Diego Maradona dice que no le imponen nada, pero Grondona ya lo acecha con su estrategia de "dos pinzas": convocó a Higuaín y removió a Gabriel Heinze

Las órdenes de Julio Grondona -titular de AFA y vicepresidente de FIFA- fueron categóricas: Gabriel Heinze no jugará más en la Selección. Por su parte, bajó línea para que "Pipita" Higuaín sea convocado para jugar ante Perú y Uruguay. Comprende don Julio que su suerte está irremediablemente atada a la del DT Diego Armando Maradona: si este fracasa en su faena de llevar al seleccionado argentino de fútbol a Sudáfrica, los medios y la afición sindicarán al "Padrino de AFA" como cabecilla del desastre. Fue él quien cedió y trajo al ex diez. Cedió ante el Grupo Clarín y ante una jamás comprobada exigencia del fanático promedio para que Maradona se sentara en la banca. Como sucede con Néstor Carlos Kirchner, nadie se hace cargo de haberlo votado... Para Diego ya es demasiado tarde. Perdió el rumbo del equipo (ningún jugador le responde) y, en su desasosiego, convocó a Ariel Ortega para enfrentar al combinado africano de Ghana en un próximo amistoso. Un partido que, dicho sea de paso, nadie quiere jugar y que solo rememora los peores momentos de rebelión. Otro arrebato: salió rápidamente Maradona a desmentir lo que ya todo el ambiente conoce, esto es, que Grondona es ahora el que manda, y que Carlos Salvador Bilardo es oficialmente el DT en las sombras. Diego ya ni "pincha ni corta". Su figura ha pasado a ser meramente decorativa. Puertas adentro, desde AFA solo hay esfuerzos (mediáticos) para cubrir las apariencias. El gran problema de Grondona es que no se puede dar el lujo de expulsar al director técnico. Ello implicaría un súbito reconocimiento a la propia incapacidad. Finalmente, su objetivo es cerrarle todos los caminos a Diego para que termine renunciando por propia cuenta. No solo dio Grondona la orden para que Higuaín fuera convocado; también se ocupó de empujar a Maradona para que se ocupara de decirle al inoperante Gabriel Heinze que no volverá a vestir la casaca nacional. Se obligó también al DT a que haga entrenar a los titulares con los juveniles dirigidos por el "Checho" Batista. Grondona también la emprendió contra Alejandro Mancuso -íntimo de Diego-, preguntándole abiertamente qué diablos se encontraba haciendo en medio de la Selección Argentina. Mancuso es conocido por ser "socio" de Maradona en sus peores excesos y salidas nocturnas que es mejor no relatar. Junto con Mancuso, Maradona armó tremendo escándalo hace pocos años en una terminal aérea brasileña, episodio que les valió a ambos unas horas de cárcel. Otro detalle, que por ahora la prensa intenta ocultar: Juan Sebastián Verón también está demasiado mal visto por el hincha y por la dirigencia del fútbol local. la "Bruja" acumula ya más papelones que cosechas. En el núcleo íntimo de Julio Grondona no faltan aquellos que recuerdan que Verón "no ha ganado nada" con la Selección y que, más bien al contrario, es asociado públicamente con reiterados fracasos. Razón no falta. Lo mejor que pudiera sucederle a Grondona es que Maradona renuncie antes del Mundial -si Argentina clasificara-. El conductor de AFA no está dispuesto a permitir que, tras un milagroso resurgimiento del equipo en pleno torneo, Diego intente anotarse el crédito por el logro, después de demasiados meses de probada incapacidad. Para Diego Armando Maradona, el problema es mucho peor de lo que se dice. Ya no corresponde hablar de la "condición terrena" del DT. Baste decir que el hombre hasta ha sido insultado a viva voz -y en su propia cara- por referentes de peso del seleccionado. Los nombres, todavía corresponde obviarlos por lógicas razones. A este paso, no faltará mucho para que juntos, afición y prensa especializada, terminen por despedazar al otrora gran jugador que supo morar dentro de Diego Armando. Sin importar cuánto jure él "por sus hijas". Latiguillo que ya tiene harto a más de uno. Por Ricardo White, para El Ojo Digital Sociedad-Deportes. Email: elojodigital.com -arroba- gmail.com.