El Partido Republicano barrió en las Legislativas; qué sigue ahora

La embriagadora victoria de los Republicanos en las Legislativas (Midterms), en la que retomaron el control del senado estadounidense e incrementaron su mayoría en la Cámara de Representantes, pronto dará lugar a la sobria realidad. Mientras esperan el arribo de sus colegas recientemente electos para enero próximo, los legisladores del GOP enfrentarán la sesión de transición ('lame duck'), sobre la cual el líder del senado por la mayoría, Harry Reid, ya tiene planes. Los primeros saben que el Demócrata de Nevada tiene sus propias ideas respecto de cómo transitar los dos años finales del presidente Obama, previo a que los Republicanos se hagan del control de la Cámara Alta.

Los Republicanos se hicieron de siete bancas en la noche del martes, torciendo decisivamente el equilibrio de poder en el senado. Podrían incluso obtener dos bancas más, conforme las respectivas carreras en Virginia y Alaska aún deben clausurar sus conteos de manera oficial; en Louisiana, mientras tanto, la disputa se dirimirá el próximo 6 de diciembre. En la Cámara de Representantes, el GOP se anotó catorce (14) bancas, para garantizar su más holgada mayoría desde los años veinte. Pero, mientras los Republicanos se despachan en festejos por su victoria, los Demócratas -incluyendo a aquellos representantes y senadores que dejarán su puesto en dos meses- están preparándose para regresar a Washington, D.C. para legislar en la transición. Conocida esta etapa aquí como 'lame duck', las últimas semanas del Congreso Número 113 ofrece una oportunidad para proyectos para incrementar el gasto y otras medidas que serán presentadas en la Cámara y en el Senado.

'Cualquier tipo de asuntos controvertidos y proyectos presentados en forma masiva llegarán cuando 'Nosotros, el Pueblo' estimemos que es seguro distraernos de lo que suceda en Washington, D.C. para disfrutar de nuestra familia, el otoño y el fútbol', escribió recientemente el presidente de la Fundación Heritage y ex senador por Carolina del Sur, Jim DeMint; quien señaló, en relación a Harry Reid (Demócrata):

'Harry Reid se ha mostrado claro en su deseo de preservar el Estado de Bienestar corporativo para las grandes compañías 'ecológicas', atándolo a previsiones impositivas correctas que era 'necesario aprobar', en lugar de esperar al año siguiente para que fueran analizadas separadamente'

Con apenas cinco semanas remanentes para el cierre de la sesión, la Cámara y el Senado aún tienen trabajo legislativo por completar. Un proyecto para financiar al gobierno probablemente sea introducido al tope de las prioridades, desde que la medida que impuso un techo para el gasto federal fuera aprobada previo a la campaña, y expirará el 11 de diciembre. El senado aún debe actuar en relación a numerosas nominaciones presidenciales, así como también en el Acta de Autorización para la Defensa Nacional y un proyecto que habilitaría a los Estados para recolectar un impuesto adicional sobre las ventas en el Internet. En septiembre pasado, Reid anunció que los legisladores tratarían estos asuntos en las últimas semanas del año.

'Tenemos mucho que hacer durante la transición', declaró Reid. 'No quiero interponer límites a esto, pero estas cosas están presentes en mi mente'. El senador líder por la minoría, Mitch McConnell (Republicano), que ganó su reelección y se apresta a posicionarse como líder por la mayoría dijo, casi al mismo tiempo, que no creía que el senado intentaría aprobar legislaciones controvertidas en los tiempos de la transición, dado que los Republicanos controlan la Cámara de Representantes. Renovado por la victoria, el Republicano por Kentucky declaró este jueves que aún había mucho por tratar en el senado. 'El senado no ha estado haciendo mucho, de tal suerte que han quedado muchas cosas esperando tratamiento', afirmó McConnell en una conferencia de prensa ofrecida en Louisville. Sin embargo, los conservadores no están durmiéndose en los laureles.

