Las responsabilidades del Gobierno en el caso Southern Winds

Desde este periódico detallamos oportunamente quiénes podían ser algunos de los implicados a nivel gubernamental y explicamos qué cuota de responsabilidad le cabía a cada uno de ellos. En las acciones de estos personajes se encuentran los reales motivos por los que el juez Liporace no ha investigado a fondo el tema SW. Por "consejo" de funcionarios del Ejecutivo, el magistrado manejó los datos más importantes de la causa a través de un legajo paralelo que no está incluido en el expediente principal y en donde se detallan, por ejemplo, todos los domicilios donde estuvo la droga antes de que saliera de país. Mientras tanto, algunos de los detenidos "no políticos" empiezan a presionar a través de crípticos mensajes a sus poderosos "socios" del Gobierno. Por caso, Fernando Arriete, el procesado jefe de ventas internacional de SW, dijo lacónicamente que “Juan Maggio (presidente de SW) me utilizó para gestionar préstamos u otra forma de obtención de fondos que él no sabía manejar. Eran interminables las noches que tenía que aguantar sus depresiones comiendo en [el restaurante] Malacara porque estaba sobregirando financieramente”. No es casual la referencia de Arriete a Malacara, ya que allí se reúnen algunos de los actores políticos de primera y segunda línea que estarían involucrados en el tema de las valijas. Tal como contamos hace varias semanas, Malacara sería parte de una sociedad llamada Sifón SA e integrada por tres políticos muy particulares: -Daniel Jorge Razzetto: presidente del Club Quilmes y señalado por más de una fuente como “traficante de drogas” en el mismo partido bonaerense. -Anibal Fernández: ministro del Interior, denunciado por este medio por proteger a una banda de narcotraficantes también de Quilmes. Fernández y Razzetto son amigos personales. -Ricardo Jaime: secretario de Transportes. Señalado por Walter Beltrame como mandamás de SW. Jaime fue puesto en su cargo por el ministro de Planificación Julio De Vido y es testaferro del presidente Kirchner en la empresa Conarpesa. Nada parece ser casual. Sobre todo cuando tenemos en cuenta que Jaime es uno de los que más protegió la inviable ruta a Tacna de SW. El mensaje es certero. Sentido común Cualquier persona que analice fríamente y despojado de toda subjetividad el tema de las valijas de SW, no podrá dejar de notar que se hace excluyentemente necesario el manto protector de la política no sólo para poder llevar adelante el envío de drogas, sino también su posterior encubrimiento judicial y mediático, como lo estamos viendo en estos días. En tal sentido, hace unos días recibí una cara del ex Coordinador Administrativo de la Embajada argentina en Argelia, Omar Zatouch, una persona más que calificada para opinar sobre este tema. En la misma, el ex diplomático plantea algunas cuestiones desde el sentido común de manera brillante: "Argel, 26 de marzo de 2005 Sr. Christian Sanz Director de Redacción (sic) Tribuna de Periodistas Estimado Christian : Por lo general nunca comento la actualidad argentina, ni me meto en asuntos internos o de política interna, pero esta vez me parece propicia la oportunidad para llevar al conocimiento público unos comentarios, tratándose también de política exterior. El tema esta relacionado con los últimos acontecimientos producidos entre Ezeiza y Madrid, lamentables por la imagen que "vehiculen" en el exterior, llaman una aclaración con el buen sentido común, la lógica profesional y una puesta a punto de los elementos dados a conocer. He seguido atentamente su evolución a través de la prensa y en especial las notas de este periódico: ¿Cómo se puede avalar la idea de que un empleado de SW le ocurre llevar el bolígrafo y marcar embajada argentina como el destinatario de las valijas, si ya no había recibido la instrucción por otra persona de la compañía o fuera de ésta? El retiro de ese tipo de equipaje, que sea valija diplomática o anexo, requiere un buen conocimiento del aeropuerto y tener facilidades de acceso, de que no gozan que los empleados habilitados y autorizados del aeropuerto u otro personal con privilegios. La guardia civil insiste en que informó a