España: Democracia Real moviliza decenas de miles de ciudadanos en cincuenta ciudades. El objetivo: demostrar que no son "mercancías en manos de políticos y banqueros"
Casi cien mil personas se autoconvocaron en España (antes lo habían hecho en Portugal) a través de la red, con la meta de dar a conocer su disconformidad, su indignación y su rechazo a las dirigencias políticas y económicas de cualquier tipo e ideología enquistadas en el poder.
En las crónicas de libros que el Sr. Director tuvo a bien solicitarme, le había recomendado algunos que preanunciaban esto que empezó a ocurrir el sábado y que -me temo (aunque espero)- ocurra de aquí en lo futuro. El Crash del 2010, La Muerte de la Política y sobre todo el Indignáos (que pueden consultarse en esta misma página), estaban anunciando lo que se venía: un final de ciclo y el comienzo de uno nuevo que, si bien todavía no tiene forma definida, muestra claramente qué es lo que no quiere el ciudadano. No quiere que se decida más en su nombre, en temas que influirán decisivamente en su vida o en la de sus hijos sin consultarlo; rechaza que se hipoteque el futuro de generaciones como se ha hecho con la deuda externa entre nosotros o con prestar dinero del Estado a los bancos que quebraron (por su exclusiva culpa), como se está haciendo en el mundo desarrollado. El ciudadano ya no tolera que sus representantes dejen de rendir cuentas sobre sus actos, ni que estos se perpetúen en el poder. No quiere impunidad. No quiere el ciudadano, en fin, que se haga, en su nombre, nada importante que no sea consentido, de una u otra manera, por él. Los dirigentes son sus mandatarios. No sus mandantes.
Tratamos de llamar la atención con algunos hechos que preanunciaban lo que se venía: dieciocho gobiernos latinoamericanos no terminaron su mandato por movimientos asamblearios, el e-governement, así como el presupuesto comunitario ya se usan aún entre nosotros; se promueve cada vez más el uso del plebiscito y el referéndum, los jóvenes se interconectan, se autoconvocan y deciden por Internet, etc.
Bajo el lema "No somos mercancía de políticos ni de banqueros", miles de "desempleados, mal remunerados, subcontratados en precario, hipotecados" y, en general, jóvenes y mayores antisistema se echaron ayer a la calle. La meta era exigir "un cambio de rumbo y un futuro digno", y a su vez, manifestarse en protesta contra las "reformas antisociales" auspiciadas por gobiernos "en manos de banqueros" que, dicen, imponen recortes de las condiciones laborales "en beneficio de los poderosos" (diario El País 15/5/2011).
Las protestas se iniciaron simultáneamente en las distintas ciudades y fueron convocadas por la plataforma Democracia Real Ya a través de redes sociales en el Internet. Fueron especialmente concurridas en ciudades como Madrid, Barcelona, Málaga, Alicante o Valencia. En la capital española, los convocantes lograron llenar la céntrica Plaza de Cibeles con gritos de "esta crisis no la pagamos", "no más corrupción, pasamos a la acción", "manos arriba, esto es un atraco", "PSOE-PP la misma mierda es" o "futuro de mierda, trabajo precario".
“Con los dirigentes a la cabeza o con la cabeza de los dirigentes”, decía aquí el General Perón, premonitoriamente. O los dirigentes políticos, sociales y económicos entienden y asumen lo que está pasando con la ciudadanía, o serán barridos impiadosamente de la escena pública.
Quien suscribe, considera que existe un reclamo generalizado en todo el mundo de participar en las decisiones de lo público. El ciudadano reasume el poder delegado. Al menos, hasta tanto las dirigencias comprendan que tienen un mandato revocable. Y se acostumbren a rendir cuentas.
Nota: el sitio web de Democracia Real se encuentra en la URL http://democraciarealya.es/
Por el Dr. Norberto Zingoni, para El Ojo Digital Internacionales
e-Mail: norberto3535@yahoo.es