Dan Holler, vocero de Heritage Action for America, brazo político de la Fundación Heritage, dijo a The Daily Signal:

La transición será la primera prueba para un comprensiblemente jubiloso Partido Republicano. Permitirle a los legisladores derrotados y cercanos al retiro promover decisiones sustantivas en una sesión post-electoral representaría un cachetazo a los votantes que enviaron un muy claro mensaje a Washington el día martes.

En enero, no obstante, los Republicanos estarán en control del senado por primera vez en ocho años, y McConnell declaró que esperaba la oportunidad para hacer que el congreso se movilice. 'Comenzaremos a funcionar', dijo. 'El cerrojo y la disfunción pueden llegar a su fin. Esto puede hacerse, con un senado que realmente trabaje'. Los conservadores ven ventanas de oportunidad para medidas firmes en materia de dependencia energética, opción escolar (school choice), transporte y estudios superiores. Por caso, el Acta HERO, introducida a comienzos de este año por el senador Mike Lee (Republicano por Utah), está diseñada para ampliar las oportunidades para la universidad.

Reid pareció enviar un mensaje conciliador este jueves, en vistas de la sonada derrota de su partido en los guarismos. 'El mensaje de los votantes es claro', dijo Reid en un comunicado preparado previamente. 'Ellos quieren que trabajemos juntos. Espero trabajar con conjunto con el senador McConnell con miras a lograr cosas para las clases medias'.

En Louisville, McConnell dijo a los periodistas acreditados que el GOP tratará Obamacare en el comienzo del Congreso Número 114, dado que numerosos miembros han buscado repeler el Acta de Cuidados Médicos Sustentables (Affordable Care Act). El legislador dijo que desea eliminar la ley de cuidado de salud estatal, pero los legisladores del espacio definirán el tema ni bien regresen a Washington, D.C. 'Trataremos este asunto en una miríada de formas', declaró.

El president Obama, sin embargo, dijo poco tiempo después en la Casa Blanca que no firmará un rechazo de su icónico logro legislativo si el congreso así lo decidiera en 2015. McConnell también se refirió a señales frente a que el presidente intente efectivamente detener la deportación de inmigrantes ilegales -maniobra que el primer senador Republicano anticipó constituiría 'un gran error'. 'Sería como ondear una bandera roja en las narices del toro', declaró McConnell. 'Eso sería como envenenar el pozo', agregó.

En su propia conferencia de prensa, Obama anticipó que tomaría una decisión ejecutiva sobre el sistema inmigratorio previo al final del año. Declaró a los periodistas:

Lo que haré es esperar. Creo que es justo decir que he mostrado mucha paciencia, y que he intentado trabajar con criterio bipartidista en todo lo que ha sido posible, y seguiré intentándolo. Pero, al mismo tiempo, imaginemos qué podemos hacer por vías legales y por la vía de decisiones ejecutivas para mejorar el funcionamiento del sistema vigente.

A pesar de seguir indicando que eludirá al congreso para acercar a los inmigrantes ilegales a la ciudadanía -lo que los oponentes consideran como una amnistía para quienes infrinjan la ley-, el presidente afirmó que espera trabajar junto a los Republicanos. Invitará a los líderes Republicanos y Demócratas a la Casa Blanca este viernes:

'Estoy dispuesto a trabajar con el nuevo congreso para hacer que los próximos dos años sean todo lo productivo posible. Me comprometo a evaluar las ideas sin tener en cuenta su origen Demócrata o Republicano, a los efectos de considerar si funcionan para el pueblo estadounidense'.

Para el nuevo congreso Republicano, declaró Holler, 2015 ofrecerá una oportunidad para que el GOP vuelva a las raíces de lo exigido por la ciudadanía. 'En enero, habrá una oportunidad para que el Partido Republicano se quite de encima su percepción negativa, esto es, la percepción de que es un espacio relacionado con la imagen de las grandes empresas', dijo el vocero de Heritage Action, a lo cual agregó:

'Con el diseño de una agenda que promueva oportunidades para todos, el partido podrá, potencialmente, anotarse más victorias en materia de política pública. Más importante, podrá demostrar una agenda con capacidad para unir a los estadounidenses en torno de los principios conservadores. Los detalles importan, pero la oportunidad es tremenda'.