en la fábula de la rana-, seguimos dentro de la olla a fuego lento. El agua ya está tibia pero todavía nadie pareciera advertirlo.

Las encuestas reflejan a diario (y cada vez con más regularidad) el deterioro de la imagen presidencial y de su gestión. De acuerdo a un estudio reciente de Management & Fit, publicada por Diario Perfil, (http://www.perfil.com/contenidos/2012/08/08/noticia_0010.html), el nivel de desaprobación que exhibe la gestión del Gobierno Nacional alcanzó el 64,5% entre los consultados.

El trabajo revela que, hace exactamente un año, el nivel de desaprobación de la gestión kirchnerista era mucho menor, alcanzando el 49,2%. Lo propio sucede con la imagen positiva de la Presidente Cristina Elisabet Fernández Wilhelm de Kirchner quien, durante julio de 2011, contaba con un 39,2%, en tanto que en julio de 2012 cayó al 26%. Es decir, el deterioro y la desaprobación a su gestión son ya notorios y manifiestos.

No obstante, puertas adentro del peronismo son muy pocos los que se atreven a reconocer y enfrentar esta realidad, colocándose en situación de opción y alternativa. Lo que, por cierto, pone en evidencia la crisis de liderazgo auténtico que afecta a esta fuerza política.

Como si nos encontráramos bajo un “estado de sitio” de facto, las reuniones se realizan a escondidas, sin dejarlas trascender. Nadie quiere ser visto. Cuando alguna de ellas se “detecta”, es comentada por Cadena Nacional como si se tratase de una conspiración de “golpistas”. Peor aún, pareciera ser que, cuando estas no son alcanzadas por el "radar", de todos modos se les hace saber a los actores que se tiene conocimiento de la reunión y de lo conversado (ver http://www.clarin.com/opinion/intendente-espiado-reflejo-politico-Provincia_0_749925098.html).

En el sector privado, tiene lugar un fenómeno muy similar. Todo es queja, pero nadie se decide a tirar la primera piedra. Nuevamente, las excusas asoman por doquier. El que habla o dice lo que piensa es un enemigo o un golpista, y como tal, le cabe una sanción. (Verbigracia: http://www.lavoz.com.ar/noticias/politica/camara-inmobiliaria-preocupada-inhabilitacion-toselli). Finalmente, todos terminan yendo a recorrer los parajes de Angola, o van a desayunar en La Salada (http://noticias.terra.com.ar/empresarios-que-viajaron-a-angola-y-san-pablo-visitaron-la-salada-invitados-por-moreno,ca5368931e9b7310VgnVCM4000009bcceb0aRCRD.html).

Lo cierto es que, si se consienten las conductas y no se confrontan estas políticas de manera clara y manifiesta, cuando sea hora de "colarse" en la discusión, ya será demasiado tarde: el agua alcanzará el punto de ebullición.

Es como si hubiéramos olvidado que vivimos en democracia o -lo que es mucho peor- pareciera que nos lo han hecho olvidar.

¿Acaso algún renombrado personaje de la industria hubiera pensado -en ocasión de emitir su voto a favor de la Presidente-, por ejemplo, que hoy se vería imposibilitado de adquirir dólares libremente ni siquiera para viajar, ni para desarrollar su negocio, ni para importar o exportar? ¿Quién hubiera pensado que se le prohibiría la libre elección de la moneda en la que deseaba vender su propiedad? ¿Qué ama de casa hubiera soñado que para efectuar una simple compra en el supermercado debería dar todos sus datos e identificarse ante la AFIP para justificar tamaña adquisición?

¿Quién hubiera siquiera imaginado el índice de inflación que hoy golpea al país, o la sanción que se aplicaría a aquellas consultoras que osaran contradecir los índices del INDEC que disfrazan esas mediciones? ¿Quién hubiera pensado en enero pasado que se quitarían los subsidios a los servicios, con el aumento que ello implica para las economías familiares? (http://www.pagina12.com.ar/diario/economia/2-184579-2012-01-02.html)

Y hay más preguntas. ¿Quién hubiera pensado que a alguien en Angola le pudiera interesar la pelea del Gobierno Nacional con Clarín, como para llevar regalos y merchandising alusivos a esa pelea a Africa, en lugar de promocionar las bondades del país? (http://www.clarin.com/politica/Reparten-Clarin-Miente-descalzos-Angola_0_702529934.html) ¿Quién hubiera pensado que los subterráneos de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires continuarían, al día de hoy, sin dueño, o -peor todavía- que nadie querría hacerse cargo de ellos, mientras la gente sufre días y días de paro y angustia, y el transporte se encuentra colapsado? ¿Quién hubiera pensado que, en lugar de mejorar e invertir en un mejor transporte público, los trenes serían cada día más peligrosos? (http://www.lanacion.com.ar/1497375-descarrilo-otro-tren-del-mitre)

