La innovación en la industria, como motor del desarrollo

De acuerdo a la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), la innovación se define como la implementación de un servicio novedoso o significativamente superiormejor; o como algún proceso o método de marketing o método organizacional en prácticas empresariales de superior presentación.

Las innovaciones vienen a mejorar aquello con lo que ya contábamos antes. Un proceso o servicio superador determinará un aumento de la productividad, lo cual terminará generando un desarrollo económico traducible en un mayor bienestar social, o en un incremento del Producto Interno Bruto de una nación dada.

A nivel histórico, a los años dorados del capitalismo entre el final de la Segunda Guerra Mundial y el inicio de la crisis financiera en 1973, le siguieron períodos de crecimiento cada vez más breves, interrumpidos por graves crisis económicas cada vez de mayor magnitud, en razón de la incipiente globalización y de la interdependencia de las economías a nivel mundial.

En simultáneo, se profundizaron las desigualdades entre países, en tanto las tasas de crecimiento se tornaron cada vez más lentas en países desarrollados -naciones que, adicionalmente, deben lidiar con la problemática de poblaciones en retroceso o en estancamiento demográfico.

No obstante, la historia trajo consigo numerosas tecnologías revolucionarias como la Revolución Digital, la cual dio inicio en los años ochenta y noventa con el desarrollo de computadoras inteligentes y, en particular, con la expansión del Internet.

Esto abrió las puertas a la Humanidad para un abanico de nuevas posibilidades para beneficio de sus economías, toda vez que los efectos positivos de las nuevas tecnologías a nadie son ajenas. La implementación de innovaciones tecnológicas ha mejorado la calidad de vida de las personas, dotando a las economías de un marcado dinamismo en el marco empresarial.

Un claro ejemplo de una adaptación exitosa a innovaciones revolucionarias es el de la industria de juegos tradicionales o de mesa. Ante el auge del Internet, los protagonistas del rubro supieron adaptar su industria a las nuevas tecnologías y proponer adaptaciones digitales de sus juegos. A título de ejemplo, los juegos de mesa son tal vez mejor representados por los tableros digitales del ajedrez, mientras los juegos de cartas ofrecen opciones tan diversas como las diferentes modalidades del blackjack o las famosas partidas del solitario. Asimismo, se cuentan también versiones digitales de los puzzles lógicos, como lo son las cuadrículas 9x9 del Sudoku.

En el sector de la salud, los avances en tecnología se traducen en una mejor prevención de enfermedades y en hospitales más modernos, y esto significa poblaciones más sanas y con una esperanza de vida extendida. A nivel productivo, una población sana es una población con capacidad de trabajar y de contribuír al desarrollo del país.

La industria de la agricultura también se ha beneficiado enormemente de innovaciones a nivel de maquinaria y de herramientas automatizadas que aceleran los procesos de cultivo y recuperación de alimentos. La innovación en la industria alimentaria es esencial para abarcar problemas de hambre en el mundo.

Pero al mismo tiempo, el contexto climático de nuestro entorno nos obliga a pensar en innovaciones que vayan en pro de reducir nuestra huella de carbono en el planeta. La adopción de estrategias de desarrollo de energías renovables será la innovación que más impulse a las economías en los próximos años.

Los países con condiciones climáticas favorables como el sol, viento o ríos y mareas son ideales para aventurarse en inversiones de turbinas eólicas, placas solares y plantas hidroeléctricas. En la mayoría de los países latinoamericanos, aún existe un gran potencial para innovar en materia de energías renovables, por lo que es una de las vías principales de desarrollo para apuntar en las agendas gubernamentales.

Finalmente, la cooperación internacional es igualmente clave para generar externalidades positivas a raíz de innovaciones. La implementación de innovaciones comprobabas en otros países puede ayudar a acelerar las fases de implementación, cuando otros mercados o industrias importan estos procesos. En fases más avanzadas, la inversión en investigación y desarrollo (I+D) será la que abra nuevos horizontes en términos de innovación. El fomento de la competición y la inversión en educación son, de igual manera, mecanismos de respaldo necesarios para procesos y bienes innovadores.