Perspectivas favorables -aunque plagada de desafíos- para la economía global

En tiempos recientes, la economía mundial ha registrado señales positivas recurrentes en materia de recuperación y el crecimiento, especialmente en las primeras dos potencias económicas. Sin embargo, aún se computan serios desafíos, en particular debido al complejo contexto geopolítico que involucra a entidades con marcada influencia global.


Esto exige a las economías del orbe redoblar esfuerzos, concentrar recursos para el tiempo próximo y, a la vez, superar con máxima determinación las dificultades en el camino hacia la meta del desarrollo sustentable. De acuerdo a estadísticas publicadas desde hace semanas, algunas grandes economías del mundo se están recuperando y creciendo más rápido que lo previsto, convirtiéndose en una fuerza impulsora en la recuperación y el crecimiento económico del orbe.

 

El Departamento de Comercio de los Estados Unidos de América anunció este 27 de octubre que, tras dos trimestres consecutivos de caída en el crecimiento (el primer y segundo trimestre de 2022), la economía más grande del mundo registró inesperadamente un incremento del Producto Interno Bruto (PBI) de hasta un 2,6% durante el tercer trimestre. En teoría, este resultado consigna que la economía estadounidense habría llegado al final de su ciclo recesivo. El presidente del país, Joseph Biden, dijo que este crecimiento del PBI es la más reciente evidencia de que su país aún se ha encaminado hacia un proceso de recuperación económica estable.

 

Hace días, en una encuesta de Refinitiv, los economistas también habían anticipado un aumento del 2,4% en el PBI estadounidense para el tercer trimestre de 2022, ligeramente por debajo de las cifras del Departamento de Comercio, y confirmaron el reverso en la tendencia de crecimiento de la economía americana -luego de registrarse dos trimestres consecutivos en contracción.

 

De igual manera, la República Popular China, segunda economía más grande del planeta, reportó un favorable incremento en el tercer trimestre del año. En consecuencia, durante este período, el crecimiento económico del gigante asiático reportó un 3,9 %, superior al 3,4 % pronosticado por los analistas en una encuesta de Reuters, y casi diez veces superior al alza del 0,4 % consolidado durante el segundo trimestre. La Oficina Nacional de Estadística en Pekín evaluó que su economía había superado los impactos negativos causados por “numerosos e inesperados shocks”. Los principales indicadores económicos se habían recuperado y estabilizado “dentro de límites razonables”.

 

Asimismo, se registró un satisfactorio impulso de crecimiento en múltiples economías de escala mediana y grande en otras regiones del mundo. Por ejemplo, en el informe de la Actualización sobre la situación macroeconómica de Vietnam publicado recientemente, el Banco Mundial (BM) señaló que, en el tercer trimestre del año, la economía del país indochino alcanzó una alta tasa de crecimiento del 13,7 % en comparación con igual lapso del pasado año.

 

Como tal, la cifra acumulada en los tres trimestres totalizó 8,9% respecto al mismo período de 2021. En particular, muchas organizaciones internacionales como Moody's, Banco Mundial, el Fondo Monetario Internacional (FMI) y el Banco Asiático de Desarrollo (BAD), evaluaron positivamente la situación socioeconómica de Vietnam, y pronosticaron con optimismo que su crecimiento económico en 2022 y 2023 se encuentra entre los más altos del sudeste asiático.

 

Según expertos e instituciones económicas-financieras internacionales, el buen ritmo de crecimiento de las economías, especialmente de las principales, en el tercer trimestre de 2022, es una señal positiva para la economía global. Sin embargo, consideran que persisten “aún serios desafíos” que deben ser asumidos por las economías del orbe.

 

Desafíos en el horizonte

 

La agencia de noticias Bloomberg anunció, tras analizar los datos de crecimiento de los Estados Unidos, que es “notablemente extraño” el panorama económico del país, agregando que los signos son contradictorios. Los precios al consumidor siguen incrementándose, mientras que el gasto de los hogares está bajo presión y con la suba de las tasas hipotecarias, se enfriará el mercado inmobiliario. Las grandes compañías privadas informaron resultados contrastantes de negocio, que confundió al mercado de valores.

 

Mientras tanto, de acuerdo con los economistas de Morgan Stanley, es probable que el tercer trimestre sea el pico de crecimiento y que el cuarto trimestre de 2022 y posiblemente todo 2023, no logren este nivel de incremento.

 

De igual forma, Brittany Brinckerhoff, asesora financiera de Hilltop Wealth Advisors en Carolina del Norte (Estados Unidos), previó que la inflación se mantenga alta y que la Reserva Federal (Fed) aún probablemente continúe aumentando las tasas de interés. Por lo tanto, dijo, la economía de Estados Unidos puede continuar desacelerándose.

 

De manera más conservadora, Richard F. Moody, economista jefe de Regions Financial, evaluó que, en general, el panorama económico estadounidense se está deteriorando. Esto se debe principalmente al aumento de la inflación y de las tasas de interés.

 

De igual modo, con los datos de la economía china y de algunas otras economías de buen crecimiento, los expertos y las instituciones económico-financieras internacionales han señalado con claridad desafíos, incluso riesgos.

 

En el complicado contexto geopolítico de diversas regiones, especialmente en Europa, con el prolongado conflicto ruso-ucraniano y las tensiones preocupantes en la región del noreste de Asia, plantean riesgos y desafíos para la economía global en general y para cada nación en particular. En consecuencia, junto con los crecientes esfuerzos y la cooperación internacional para enfriar los puntos críticos geopolíticos, los gobiernos aún deben adoptar de manera proactiva medidas destinadas a enfrentar escenarios inesperados y proteger sus economías.