¿Quién hubiera creído pocos meses atrás que desde el gobierno se fomentaría la salida de delincuentes peligrosos para concurrir a actos políticos, o que se festejaría la toma de colegios por parte de los alumnos? (http://www.diariohoy.net/accion-verNota-id-201068 - http://www.infobae.com/notas/658241-Alumnos-del-Carlos-Pellegrini-tomaron-el-colegio-para-exigir-el-control-del-bar.html) ¿Era factible imaginar que hoy volvería a reeditarse la fatigante discusión entre inseguridad y sensación de inseguridad? (http://www.infobae.com/notas/662621-Garre-afirmo-que-la-sensacion-de-inseguridad-es-mayor-que-la-tasa-delictiva.html)

¿Era posible imaginar, luego del viejo disgusto entre Julio Cobos y la Presidente de la Nación, que Gabriel Mariotto le daría un disgusto similar a su Gobernador? (http://www.perfil.com/contenidos/2012/07/17/noticia_0008.html) o que la Presidente confrontaría con el propio Daniel Scioli? (http://www.cronista.com/economiapolitica/Tras-las-peleas-con-Scioli-y-Moyano-cayo-la-imagen-del-Gobierno-20120801-0035.html). ¿Hubiésemos previsto que el Gobierno Nacional volvería a enfrentarse con Macri? (http://www.lanacion.com.ar/1466353-en-plena-crisis-por-ypf-el-gobierno-se-pelea-con-macri-por-el-subte). ¿Hubiese creído alguien que la Casa Rosada colisionaría tan violentamente con España o con el Uruguay, históricos amigos de la Argentina en el concierto internacional?

Con toda probabilidad, sería difícil imaginar -apenas transcurridas las elecciones presidenciales de octubre- que, poco tiempo después, el Vicepresidente de la Nación quedaría bajo el fuego de una serie de graves denuncias hoy en trámite por ante los Tribunales (http://www.cronista.com/economiapolitica/Avanza-la-causa-judicial-y-piden-la-declaracion-patrimonial-de-Boudou-20120808-0096.html) o que el propio Boudou efectuaría, a su vez, graves denuncias contra el Procurador General de la Nación Esteban Righi -hoy ya renunciado-, o contra el Presidente de la Bolsa de Comercio Adelmo Gabbi. Ambas denuncias, dicho sea de paso, preparadas para ser archivadas (http://www.cronista.com/economiapolitica/Archivaran-la-causa-contra-Righi-y-Gabbi-20120807-0070.html).

Tampoco hubiese sido fácil conjeturar en otros tiempos, que Hebe de Bonafini y Sergio Schoklender -otrora amigos entrañables y socios- llenarían portadas enteras con enfrentamientos y acusaciones recíprocas en torno de lo sucedido con la fundación Sueños Compartidos (http://www.lanacion.com.ar/1379881-bonafini-y-schoklender-en-una-fiesta-de-disfraces).

Seguramente, muy pocos hubiéramos podido colegir o adivinar (hace no tanto tiempo atrás) la realidad que hoy nos toca atravesar. Especialmente porque muchas de las políticas que hoy se llevan adelante son justamente el reverso de las políticas alentadas por el ex presidente Néstor Carlos Kirchner. De tal suerte que no caben ya dudas frente a que la coyuntura política ha variado; el escenario es otro, y -conforme se desprende de las distintas encuestas de opinión que van publicándose-, la ciudadanía no está contenta, ni mucho menos apoya muchas de las medidas que está llevando adelante la presente Administración.

Sin embargo, y pese al descontento popular, no aparecen los líderes que pretendan encabezar una opción de cambio para futuro. Y es necesario que aparezcan de una vez: son indispensables para garantizar la democracia y acaso blindarla contra las ensoñaciones de eternidad, propagados por algunos sectores trasnochados que no comprenden la esencia de la democracia.

Acaso puede tenerse la sensación de que los únicos que no se han percatado aún de esta nueva realidad política son los dirigentes que quieren ser, pero que no quieren aparecer.

Es deseable que, para el momento en que adviertan que el tiempo es hoy y ahora, la rana no se encuentre ya totalmente cocinada...

Dr. Roberto Porcel -Abogado, experto en legislación sobre falsificación marcaria- | El Ojo Digital Política
Twitter: http://twitter.com/DrRobertoJ