EE.UU. lanza primer gran ofensiva terrestre en Siria

Según han explicado este miércoles funcionarios estadounidenses a agencia Reuters, miles de combatientes respaldados por Estados Unidos están lanzando una gran ofensiva contra el Estado Islámico (ISIS), con el objetivo de capturar una franja crucial del norte de Siria conocida como la "bolsa de Manbij".

 

La operación, puesta en marcha ayer martes, pretende ahogar el acceso de combatientes del ISIS por la frontera turca. La ofensiva, que puede tardar semanas en completarse, tratará de poner fin a lo que los expertos han considerado la base logística del grupo terrorista por la impunidad con la que se han movido los milicianos del ISIS procedentes de Europa durante años. "Es importante porque es el último embudo que queda", señaló un funcionario militar de EE.UU.

 

Un pequeño número de unidades de las fuerzas especiales estadounidenses apoyará la ofensiva en territorio sirio en calidad de asesores. Según los funcionarios consultados por Reuters, estos militares se mantendrán a cierta distancia del frente. "Van a estar muy cerca porque los necesitan los combatientes (sirios) para completar la operación. Pero no van a entrar en combate directo", explicaron.

 

La operación militar también contará con el apoyo de ataques aéreos lanzados por la coalición encabezada por EEUU, así como por fuego de artillería desde la frontera turca.

 

Con el fin de no tensar más las relaciones con un socio vital para la OTAN como es Turquía, la operación estará mayoritariamente compuesta por árabes sirios en lugar de la milicia kurda Unidades de Protección Popular (YPG). Cabe recordar que los árabes sirios representan sólo una sexta parte de la población total del país. Aún con ello, el Observatorio Sirio de Derechos Humanos, radicado en Londres, asegura que militantes kurdos de las milicias YPG sí forman parte de esta operación. 

 

Turquía se ha mostrado muy preocupada por los avances que están protagonizando las fuerzas kurdas (terroristas en la visión de Ankara) a lo largo de su frontera, por lo que se ha opuesto rotundamente a que sean éstas quienes tomen el control de Manbij. Y es que la milicia kurda YPG ya controla alrededor de 400 kilómetros ininterrumpidos de frontera turco-siria. 

 

"Después de que ellos (árabes sirios) tomen Manbij, el acuerdo es que el YPG no se quedará. Así que habrá árabes sirios ocupando las tierras de la Siria árabe tradicional", señalaron los funcionarios estadounidenses.

 

Expertos consultados por Diario Turco afirman que ésta es solo la primera de las grandes operaciones que se van a dar en Siria en las próximas fechas. EE.UU. tiene previsto lanzar una segunda operación contra la denominada capital del ISIS, Raqqa, respaldando a fuerzas sirias en sus avances.

 

Washington considera que, con la previsible toma de Manbij, la capital Raqqa estará aún más aislada y será prácticamente imposible para el aparato organizativo del ISIS canalizar suministros hacia su bastión.  

 

Obama ya ha autorizado la presencia de 300 soldados estadounidenses de las fuerzas especiales en territorio sirio para respaldar este tipo de operaciones.