La villa 1-11-14, convertida en centro mayorista de drogas
Claudio Izaguirre -titular de la Asociación Antidrogas de la República Argentina-, expuso en un artículo de Diario Popular los modos en que los residentes de la Villa 1-11-14 de Bajo Flores han construído un imperio gracias a la comercialización de drogas ilegales. La inacción oficial.
Pasillos obturados por rejas para evitar el paso de patrulleros, frentes enmascarados con puertas falsas, callejones virtualmente techados para impedir cualquier avistaje aéreo y hasta sistemas de timbres diseminados en la periferia del asentamiento poblacional para advertir sobre inesperadas redadas, son algunas de las particularidades urbanísticas de la Villa 1-11-14, en el Bajo Flores, un enclave donde una poderosa organización criminal ejerce un control mafioso y convierte al lugar en un redituable "centro mayorista" de la comercialización de drogas para la Capital Federal y el Gran Buenos Aires.
Especialistas en cuestiones de seguridad y estudiosos de la amenaza encarnada por los narcos instalados en los núcleos habitacionales, indicaron a DIARIO POPULAR que organizaciones de este tipo instrumentan un férreo dominio orientado a resistir, cuanto menos a erosionar, la presencia del estado en ese ámbito, a la vez que señalaron a la Villa 1-11-14 como un epicentro de esa actividad criminal sostenida a fuerza de violencia y sangre.
El caso particular de la villa del Bajo Flores, que esta semana estuvo en el candelero al trascender públicamente los intentos del Club San Lorenzo de Almagro para recuperar terrenos en el barrio de Boedo a efectos de trasladar parte de las actividades de la institución que hoy se realizan frente a la 1-11-14, encuadra en la presencia de una organización que maneja la distribución y venta de cocaína, paco y marihuana a través de una red con ramificaciones a otras asentamientos en la ciudad y en conurbano bonaerense.
De hecho, la justicia realizó también una profunda investigación de la 1-11-1 que se convirtió en un resolución para enfrentar el avance criminal del grupo cuyo líder, Marco Antonio Estrada González, actualmente detenido en el Complejo I de Ezeiza tras haber sido extraditado del Paraguay hace más de tres año, irá a juicio el mes próximo acusado de seguir manejando desde atrás de las rejas la organización delictiva que opera en la villa.
El titular de la Asociación Antidrogas de la República Argentina (AARA), Claudio Izaguirre, aseveró en ese sentido que en la 1-11-14 "hoy todo sigue igual a como lo estaba en mayo de 2007", cuando tuvo lugar el allanamiento que derivó meses después con la detención de capo narco de nacionalidad peruana, quien había logrado escapar del procedimiento policial en una fuga espectacular que incluyó el robo de una avioneta en Saladillo con la que logró salir del país.