Como abrazada a un rencor
Injustificadamente -teniendo en cuenta todo lo que ha recibido de él-, Cristina parece odiar al país; y actúa como si quisiera destruirlo aún más...
Injustificadamente -teniendo en cuenta todo lo que ha recibido de él-, Cristina parece odiar al país; y actúa como si quisiera destruirlo aún más...
No resulta una novedad para nadie que, desde que Cristina Elisabet Fernández Wilhelm se hizo cargo del Gobierno Nacional el 10 de diciembre de 2007, el país se ha visto envuelto en una espiral económica descendente.
El Ministro de Economía Hernán Lorenzino sigue ganándole la partida de ajedrez a un cada vez más débil Amado Boudou, ubicando en puestos claves a allegados de su confianza. El Secretario Legal y Técnico, Andrés Iturrieta -que asumió en ese puesto cuando el ministro era el actual Vicepresidente- renunció a su cargo.
Durante la pasada semana, al cumplirse sesenta años de la muerte de Eva Duarte de Perón, la Presidente de la Nación Cristina Fernández Wilhelm de Kirchner tomó la determinación de pedir -en público- a las autoridades monetarias del país que arbitren la medidas necesarias para que el nuevo billete de cien pesos con la imagen de Evita reemplace al actual, que lleva la del ex presidente Julio Argentino Roca.
El terrible esfuerzo para el cuento... Y el trabajo duro de mentir... El arduo rigor del falseamiento... Y el yugo de sofismas absolutos... Nos muestran ser los pobres sustitutos... De una falta lastimosa... De talento (G.A. Bunse, "Poemas de la Argentina Trágica")
La titular del Banco Central -íntima amiga de Cristina Fernández Wilhelm, Presidente de la Nación- encontró al culpable por la falta de dinero en los bancos: la gente. "Frente a la posibilidad de no tener billete, sobreactúan y retiran todavía más efectivo".