EE.UU.: el abismo fiscal... y todo lo que implica
Hay una cuestión en la mente de todos en Washington: el “abismo fiscal”.
Hay una cuestión en la mente de todos en Washington: el “abismo fiscal”.
Nos estamos quedando sin tiempo para evitar que nos alcancen las masivas subas de impuestos del 1 de enero, así como las amplias reducciones presupuestarias que está previsto que lleguen al mismo tiempo, de modo que la economía se está preparando para otra tormenta.
Hoy, cinco organizaciones de política pública, incluída la Fundación Heritage, están presentando sus planes para primero clavar los frenos antes de caer por el abismo y luego cambiar de dirección para poder atajar nuestro desafío del gasto masivo mientras el gobierno federal se acerca cada vez más al límite de la deuda.
En 2011, la Fundación Peter G. Peterson lanzó la Iniciativa para las Soluciones, concediendo becas a seis organizaciones que abarcaban todo el espectro ideológico de modo que pudieran desarrollar planes para una sostenibilidad del país a largo plazo. Con el abismo fiscal en ciernes, la II Iniciativa para las Soluciones Fiscales de la Fundación Peterson pidió actualizaciones que abordaran la siguiente cuestión: “Tras las elecciones de 2012: El Abismo Fiscal y Más Allá”.
Los participantes en este segundo proyecto son la Fundación Heritage, el conservador Foro de Acción Americana, el Centro de Política Independiente y los progresistas Centro para el Progreso Americano y el Instituto de Política Económica.
Estas organizaciones están debatiendo sus ideas en un evento transmitido por la Fundación Peterson a través de Internet.
Para afrontar este reto, los expertos de la Fundación Heritage actualizaron nuestro plan Para Salvar el Sueño Americano con el objetivo de abordar el abismo fiscal y posteriormente poner freno al gasto. El nuestro es un amplio plan de reforma fiscal que favorece el crecimiento económico y genera más recaudación. También supone una extensa reestructuración de los programas de derechos a beneficios con el fin de proporcionar una seguridad económica real a las personas mayores a la vez que se hacen económicamente viables dichos programas.
El plan balancea el presupuesto federal en un plazo de diez años (sin subir los impuestos) y estabiliza la deuda para luego reducirla. El plan de la Fundación Heritage centra la asistencia gubernamental en aquellos que de verdad la necesitan, con la garantía de que ningún americano tendría que vivir en la pobreza. También empezaría a reducir el gobierno hasta sus poderes autorizados por la Constitución y haría de la financiación de la defensa una prioridad fundamental.
De los cinco planes, el de la Fundación Heritage es el que más reduciría el gasto del gobierno y el que más reduciría la deuda con garantía pública de Estados Unidos, además por un margen considerable.
Ahora mismo, esta medida de la deuda se sitúa en el 73% del producto interior bruto (PIB). En otras palabras, el 73% de la economía americana. El plan de la Fundación Heritage reduciría la deuda con garantía pública hasta el 28% del PIB para 2037, mientras que el siguiente plan que más la reduciría, el del Foro de Acción Americana, llega hasta el 40.1% del PIB.
Aunque el proyecto de la Fundación Peterson incluye organizaciones de todo el espectro ideológico, hay algunas áreas de consenso. Por ejemplo, “todos los grupos están de acuerdo en que se debería reducir el actual nivel subsidios agrarios concedidos por el gobierno federal”. Todos los grupos reducirían de forma espectacular la trayectoria actual del gasto, aunque tomaría caminos distintos para lograrlo. Tres de los cinco grupos mantendrían las normativas fiscales de 2001 y 2003 aprobadas por el presidente Bush que están a punto de expirar y luego llevarían a cabo la fundamental reforma fiscal. La Fundación Peterson concluye que el Congreso y el presidente, aunque estén enfrentados, podrían aprender una lección de la unión de estas organizaciones:
Aunque las soluciones difieren enormemente, está claro que Estados Unidos no tiene por qué soportar esta perjudicial caída por el borde del abismo fiscal, ni tenemos por qué ser condescendientes frente a una trayectoria insostenible a largo plazo.
La versión en inglés de este artículo está en Heritage.org.
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