Kirchner se reunió con el automovilista agredido por piqueteros

Al igual que ocurriera con el taxista atacado a golpes de puño por piqueteros el año pasado, el Presidente Kirchner invitó a Fabián Morello a la Casa Rosada, a modo de expresarle su solidaridad ante la situación que lo tuvo como víctima de piqueteros. Morello debió presenciar cómo los piqueteros de la Aníbal Verón, en una nueva exhibición de actitud delincuencial, destrozaban su vehículo con piedras y palos, pero perdió el control cuando vio que sus hijos corrían peligro y procedió a defenderse. Tal actitud lo llevó a que los piqueteros decidieran atacarlo a golpes de puño, y en una actitud que ya dejó de ser inédita, otro grupo de ciudadanos e incluso motociclistas se sumaron en su defensa. Recién en ese momento intervino la Policía Federal y procedió a la detención de uno de los agresores. Ahora Morello ha decidido iniciar acciones legales por falta de protección, aunque no definió si la parte demandada será el Estado o contra la Ciudad de Buenos Aires. El detenido fue confirmado con prisión preventiva, y los cargos presentados fueron de daños, lesiones y resistencia a la autoridad. No hay parámetros para especular con una posible sentencia para el piquetero, pero ante situaciones similares acontecidas anteriormente, los agresores recuperaron su libertad ante la insistencia de grupos de manifestantes que, como ya es conocido, marchan a las comisarías con el objetivo de pedir la liberación de los individuos. No llama la atención el hecho de que otros ciudadanos intervinieran en defensa de Morello, hartos de ver cómo agrupaciones piqueteras con base en el conurbano bonaerense obstruyen las arterias porteñas, exhibiendo palos y armas de fuego -comprobados en las fotografías de los principales medios-, y recurriendo finalmente a actitudes violentas. Tampoco sorprende la actitud de ciertos medios de tirada masiva de Buenos Aires, que procedieron a hacer ver al automovilista como "responsable" de los hechos, simplemente por haber querido sortear el piquete. La inacción de las fuerzas de seguridad -que tienen órdenes de no intervenir por parte del Estado- cada vez lleva a un creciente estado de furia de los vecinos de Buenos Aires, quienes poco a poco pasan a involucrarse con mayor firmeza en el repudio a las manifiestaciones de piqueteros y de autodenominados "desocupados".