Adrián López implicaría a Gerardo Ferreira y Juan Visconti -Electroingeniería e Infinity Group-

Estando ahora más seguro que en Marcos Paz, Adrián López -con doble custodia del servicio penitenciario y de la Policía Federal-, ya no teme por su vida. Está esperando que la Cámara Nacional de Casación Penal le decrete la excarcelación y así poder quedar en libertad para reunirse con su madre, su hermana y su hijo Gerónimo. Está convencido de que en prisión o en la calle está muy seguro porque si acaso lo mataran, caería el gobierno de Kirchner, al menos en su modo de ver. Pero lo que sí teme es que enemigos de este gobierno lo asesinen para provocar el descalabro de la presente Administración. López cree que es el ?Sarlenga"o bien el "Palleros? del kirchnerato. Cabe recordar que Sarlenga fue el arrepentido presidente de fabricaciones militares que complicó al menemismo en la venta de armas a Croacia y Ecuador. El teniente coronel Palleros fue el intermediario en la venta de armas y también confesó su participación activa. Hasta ahora, López sólo mencionó que el dinero de las coimas le habían dicho que iba a parar a manos del ministro Julio De Vido, pero al leer la revista Noticias de hace dos números, donde se habla del pago de una coima de 10 millones de dólares que recibiría Electroingeniría de Ferreira y Visconti, recordó que esta empresa era habitual compradora de las facturas truchas con destino a eludir el pago del impuesto a las ganancias y el IVA. Como no guardó papeles y lo que sabe lo tiene sólo en su mente, tiene en claro que Electroingeniería le compraba facturas a Calibán e Infinity o a las otras empresas dedicadas al mismo negocio y cuyos apoderados y presidentes conocía perfectamente, dado que a todos los venía a visitar el contador Andrés Galera, el cajero de José López, Secretario de Obras Públicas. En la siguiente nota explicaremos las actividades indebidas en que incurrió la empresa Electroingeniería.