Oxfam y la manipulación: 'Juan Pérez es más rico que dos mil millones de pobres'

La preocupación por la desigualdad en el mundo ha recibido un nuevo impulso este pasado lunes, cuando Oxfam difundió la noticia de que las 62 personas más ricas del mundo poseen tanta riqueza como 3,5 mil millones de personas –la mitad de la población mundial. Se trató de un poderoso foco de luz sobre las injusticias en el globo, y la cifra corre ahora como pan caliente en los medios de comunicación.

Pero aquí hay algo extraño. Mi hija -por ejemplo- tiene una fortuna de alrededor de un centenar de coronas (unos 12 dólares) en su alcancía. No es casi nada pero, de acuerdo a las tablas de Oxfam, ella tiene más recursos que los dos mil millones más pobres del planeta juntos. ¿Cómo puede ser posible? Simplemente, porque esos dos mil millones no tienen ningún patrimonio. Por lo tanto, se requiere sólo un poco de dinero ahorrado para ser más rico que ellos, y es suficiente con que las 62 personas más ricas del mundo posean el 0,7 por ciento de la riqueza total del planeta, para que tengan más que la mitad más pobre.

El problema es que mi hija cuenta con un centenar de coronas ahorradas, mientras que los dos mil millones no tienen nada. El problema, entonces, no es la desigualdad, sino la pobreza. Si distribuímos la riqueza de los más ricos entre la mitad más pobre, les tocarían unos 500 dólares a cada uno. No es insignificante, pero sólo permitiría aumentar sus ingresos con un quinto durante sólo un año. La única manera sostenible de sacar a la gente de la pobreza es que el dinero sea invertido en la creación de mayor prosperidad. Curiosamente, esto sucede en los países que permiten a las personas -incluso las de origen más modesto- realizar sus ideas aunque más no sea en un garaje y se vuelvan muy, muy ricas si tienen éxito. En la década de 1970, antes de que China permitiese que alguien se hiciese multimillonario, 9 de cada 10 chinos vivían en la pobreza. Hoy, viven en la pobreza uno de cada diez.

El gran relato de nuestro tiempo no es la triste historia de la desigualdad, sino el brillante relato de la mayor reducción de la pobreza de la historia. Entre 1990 y 2015, la proporción de personas en extrema pobreza en el mundo disminuyó de 37 a 10 por ciento. 138 mil personas salieron de la pobreza cada día durante 25 años.

Entonces, ¿por qué son tantos los que todavía no tienen ningún patrimonio? En parte, debido a que la pobreza sigue siendo generalizada y, en parte, porque Oxfam saca las cuentas de una manera muy extraña. La organización calcula los activos menos los pasivos y así personas de sociedades prósperas con, por ejemplo, grandes deudas de estudios son consideradas como profundamente pobres, incluso si tienen altos salarios. Según Oxfam, más de una de cada cuatro personas consideradas entre las más pobres del mundo vive en Europa o América del Norte. Por lo tanto, cuando Oxfam calcula los activos de la mitad más pobre del planeta, lo hace deduciendo las deudas de estudios e hipotecarias de esos 'pobres' de sociedades ricas.

Por todo esto, antes de permita Usted que le engañen nuevamente con las cifras de Oxfam, recuerde que, si administra un patrimonio total de unos 12 dólares, puede ser contado como parte de la élite mundial. Entonces, los grandes titulares de los periódicos podría tratar de Usted y decir: 'Oxfam revela que Juan Pérez es más rico que dos mil millones de pobres juntos'.


* Traducción: Mauricio Rojas