Hezbolá ataca a Israel: último capítulo en la larga guerra subrepticia entre Teherán y Tel Aviv
La larga guerra subrepticia entre Israel e Irán ha cobrado forma...
La larga guerra subrepticia entre Israel e Irán ha cobrado forma en un choque con alto perfil en las últimas horas, conforme Hezbolá -personero de Irán- atacó a un convoy militar israelí, asesinando a dos soldados e hiriendo a otros siete. El ataque fue una reprimenda largamente anticipada por el ataque aéreo israelí sobre un convoy de Hezbolá durante el 18 de enero en Siria, que ultimó a seis militantes del grupo y a un general iraní desplegado en Siria como parte de la Fuerza Quds -cuerpo de élite de la Guardia Revolucionaria Islamica de Teherán.
El deceso del general iraní motivó que el comandante de la Guardia Revolucionaria, el General Mohammad Ali Jafari, amenazara a Israel con 'truenos que traerán ruinas'. Hezbolá también buscó vengarse por el ataque, que también acabó con la vida de Jihad Mugniyah, una estrella naciente que era el hijo del notorio líder de Hezbolá, Imad Mugniyah (éste fue responsable por los atentados de 1983 en las barracas de los Marines y de la embajada de los Estados Unidos en Beirut, en el Líbano.
Imad Mugniyah fue asesinado en un misterioso ataque con explosivos en Siria en 2008, por cuya responsabilidad Hezbolá señaló al Estado de Israel. Tras su muerte, su hijo Jihad fue adoptado (de acuerdo a informes) por el Mayor General Qassem Suleimani, poderoso líder de la Fuerza Quds.
Hezbolá se ha mostrado involucrado con recurrencia en la guerra civil siria bajo la dirección de Irán, con el objeto de sostener al régimen de Basher al-Assad. Aproximadamente cinco mil combatientes de Hezbolá han sido desplegados dentro de Siria, junto con milicias shiítas respaldadas por Teherán y provenientes de Irak y Afganistán -y sin considerar los cientos de elementos provistos por la Guardia Revolucionaria iraní.
Oficialmente, Israel ha permanecido neutral en la guerra civil siria, pero ha advertido que tomaría acción militar para impedir que Irán o que Siria transfieran armamento químico (o bien tecnología militar de avanzada) a Hezbolá. Israel dio forma a estas advertencias con el empleo limitado de ataques aéreos, incluyendo un ataque de importancia ejecutado el pasado mes contra depósitos en el aeropuerto de Damasco -de los que se reportó contenían sistemas iraníes de misiles destinados a Hezbolá.
Irán y Hezbolá exhiben podersas razones para impedir que los ataques militares limitados se extiendan hasta cobrar forma de guerra abierta. Hezbolá se ha extendido pero sin contar ya con grandes recursos y tiene sus manos ocupadas en llevar adelante una guerra brutal en Siria. Por su parte, Irán desea preservar las fuerzas militares de Hezbolá como disuasión ante un posible ataque militar israelí contra la infraestructura nuclear de Teherán.
Pero, tanto Irán como Hezbolá pueden torcer el conflicto en la arena militar -terreno donde Israel conserva la ventaja-, llevándolo al espectro de las operaciones terroristas, su punto fuerte. Al momento, existe un informe que versa que la agencia oficial Fars de Irán y un sitio web vinculado con la Guardia Revolucionaria iraní han publicado artículos que arengan a asesinar a los hijos del primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu.
Es probable que las recientes amenazas le agreguen una nueva dimensión al discurso de Netanyahu al parlamento, el próximo 3 de marzo, y en relación a la temática nuclear iraní.
Traducción al español: Matías E. Ruiz | Artículo original en inglés, en http://dailysignal.com/2015/01/29/hezbollah-attacks-israel-latest-chapter-long-shadow-war-israel-iran/
Analista senior en el Centro Douglas y Sarah Allison para Estudios de Política Exterior en la Fundación Heritage. Ha desarrollado numerosos trabajos sobre asuntos relativos al Medio Oriente y sobre terrorismo internacional desde 1978. Es columnista en medios televisivos norteamericanos y ha testificado en comités del congreso estadounidense en relación a temáticas de seguridad internacional.