INTERNACIONALES: LISA CURTIS

Crisis en el sudeste de Asia: ataque contra el ejército de la India en Cachemira

Las tensiones entre la India y Paquistán se han incrementado a lo largo de...

19 de Septiembre de 2016

Las tensiones entre la India y Paquistán se han incrementado a lo largo de los últimos meses. Sin embargo, el pasado domingo, el ataque contra una base del Ejército de la India en Cachemira arrojó un saldo de 17 muertos, y ha devuelto a la región a una antesala de crisis.

El ataque tuvo lugar en cercanías de la Línea de Control (LoC), que divide a la cachemira india de la paquistaní, y remite al ataque con mayor número de bajas contra las fuerzas de seguridad indias en más de dos décadas. En 2002, un ataque terrorista contra una base india en Jammu, Cachemira, había tomado la vida de más de treinta personas (la mayoría de ellos, miembros de familias de oficiales del ejército indio), y casi condujo a un conflicto bélico entre la India y Paquistán.

CachemiraEl grueso de las bajas tras el ataque del domingo tuvo lugar como resultado de incendios que consumieron los búnkers temporarios del ejército; ello sucedió en horario de la mañana, cuando se registró el ataque con granadas y armas de mano. Los cuatro terroristas involucrados en el ataque fueron ultimados en un tiroteo que se extendió por tres horas.

India ha depositado culpas por el ataque en su vecino Paquistán; el ministro de Interior, Rajnath Singh, calificó a Paquistán de 'Estado terrorista'. Tras el evento, Singh canceló viajes que había planeado a Rusia y los Estados Unidos, y llamó a una reunión de emergencia para estudiar el escenario.

El primer ministro indio, Narendra Modideclaró que los perpetradores del ataque 'no esquivarán el castigo', mientras que el secretario general del partido Bharatiya Janata (BJP), Ram Madhavdijo que los días de 'la quietud estratégica [de la India] han llegado a su fin'.

El ataque sobreviene luego de dos meses de desorden civil en Cachemira, fogoneado por el homicidio del líder militante popular Burhan Wani. El desorden se ha cobrado la vida de casi 85 locales, en tanto el primer ministro de Paquistán, Nawaz Sharif, había planeado subrayar las tensiones regionales, culpando a la India por abusos contra los derechos humanos -planea hacerlo en su próximo discurso ante la Asamblea General de Naciones Unidas, programada para este miércoles.

Una réplica militar de parte de la India podría incluir ataques sobre campos de entrenamiento terroristas en territorio paquistaní. Pero tales ataques con toda probabilidad conducirían a una escalada militar y, potencialmente, a una guerra a gran escala entre ambas naciones. India habrá de medir las consecuencias de permitir que la región involucione a partir de un conflicto militar con Paquistán, en una instancia en la que Nueva Delhi busca ser vista como una potencia en crecimiento y que exhibe un comportamiento responsable.

Estados Unidos ha condenado con firmeza el ataque terrorista, aunque debería dar un paso extra para desactivar las tensiones -podría hacer esto, convocando a Paquistán a que controle efectivamente a las redes de grupos terroristas que operan con libertad en su suelo. El hecho de que Paquistán ha fracasado a la hora de procesar a los perpetradores de los ataques de Mumbai en 2008, alimenta la creencia de que tolera el terrorismo que opera por fuera de sus fronteras.

De momento, el balón se encuentra del lado paquistaní, al momento de desactivar tensiones. Solo medidas concretas, como el arresto de líderes militantes y la clausura de campos de entrenamiento, convencerán a la India (y al mundo) de que Islamabad se toma en serio el impedir que su territorio sea utilizado para ejecutar atentados terroristas contra sus vecinos.


Artículo original en inglés, en http://dailysignal.com/2016/09/18/major-attack-on-indian-army-in-kashmir-puts-south-asia-on-crisis-footing/

 

Sobre Lisa Curtis

Es analista senior en la Fundación Heritage (Washington, D.C., Estados Unidos); experta en las relaciones económicas y políticas entre el gobierno de EE.UU. e India, Paquistán y otras naciones del Sudeste de Asia. Su trabajo también es publicado en español en la web Libertad.org.