la embajada. No importa la fecha, que sea el día mismo del viaje o posteriormente por unos días más. Ya que se puede ubicar al servicio que recibió la comunicación, con el número de teléfono llamado. Ese tipo de información, en una hora circula entre todos los funcionarios de la embajada, y no sirve negar con no estar al tanto de lo sucedido en Madrid. El jefe de cancillería de la embajada no puede correr el riesgo de no informar al embajador y soportar sólo el peso de la información, ya que con el embajador enterrado tiene cobertura de éste y le traslada la responsabilidad. Es sabido por todo el personal diplomático de la cancillería, el proceso que rige la toma de posesión de la representación. El encargado de negocios entrega la embajada con un acta registrado llamado "Toma de posesión", desde las cuentas bancarias, la caja chica, los muebles inventariados de la cancillería y la residencia, el material oficial y los pasaportes diplomáticos. Asimismo, la comunicación verbal sobre el estado de la relación bilateral, la información sobre el funcionamiento de la representación y su seguridad. Queda muy sorprendente la reacción de la Cancillería, manejando el tema con calma para no despertar la atención y provocar ruidos en su entorno. Para cumplir con el procedimiento, el canciller ordenó al director de sumarios una investigación en la embajada, que según la información filtrada parece que un funcionario no contestó al cable interno con elementos convincentes. Que el embajador Carlos Bettini declara que no le comunicaron esa información a su llegada y que recién se enteró por la prensa, queda fuera de la lógica. O sea está mintiendo para esconder algo, o que hay que echar a todo el personal de la embajada por faltas graves y por incumplimiento de sus obligaciones. Al mismo tiempo en Buenos Aires, las autoridades del aeropuerto están avisadas y el juez Liporace empezó a investigar en el mes de octubre. Cuando unos ministros confesan haber tenido conocimiento de lo sucedido el año pasado, el Canciller Rafael Bielsa, declara en el senado que se enteró del asunto en el mes de febrero por la prensa. El problema de las valijas diplomáticas que sirven para la circulación de lo ilícito no data de hoy sino que tiene ya una historia en la cancillería. Se hizo con autorización de la cancillería en la embajada en Argelia, para importar moneda argelina mediante el cambio ilícito desde Suiza. Han servido también para la familia de Carlos Menem, titulares del pasaporte diplomático. Cabe señalar que una querella fue presentada ante la justicia contra la cancillería por este tema y otros producidos en la embajada en Argelia. Omar ZATOUCH Ex Coordinador Administrativo de la Embajada en Argelia E-mail : ozatouch@hotmail.com " Al pie de su misiva, Zatouch me comenta algo muy elocuente: "¿Viste la réplica de Alberto Fernández en el parlamento por el affaire de la SW? Demuestran que están sin argumentos y metidos hasta el cuello. Han transformado el escándalo de las narcovalijas en asunto económico y de quiebre de una compañía, por mala gestión del directorio e incumplimiento de la seguridad por la Fuerza Aérea. La clave de ese asunto está en la embajada en Madrid". Concluyendo En las últimas horas, el juez Liporace empezó a vivir uno de los peores momentos de su carrera: los camaristas denunciaron que su investigación pecaba de "confusa", "errática" y "desconcertante" y le señalaron que de las treinta medidas de prueba que le ordenaron que realizara a principios de mes, aún hay algunas que restan efectuarse: no se concretaron algunos de los allanamientos ordenados ni se cruzaron los números de teléfono que deberían haber sido entrecruzados. Mientras esto sucede, llama la atención que nadie hable de la nueva ruta de la droga que se está armando a través de Cali-Florianópolis-Corrientes, luego de que se “volteara” la ruta "Pajas Blancas" por el escándalo SW. No es casual que esto suceda al mismo tiempo en que el vicegobernador correntino, Eduardo Galantini, ha puesto en la presidencia del Banco provincial a Alejandro Retegui, hombre sospechado de narcolavado y perteneciente a la mafia de Tato Romero Feris. Seguiremos investigando...